PROXECTO EPÍSTOLAS

----

4 MENCIóNS A Maximino Romero de Lema (1911-1996)

Estudou Dereito e a carreira sacerdotal. Ordenouse nesta última en 1944. En 1964 é nomeado obispo auxiliar de Madrid, en 1968 de Ávila, en 1973 Secretario da Congregación para o Clero no Vaticano con Pablo VI.
Epístolas
Mencionado/a [4]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
1947-01-20 Mencionado/a
Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1947
Nova York
Bos Aires
Vigo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1947 en 20/01/1947

Buenos Aires, 20 de enero de 1947
Sr. D. Francisco Fernández del Riego
Vigo

Mi querido amigo:

Hace algún tiempo recibí una carta tuya en la que me pedías te comunicase si había llegado o no un trabajo tuyo para el concurso de la F. de Sociedades Gallegas. Esta carta tardé mucho tiempo en recibirla pues la habías dirigido a una dirección que hacía años que había dejado, de modo que esa carta enviada por tí en el mes de mayo llegó a mis manos aproximadamente en septiembre. Ahora puedo decirte que tu libro de ensayos ha sido premiado, así como la traducción de poetas ingleses enviada por Plácido Castro , de manera que si no pude contestar a tiempo, me adelanto en cambio a darte la enhorabuena, así como a Plácido, y no podéis tener idea de la alegría que eso nos causa a todos los que estamos aquí y os estimamos profundamente. Quisiera que esta correspondencia que comenzaste tu a entablar con esta carta peregrina que yo contesto hoy, se continuase entre nosotros, pues si bien hemos perdido el contacto personal hace muchos más años que los que uno desearía hubiesen pasado, hemos tenido noticias vuestras bastante a menudo a través de cartas escritas a amigos nuestros de aquí o de algún que otro viajero.
De nuestra vida os suponemos enterados por [Rodolfo] Prada . Hemos trabajado mucho, con suerte y sin ella, de cualquier manera, haciendo de todo, pero tratando en todo momento de hacer honor con nuestra conducta y labor a Galicia. [Arturo] Cuadrado y yo hemos fundado dos editoriales dedicadas a publicar en parte libros gallegos, idea que tuvimos que abandonar por falta de eco en la emigración, no sin antes publicar unos cincuenta libros que por lo menos quedarán y darán idea de nuestra permanencia en ésta. Yo publiqué algunos álbums de grabados en madera, litografías y dibujos e hice exposiciones de óleos aquí y en Montevideo con bastante éxito. Además llevo escrito unas cinco o seis monografías sobre dibujantes y grabadores europeos para editoriales de ésta. Todos trabajamos lo que podemos, es el único modo de ir matando la nostalgia que nos corroe y el deseo de regresar. Algún día, ahí en Vigo, o en Santiago como en otros años, hablaremos de todo, cuando todo sea ya recuerdo.

Por aquí pasaron algunos compañeros nuestros de Facultad a quienes no quise ver, por ejemplo, [Francisco] Romero Lema , que estuvo en ésta una temporada de paso para el Perú.

Tu carta constituyó un pequeño acontecimiento cuando la tuve en mis manos y a pesar de que te referías concretamente al envío de una obra tuya, ella fué leída por todos nosotros porque era algo así como la seguridad de vuestra amistad y ello nos causó a todos una gran alegría. Con ella tuvimos la certeza de que a pesar del tiempo nuestros amigos, que recordamos constantemente, no nos habían olvidado.
¿Cómo te va en la profesión? Yo siento enorme nostalgia de ella, pues había comenzado a trabajarla con relativa suerte y facilidad y creo que nunca más volveré a ejercerla.

¿Qué hacen todos los amigos comunes? Sé que Maside ha hecho una gran exposición en ésa y que Plácido está ahí. Cuéntame de todos ellos, yo no voy a escribirle a Plácido y a Maside hoy mismo, deseo mantener correspondencia con vosotros, saber de todos. Un libro de dibujos mío, Homenaje a la Torre de Hércules , que lleva un precioso prólogo de Dieste y que está dedicado a algunos amigos de ahí, acaba de ser seleccionado por el Instituto de Artes Gráficas de Nueva York de acuerdo con la Biblioteca Pierpont Morgan de la misma ciudad, como uno de los trescientos mejores libros publicados en el mundo entre los años 1935 a 1945. Creo que es el único libro escogido de España y América Latina. Me produjo esta noticia una gran alegría por tratarse de unos dibujos que yo hice como homenaje lejano a Galicia.
Esperando noticias tuyas y rogándote transmitas saludos mios a todos los amigos de ahí, tú recibe el fuerte abrazo de tu amigo:


Luis Seoane

M/dirección:
L. Seoane
Bartolomé Mitre 3793-Dto. F
Buenos Aires

1959-02-18 Mencionado/a
Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1959
Bos Aires
Vigo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1959 en 18/02/1959

Buenos Aires, 18 de febrero de 1959

Sr. D.
Francisco F. Del Riego
Vigo

Querido Del Riego:
Recibí tu última carta y el recorte de tu artículo de La Noche sobre mi Segundo Libro de Tapas que te agradezco mucho. Este libro, como el anterior, obtuvo éxito, sobre todo, aparte de aquí, en Suiza y Alemania. Os envío otro de grabados en madera, Doce cabezas, que lo lleva Maiztegui que sale hoy en Yapeyú; es de edición numerada y limitada, lleva tres ejemplares, para García Sabell, Piñeiro y para tí. Recibí con motivo del Segundo Libro de Tapas una carta muy expresiva de Don Jesús Carro que me emocionó mucho y mucho más por su juventud. Creo que cuando ahí hablan de los mozos están hablando de unos jóvenes nacidos viejos, muy seriecitos, muy desengañados de todo, que creen que escribiendo unas páginas muy bien redactadas pueden cambiar el mundo que les rodea, suponiendo además que deben olvidarse de los hechos en que no participaron. Así los vemos al menos desde Buenos Aires. A mi me parecen casi todos muy parecidos a mi compañero de curso [Maximino] Romero Lema, que creo que ahora se llama Romero de Lema, y cuyas luces eran muy limitadas pero resultaba un buen estudiante y muy devoto y correcto, es decir, el tipo de hombre que Dios debe apartar de sí pero que Felipe ii tendría a su lado para llevar la contabilidad de los quemados, contabilidad que él llevaría inocentemente y con ideas muy justas sobre los pecados de los demás. No sé que es de él, es posible que sea, como sospecho, un excelente burócrata y lo recuerdo ahora a propósito de esos mozos que ya tienen en la memoria un “index” para todo lo que no deben recordar ni conocer. Es posible que nosotros estemos en el “index” y no formemos parte, como les ocurre permanentemente a los emigrantes, de la historia de Galicia. Solo tu con tu trabajo recuerdas a los que estamos fuera y te estamos agradecidos y por eso tambien nos emocionamos hasta las lágrimas con una carta como la de Don Jesús Carro, joven a pesar de llevar medio siglo a esos mozos de que nos hablan y a veces leemos. Por mi parte trabajo sin importarme demasiado todo eso y pensando estar a la altura de mi generación, una de las más completas y fecundas de cuantas tuvo Galicia y a la que yo no cambiaría por ninguna otra de las pasadas ni desde luego hasta ahora de las últimas, estas que simulan problemas metafísicos y amor a las flores humildes y a las montañas gallegas para no ocuparse del hombre gallego que les resulta una fatalidad para su género de preocupaciones. El ser mozo no es un problema de años sino de actitud ante la vida y nuestra generación es aún la moza en Galicia por lo que sé vé desde afuera. Que sorpresa se van a llevar el día que escuchen por ejemplo a Rafael Dieste, si algún día tienen la suerte de escucharle, al hablar de esos problemas que a ellos solo les sirve para hacer ejercicios escolares y con el que no cuentan para nada, y pongo solo un ejemplo. Más dejemos esto. Trabajo, repito, mucho. En este momento hay catorce murales míos en Buenos Aires aparte de alguno en Mar del Plata y San Juan y es posible que a fin de año exponga obras mías en museos de Basilea y Berna. En Basilea con Tamayo y Wilfredo Lam, y en Berna solo de obras mías. En el Centro Gallego me designaron de su Comisión de Cultura, que acepté por compromiso pero pienso renunciar tan pronto pasen estas vacaciones. La vida económica actual de Buenos Aires, de Argentina, el precio de las imprentas, hace imposible que G. E. salga más como hasta ahora, por lo tanto estoy estudiando una segunda época que la continúe. Aquí se está pasando por un momento de crisis bastante aguda, no se puede hacer de momento demasiado y para estos trabajos siempre me atuve a mis propios recursos sin protección de nadie, como aquí es bien sabido. En cuanto al C. G. de no poder hacer una labor que sea útil a un mismo tiempo a esa y a ésta conjuntamente, y para esto no nos entendemos, prefiero renunciar. Ahí se olvidaron que las relaciones que existen de esa entidad con Galicia las logré yo y no los millonarios de que tanto se ocupan y que son generalmente inútiles. Te digo esto a tí que es al único a quien por amistad puedo decirlo. Me gusta mucho la nueva colección de poesía de Galaxia y el acierto gráfico para su presentación de Xohan Ledo. Estos próximos meses aparecerá tu tomo sobre una generación gallega. Corregí las pruebas y va a ir muy bien ilustrado. Creo que es de mucho interés y si tu me permites voy a acompañarlo con un trabajo mío, breve, sobre la tercera promoción como tu la denominas. El título es lo que continúa preocupándome de modo que pueda ser útil para un público general.
Hemos estado con los Scheimberg a su regreso que vienen encantados de vosotros y de la gente de Santiago. Os recuerdan a Evelina y a tí con mucho cariño, muy agradecidos. Por mi parte tambien os agradezco mucho las atenciones que tuvísteis con ellos.
Bueno, contéstame con una larga carta y hablándome de tus proyectos. Mientras tanto, recibir Evelina y tu el saludo de Maruja y mío y tu el gran abrazo de:

Seoane

1959-03-18 Mencionado/a
Carta de Fernández del Riego a Seoane. 1959
Vigo
Bos Aires
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Fernández del Riego a Seoane. 1959 en 18/03/1959

Vigo 18-marzo 1959

Sr. D. Luís Seoane
Buenos Aires

Mi querido amigo:
Recibí tu carta a su debido tiempo. Me alegró mucho porque llevaba largo tiempo sin saber de tí. Las únicas noticias que tengo de esa son las que tú me das.
Hace una semana fui al puerto a esperar a Maiztegui. El barco en que venía llegó con tres días de retraso porque tuvo que capear un fuerte temporal en las Azores. Maiztegui pasó ocho días en Vigo, completamente feliz. Sintió mucho tener que marchar tan pronto para Madrid. Hablamos mucho de tí y de los amigos. Me entregó los tres libros de grabados en madera. Los de García Sabell y Piñeiro ya están en su poder. Realmente la obra es una verdaderamente maravilla. No sabes cuanto te agradezco la delicadeza de este magnífico obsequio. No son sólo los grabados y la presentación de la obra, que me gustaron extraordinariamente. Es también el prólogo, bellísimo. Creo que es uno de los más felices que has hecho. Con mi más vivo agradecimiento, quiero expresarte la más expresiva felicitación.
El otro día estuve en Santiago con don Jesús Carro y hablamos de tí. Te distingue con especial afecto. Coincido contigo en que, a pesar de la edad, se mantiene permanentemente joven de espíritu. Pero también entre los mozos hay muchos que poseen auténtica juventud. No niego que existen algunos con carga literaria excesiva. Pero otros, los más y cada día en mayor número, tienen preocupaciones vivas, inquietud y ansia de enfrentarse con los problemas del país. Yo hablo con ellos con cierta frecuencia, y me sorprende el espíritu que los anima.
Lo de Romero Lema es un caso que nada tiene que ver, en absoluto, con el de estos mozos. No lo he vuelto a ver desde que terminó la carrera. Sé que en el año treinta y tantos se fue a Bélgica e ingresó en un seminario. Ahora creo que está en Roma y que es prelado doméstico o cosa así.
Es una verdadera pena que renuncies al puesto que ocupas en la Comisión de Cultura del Centro Gallego. Pienso que tu presencia en ella, a pesar de las incomodidades y los disgustos, constituye una garantía para todos. Si mi opinión pudiese servir de algo, te rogaría encarecidamente que no abandonases el puesto.
En varias cartas te pedía que me mandases las publicaciones de Citania. Salvo las tres primeras editadas y A fiestra valdeira, no recibí ninguna más. ¿No podrías hacer que me enviasen los libros? Bastaba con que lo indicases en la administración de la editora. También solicité de Perfecto la misma cosa, pero con el mismo resultado negativo. Si es que hay alguna razón para que no me manden los libros, trataré de adquirirlos aquí, pues quisiera poseer todo el fondo. Tampoco me ha llegado el librito de grabados de Maside, que creo preparaste tú, y que mucha gente de Galicia ha recibido.
He llevado un gran disgusto con la desaparición de Galicia Emigrante. Durante el tiempo de su publicación ha desarrollado una magnífica labor, y al morir deja un tremendo vacío en la vida cultural gallega. Esperamos, sin embargo, que se inicie pronto una segunda etapa. Tu capacidad de entusiasmo y de iniciativa habrá de salvar –lo sé por experiencia– las dificultades.
Hace unas semanas falleció en Madrid Emilio Mosteiro. La noticia me impresionó mucho, pues le tenía gran afecto. Pero el desenlace era fatal porque tenía un cáncer de próstata.
Parece ser que, por fin, Insula va a publicar ahora la edición dedicada a Galicia. Algunos de los originales van a ser renovados y se incorporarán otros de América. Te escribirá García Sabell, si no lo hizo ya, en este sentido. Nos gustaría mucho, por ejemplo, que la firma de Dieste no estuviese ausente del número.
Yo sigo trabajando como siempre, agobiado con mil preocupaciones. Bien quisiera escribir uno o dos libros que tengo en proyecto, pero no dispongo de tiempo alguno. Últimamente amplié notablemente la conferencia que dí ahí sobre Valle Inclán y la envié a Portugal para incluirla en la serie de trabajos de homenaje al pensador Joaquim de Carvalho, que se publicarán en varios tomos.
Y nada más por el momento. Con saludos muy afectuosos a Maruja y de Evelina para los dos, te manda el fuerte abrazo de siempre
Fdez del Riego.

1966-03-23 Mencionado/a
Carta de Lois Tobío Fernández ao seu irmán Carlos Tobío Fernández, 1966.
Madrid
México, D. F.
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Lois Tobío Fernández ao seu irmán Carlos Tobío Fernández, 1966. en 23/03/1966

23 de marzo de 1966

Señor Don Carlos TOBIO

Queridos hermanos:
Mucha alegría tuvimos al conocer y tener unos días con nosotros a Carmen. Es una chica estupenda, sincera, inteligente y simpática. Todos le hemos tomado gran afecto y esperamos volver a verla con frecuencia. Como tenemos muchos puntos de contacto, desde el primer momento nos entendimos a las mil maravillas.
Ahora lo que esperamos es ver a los que faltan y, mejor aún, que vengan todos para quedarse. El ambiente, a pesar de las rémoras y obstáculos, puede considerarse ya relativamente potable, en el sentido de que es posible mantener un buen porcentaje de independencia personal. Esto, naturalmente, sólo vale para Madrid o Barcelona.
Cerca ya del verano, planeamos nuestras vacaciones que este año se partirán por gala en dos: 15 días en Vivero y otros 15 en Salou, playa tradicional de la familia de María del Carmen desde los tiempos de fines de siglo, amplia, de fina arena y, sobre todo, más caliente y despejada que nuestra maravillosa de Cobas, que nos decepcionó el año pasado por lo fría, nubosa y brumosa.
Nuestra vida continúa tranquilamente y sin novedades especiales. Miguel resolvió sus problemas y está ahora trabajando intensamente con vistas a los exámenes. Constanza, en 2º de bachillerato, cursa a la vez los estudios correspondientes a la secundaria inglesa. Ambos estudian además, particularmente, ruso. Estoy convencido de que el dominio de los idiomas será una clave maestra en el mundo que viene y quiero prepararlos en tal sentido. Aquí en España, en ese como en otros aspectos, se encuentran en lamentable atraso. Esta sociedad en que manda la clerigalla y los espadones desatiende lo que realmente cuenta en la formación del individuo, perdiendo energías, tiempo y dinero en cosas sin sentido, religiosismo formal y supersticioso y cascarones vacíos para fingir un progreso cultural inexistente. La Ciudad Universitaria, por ejemplo, es un magnífico muestrario de esos cascarones ostentosos que, dentro, no albergan otra cosa que profesores fósiles o incompetentes y métodos anticuados, ciencia simulada e investigación nula. Uno de los más recientes de esos cascarones vacíos es precisamente la Facultad de Ciencias Económicas donde estudia Miguel. Como las asignaturas que cursa tienen en algunas cosas contactos más o menos directos con lo que fueron mis aficiones científicas, sigo de cerca su trabajo. Y puedo decirte que más de la mitad de las cosas que estudia son disparatadas o trasnochadas, pura palabrería seudo-científica, ecos de ecos de cosas ya dejadas de lado en el mundo universitario serio y actual.
En una de tus cartas me habías hablado de Salvador Lisarrague que había estado ahí dando unas conferencias y que había causado buena impresión. Siempre me pareció un pedante y un farsante científico, amén de confuso y palabrero. Y la lectura de sus apuntes mecanografiados y revisados por él, que fungen de libro de texto, me lo confirmó. Explica sociología, que no sé donde ni con quién estudió. Todo se le vuelve citar a Ortega –que sirve de comodín para todo– y al neoescolástico Zubiri, inteligencia y capacitación perdidas por no querer pensar sin trabas ni andadores y empeñarse en seguir las gastadas y ya estériles roderas escolásticas. Como además las clases son de mil alumnos y no hay suficientes ayudantes para trabajar directamente con todos, la enseñanza es una ficción, una simulación y una feria. El profesor no conoce al alumno y éste hará un examen escrito en masa que calificarán los ayudantes con la urgencia que es natural.
No sé si te has enterado que tu ex-compañero, y creo que también del premio extraordinario de la licenciatura, Maximino Romero Lema (que ahora se hace llamar o llaman "de Lema", sin duda para seguir la corriente aristocratizante de esa lamentable sociedad) es en la actualidad obispo auxiliar de Madrid. Parece que el Vaticano lo nombró directamente para poner al lado del arzobispo Morcillo (que como todos los prelados españoles fue nombrado a propuesta del Régimen, lo que explica su carácter integrista y reaccionario que se puso de manifiesto en el Concilio) un hombre con la nueva mentalidad. Pero lo cierto es que estas tentativas del Vaticano para que la Iglesia española se civilice y "aggiorne" han dado poco resultado hasta ahora y todo sigue tan cerril e inquisitorial como siempre, en las actitudes aunque en los hechos, en la presión sobre el ciudadano se haya aflojado un poco la presión porque las normas conciliares les han quitado apoyo moral y están desconcertados. Pero como la Iglesia católica española es más una organización política y un grupo de presión y dominación social más que una organización religiosa, los criterios propiamente religiosos sólo le atañen en medida reducida. Los principios de la libertad religiosa proclamados por el Concilio no han tenido hasta el momento la menor virtualidad y los cultos protestantes, por ejemplo, sólo se celebran en forma discreta y todo anuncio público de ellos, toda manifestación exterior y, naturalmente, todo proselitismo están prohibidos. Las razones que dan para ello son muy pintorescas. El otro día oí por la radio al arzobispo de Madrid tratando de justificar que en España la libertad religiosa proclamada por el Concilio debe sufrir cortapisas. Como en España existe una unidad católica, decía, si cualquier otra organización religiosa abre públicamente templos, con signos exteriores, algún sector del católico pueblo español (seguramente azuzado por los curas) probablemente atacaría alguno de esos templos, creando así graves problemas de orden público. Por lo cual, concluía el prelado, el Estado no debe permitir esa pública ostentación de cultos disidentes que excitaría la justificada reacción de los católicos españoles. La argumentación, como se ve, es jurídicamente perfecta. Las damas no deben llevar alhajas porque provocarían los asaltos de los ladrones ni los caballeros valerse de coches lujosos que excitarían la codicia de los delincuentes.
Y nada más por hoy. A ver cuándo recibimos noticia de otra visita, que ahora será la tuya, y entretanto, abrazos de todos para todos.
[sen asinar]