PROXECTO EPÍSTOLAS

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65 MENCIóNS A Francisco de Goya (1749-1828)

Artista plástico. A súa obra abarca a pintura de cabalete e mural, o gravado e o debuxo. En todas estas facetas desenvolveu un estilo que inaugura o Romanticismo.
Epístolas
Mencionado/a [65]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Data Relación Remitente - Destinatario Orixe Destino [ O. ] [ T. ]
Mencionado/a
Carta de Laxeiro a Luís e Maruxa Seoane. Sen data
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Laxeiro a Luís e Maruxa Seoane. Sen data


[S.d.]

Amigos Luis y Maruja:
Yo quiero o quería escribiros con esas ganas que tiene uno de hacerlo en algunos momentos, pero esta Lala me fuerza a que lo haga en unas horas que para mí son recuperadoras de fuerzas creadoras. Son las 11 de la mañana y esta madrileña descorazonada me vino a despertar de mi sueño en los sueños para que os ponga unas letras. Mira, yo no os puedo mentir, no le falto nada para que se armara un gran zafarrancho, pero vosotros creéis que esta mujer tiene derecho a forzarme a escribirle a unos señores que se están dando el gusto de pasearse por el Museo del Prado haciéndole guiños a los Goyas, a los Velázquez, a los Grecos, y que este que os escribe tenga que hacerse la ilusión que la mejor pintura del mundo se corre en la Galería Bonino de Buenos Aires. ¡Qué desgracia la mía! Luis, ya te escribiré otra carta con más noticias. Me alegro mucho de tus éxitos en Coruña y tengo seguridad que estos se culminarán en Madrid, yo así lo deseo.

Abrazos para ti y Maruja

Laxeiro

1942-01-06 Mencionado/a
Carta de José López-Rey a Lois Tobío Fernández, 1942.
Northampton [nac. EEUU]
Montevideo
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Carta de José López-Rey a Lois Tobío Fernández, 1942. en 06/01/1942

JOSE LOPEZ-REY
54 PROSPECT STREET
NORTHAMPTON, MASS.

6 - Enero - 1942.
Querido Luis:
Muchas gracias por tu carta y por los ejemplares de "Sur" que recibí. Son suficientes. Después, hace unos dias, recibí otros cuantos que me mandó la revista.
En efecto, una vez que uno se encuentra estabilizado, la tragedia de España se ve con claridad más dolorosa. No sé si podremos volver pronto allí. Cualquiera que sea la situacion interior y el descontento, seguramente creciente, lo cierto es que Hitler domina allí, y que para nosotros y para los españoles allí dominados no hay esperanza hasta que Hitler sea derrotado. No creo tarde demasiado Hitler en hacerse mas brutalmente visible dentro de España –pues dentro ya está– y entonces volverá nuestro pueblo a sufrir los horrores de la guerra.
Nada sé de Quero. Me escribia regularmente con él hasta la invasion de Francia. Luego ni él me ha escrito ni yo he creido prudente hacerlo. De Roura de tiempo en tiempo tengo alguna noticia.
Yo voy muy poco a poco abriendome paso. Aún no he logrado un puesto que me permita enseñar sólo Historia del Arte, pero a medida que mi inglés mejora, siento mejor fundadas mis esperanzas. Trabajo mucho y ello me mantiene en buen estado de ánimo.
Dime cuanto te costaron los números de "Sur" para mandartelo. Seguimos siendo refugiados, y no podemos, hoy por hoy, permitirnos el placer del obsequio.
He visto en un Catalogo de Arte de 1941 de la Libreria El Ateneo de Buenos Aires (340-Florida-344) una obra que me interesa mucho. Su titulo "Goya. Los Caprichos. La Tauromaquia ... Descripción de las diversas tiradas hechas", por Pedro Vindel. El precio 7.20 pesos argentinos. Te ruego me lo mandes y lo pagues, y me digas cuanto es todo lo que te adeudo. Un fuerte abrazo P/
Muchos afectos a Maria del Carmen.

1945-08-30 Mencionado/a
Carta de José López-Rey a Lois Tobío Fernández, 1945.
Bayville
Montevideo
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Carta de José López-Rey a Lois Tobío Fernández, 1945. en 30/08/1945

P. O. BOX 653 BAYVILLE LONG ISLAND, N. Y.

30 - agosto - 1945

Querido Luis:
Me ha alegrado mucho recibir tu carta del 11 de agosto, y saber de vosotros –que sois ya tres, ¡Enhorabuena!
Yo hace poco he vuelto del Canadá, donde he pasado una temporadilla. Estoy ahora veraneando aqui hasta fines de setiembre en que empiezo a enseñar en Smith College, y en el Institute of Fine Arts of New York University, donde doy cursos monograficos. El año pasado sobre Goya; éste sobre Picasso, Juan Gris y Miró.
Recibí, en efecto el libro sobre los grabados de Goya, y te escribí diciéndotelo, asi como que te habia encargado los libros que me pedias (no me acuerdo ahora si uno ó dos). Luego me escribieron de la libreria diciendome que los libros no se habian publicado aún ó que estaban agotados. Te volvi a escribir y al parecer fuimos victimas minimas (en este aspecto) de la guerra.
Supongo conoces ya las noticias acerca de la formación en Mexico de un gobierno español en el destierro. Yo puedo decirte que no sé sino lo que han publicado los periódicos. la cosa, en lineas generales, me parece bien hecha, y creo que hay posibilidades de que salga adelante, aunque la monarquía aún tiene cartas en la mano que acaso Franco juegue.
Ojalá nos veamos pronto. Yo, como te digo, sigo aquí dedicado a mi enseñanza de artes, y escribiendo articulos sobre ello. Vencidas ya las dificultades de la lengua –que fueron tremendas– voy lentamente convirtiendome en un escritor y conferenciante en inglés. El horizonte se va haciendo –tambien lentamente– mas prometedor, y yo estoy encantado de haber vuelto a mi profesión.
Espero tener noticias vuestras, y, sobre todo, que en Francia, España, o aquí nos veamos pronto.
Voy a escribir tambien a Quero de quien he recibido una carta suya.
Un abrazo a Don Miguel, afectos a Maria del Carmen y otro abrazo para tí de
P/

P/S. Dime si quieres que te mande algun libro de aqui, o cualquier otra cosa. Tenemos que "settle" la cuenta goyesca.
Mis señas permanentes son
54 Prospect Str
Northampton, Mass

1949-02-08 Mencionado/a
Carta de Otero Espasandín a Seoane. 1949
Waynesburg
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Otero Espasandín a Seoane. 1949 en 08/02/1949


[Manuscrito:] Febrero 8, 1949
Waynesburg, Pa.

Querido Luis:

Tu carta tan esperada no me ha causado sorpresa, pues su desacostumbrada tardanza fue para mí indicio de que lo dicho en la anterior iba adelante; lo que sí me sorprendió fue lo de Dieste, pues aunque admitía la posibilidad de que se fuese, no pude sospechar lo fulminante de la solución. Sin temor de envenenarme, sospecho que me cabe gran parte en el honor y la responsabilidad, si hay lugar a ella, de haber desbaratado el grupo con mi ejemplo primero y con mis cartas después. Debo reiterar, sin embargo, que nunca me he propuesto otra cosa que ser sincero y dar expresión más o menos apasionada a mis sentimientos. Yo me alegro infinito de vuestra salida a la aventura; os esperan grandes emociones, el redescubrimiento del mundo con sus espacios, sus misterios, sus dramas, sus luces y sus noches. Yo hubiera sido feliz si os pudiera haber traído conmigo; mi impotencia, nuestra impotencia, mejor dicho, pues Alicia siente lo que yo en este caso, ha mermado mi felicidad aquí; y aunque con forzada lentitud, no he dejado de hacer indagaciones. Hoy mismo recibí carta de Barbudo desde Washington en la que me expresa su pesimismo sobre vuestra venida, entre otras razones porque la Argentina es para el común de las gentes de aquí algo entre lo posible y lo imposible, entre la realidad y el sueño. También recibí hace días carta de Souto, a quien pedí consejo sobre tu caso, y espero en estos días su contestación a la segunda carta. Como él estuvo aquí y piensa volver y talvez pronto, le hice varias sugerencias y preguntas. La dificultad es que, con carácter permanente, sólo se puede puede entrar como profesor, y aun así, se necesita haber estado enseñando los dos años inmediatamente precedentes. Como pintor acaso sea posible venir también, pero se necesita la mediación de gentes muy especiales; esta es la razón de mi segunda carta a Souto, quien sólo conoce ilustraciones tuyas y que le parecen tan buenas que, una vez aquí, podrías defenderte con ellas. Aparte de mis gestiones, creo que debes escribirles; de seguro le das una gran alegría. Sus señas son: Paseo de la Reforma, 219. México D. F. México. Aunque tú vayas, no está demás atar cabos, sobre todo en momentos como los presentes. Barbudo está disfrutando una beca de la Gugenheim para hacer un estudio de las ideas religiosas de Unamuno. Parece encantado de la vida, pues tiene un buen sueldo aun sin saber hablar inglés. Se queja de faltas de noticias de Nova y de Varela.
Volviendo a lo vuestro tras este rodeo, no de propio descargo, sino para desahogar la pena que me causa ver que no tomáis el rumbo de Nueva York, creo justificada, muy justificada, vuestra decisión. Y ni que decir tiene cuánta suerte os deseamos todos. Europa es muy varia, hay mil sitios donde luchar y vivir; aun reconociendo que París puede ser el ideal para un pintor, no creo que debáis cegaros con él, y cortaros otras posibilidades. Talvez en el campo –ese maravilloso campo francés– podáis trabajar con más desahogo económico y hasta con más comodidades. Con exhibir en París de vez en cuando puede ser suficiente; el mismo Picasso vive ahora fuera. Tu idea de exponer en Londres me parece muy buena; en París puedes procurarte miles de señas e informes sobre galerías, etc. No olvides que hay ciudades muy importantes en Inglaterra además de Londres: Manchester, Birmingham, Edimburgh, etc. Creo que si puedes entrar en Inglaterra, te espera un gran porvenir, pues tus cosas, en especial las menores, te abrirán muchas puertas con los editores. Tendrás también una riqueza asombrosa de tipos ciudadanos y campesinos que estudiar. Es muy conveniente que lleves contigo una colección o varias de los libros; les pondrán los dientes largos a los editores londinenses. Sacrifica otras cosas si es necesario.
Siento mucho estar con los bolsillos vacíos, como Maruja os habrá dicho, como consecuencia de trabajar uno solo y del tratamiento de Alicia; si no os hubiera enviado unos dólares con una satisfacción inmensa. Como acaso sepáis, estamos todavía endeudados y la familia de España se encuentra en la miseria prácticamente. Pero aun así, si en algún caso nos es posible hacer algo, no lo pensaremos un instante. Te aconsejo que dejes todo en orden: nacionalidad, trámites oficiales, etc. No se sabe lo que puede sobrevenir de un momento a otro; es posible y deseable que nada grave pase, que las nubes que hoy cierran el horizonte pasen sin dejar rastro. Pero la prudencia no está reñida con la audacia ni con el heroísmo; te hablo como hablaría a un hermano, sin pusilanimidad, pero un tanto escarmentado. Por aquí hay cientos de españoles con nacionalidad norteamericana que no tienen porque avergonzarse de haberla adoptado, sino que se consideran afortunados por ello; Dieste encuentra ahora unas facilidades como uruguayo muy valiosas; tú harás muy bien si utilizas cuanto te sea de provecho tu nacionalidad argentina. Procura dejar bien tus cosas con el Centro Gallego también; bien que mal ha sido una ayuda y en la revista has hecho cosas que no se pudieran haber hecho de otra manera. Sin renunciar a nada esencial, sin hacer nada que nos abochorne, hay muchas posibilidades que no hay que desperdiciar; y esto es válido no sólo ahí, sino más aún en Europa. Sé firme, pero no te dejes dominar por fanatismos estériles, sobre todo ahora que hay mucha gente dispuesta a sacar partido de ellos mientras les conviene y a saltárselos a la torera cuando conviene.
Espero que no me olvidéis; que me sintáis tan cerca como yo os sentí y siento a todos vosotros. Cada día estoy más convencido de que lo que vale en la vida es lo que comparte, lo que nos liga a nuestros amigos, a nuestros familiares, a lo que a veces pudiera parecer intrascendente. Por eso considero la pérdida de una amistad como lo más grave que puede ocurrirme. Tú tienes amplio campo por delante; tienes juventud, tienes genio o, si quieres, madera de artista de alta calidad; tienes dotes de trabajador; tienes salud; entusiasmos y muchas cosas más. Yo te deseo la suerte, ese algo del que nadie puede estar seguro y tan necesario como lo demás. Creo que debes tratar de sacar partido siempre de tu optimismo y desterrar para siempre, filosóficamente, el desaliento y el malhumor. Si inspiras optimismo al borde mismo del abismo, no caerás en él; si por el contrario, te obstinas en sentirte perdido en una balsa de aceite, te ahogarás. Busca la alegría recóndita en los demás y esta alegría te reconfortará a ti.
Bueno, perdóname estas tonterías, pero no las olvides, aunque solo sea por la intención que las inspira. En cuanto a tu pintura, simplifica, simplifica, aligera, depura, pule, sé paciente, cauto, frío; piensa que el arte es el genio de domar el genio; la fuerza de someter la fuerza hasta el punto de que la fuerza, sin dejar de existir, no se advierta si no a la larga. Una sonrisa puede tener más fuerza que un torso de coloso. Afortunadamente, estás de vuelta de estas cosas, y Francia es el país de la fuerza sometida a razón. Cada día veo más claro que una mantilla de Goya, o un abanico, son más explosivos a la larga que sus toros o sus caballos os sus demonios. Nuestro paisaje gallego puede decirte muchas cosas a tu manera, como se las ha dicho a Colmeiro y hasta a Souto. En Francia vas a encontrar un paisaje muy parecido. Ojo a él, y lo mismo al mar, a ese mar que te va a salir al paso muy pronto como un milagro. ¡Lástima que no vayas en un barco de carga! Para estudiar es ideal. Otro consejo: ¡Oculta tus entusiasmos a quien no puede entenderlos o, peor aún, entenderlos mal!
Creo que debo acabar esta interminable carta, aunque tengo la sensación de no haberte dicho nada que valga la pena. ¡Tanto hay que se nos escapa sin saber cómo de entre las manos! Sobre todo cuando uno siente la necesidad de revelarse en toda su plenitud, sin reserva alguna. Te imagino frente a las costas de nuestra España, aunque no será tan nuestra como lo ha sido, como cuando estaba limpia o más limpia de curas, de beatas, de filibusteros, de adulones... Esos miserables ni aprenden ni olvidan, pero siempre se las arreglan para vivir al amparo de situaciones de excepción.
Me imagino que estarás negro de trabajo, pero quisiera que no olvidaras mandarnos aquella conferencia de Alicia y los números de la Revista en que aparecieron cosas mías. Cualquier amigo del Centro puede hacerlo por ti si se lo encargas bien. Mientras que seguías allí, no nos urgía mucho recuperar estas cosas, pero ahora prácticamente Buenos Aires se queda vacío para nosotros, pues si bien tenemos aún amigos ahí –y no quiero mermar su categoría– no te puedes fiar de ellos para cosas de éstas. ¿Si ves al profesor Vera, quieres darle mis señas y decirle que Trincado acaba de llegar a Nueva York, supongo que huyendo de la quema venezolana? Me lo ha dicho Barbudo. Dile que le agradecería el envío de los libros publicados por él en Buenos Aires –Nova y Losada–, pues aunque tengo la idea de haberlos traído, no sé que ha sido de ellos, y aquí hay algunos matemáticos que han demostrado curiosidad por ellos y quién sabe si algún día pueden ser traducidos. Y tú no dejes de escribir aunque sólo sean tarjetas desde los puertos de toque. Nosotros procuraremos hacer lo mismo tan pronto como tengamos vuestras señas.
De Ayala no tuve carta; pero no te preocupes. Si no escribe él, le escribiré yo.
Muchos saludos a los amigos del grupo: Farias, Varela, Cuadrado, Torrallardona, Mallea, Sirio, Merli, los de López, Romero, Castañino, Alonso, Anthonisen... y así hasta el infinito. Para vosotros dos un gran ¡Hurrah!... y mucha suerte y un abrazo de vuestor

Espasandín

[Manuscrito na marxe esquerda da primeira folla:] Mucha suerte y prosperidad os desean

Alicia y Cuqui

[Manuscrito na marxe esquerda da última folla:] Mandad las señas cuando las tengáis.

1949-10-02 Mencionado/a
Carta de Frontini a Seoane. 1949
Bos Aires
Londres
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Frontini a Seoane. 1949 en 02/10/1949

Buenos Aires, 2 de octubre de 1949

Sr. Luis Seoane
Londres

Querido Seoane:

Contesto tu carta del día 4 de septiembre, día en el que cumplí años casi junto al cielo, en silencio, y a pocos kilómetros de la ciudad de Méjico. Esto es lo que no sabes y ahora te explicarás porque no has recibido noticias mías a continuación de tu carta. Yo escribo ahora sin saber si esta carta te llega a destino. Empecemos por mi viaje: Fui a Méjico como delegado de agrupaciones argentinas al Congreso de la Paz. Estuve con muchos amigos comunes: León Felipe, Larrea, Imaz, Luna, Pontones, Souto, Neruda, Guillén, Siqueiros, Rivera, los muchachos del taller de gráfica popular de quienes traje 40 láminas para exponer en Antu entre el 30 de octubre y el 6 de noviembre. Luna lamentable. Pontones, se casó con una chica mejicana muy agradable y no pinta. Souto: muy bien: en una última etapa de entrega a Méjico, librado de nostalgias, muy interesante. Siqueiros: sensacionalista. Rivera: una mierda. Sus últimas cosas...Vi su exposición retrospectiva: hay en él una etapa entre 1920 y 1935 muy interesante. Temática y de buena pintura. Temática mejicana (folklore) y decoración mejicana. Y pintura con recuerdos europeos. Composición acaso personal, atrevida. Lo último en la casa de Gobierno: repito, mierda.
Orozco –que falleció mientras funcionaba el Congreso por la Paz al que se había adherido; un gran pintor. Sus últimas cosas al óleo de una calidad pictórica poética indudable. Luna: con un Daumier y un Goya envejecidos. No le discutí su pintura (el está muy señorito como artista, muy creído que es un gran maestro) pero le invité a conversar acerca de su visión del mundo a emparejarla con la mía, a ver como le iba el hombre por dentro, y de cuantos escapismos snobs se estaba haciendo su pintura actual. Era una manera de permanecer en amigo y criticar su pintura desde los fondos del alma. El diálogo no fue posible y así quedamos. Está casado con una mujer europea a quien vi, pero sin enterarme. León Felipe: macanudo. Se dio un golpe y sólo pude verlo en su casa donde permaneció tres semanas en cama. Viajé con Orfila, Imaz, Leonilda, Barranco, la primera esposa de Bergano ¿?, hasta Oaxaca y Tehuantepec, en automóvil. Vimos las ruinas de Mitla y monte Albán. Un viaje lleno de buenos recuerdos. Orfila y su mujer son muy agradables. Estuve con Picón Salas y con Herzog. Y mantuve una larga conversación. Rómulo Gallegos, un gigante de presencia agraciada. Estaba viviendo en casa de la mujer cubana de Altolaguirre (se la había cedido). No pude ver a Antonio Espina aunque le busqué. Nos desencontramos y yo tenía el tiempo tasado al milímetro. Di una lata en el Congreso sobre el Pacto de Río de Janeiro. Estuve con Paul Eluard y con Garaudy. Si tienes ocasión de ver a este último antes de tu partida de París, velo. El estará allí dentro de 10 días más o menos. Yo lo espero aquí dentro de 3 o 4 días.
Aquí fueron cerradas cuatro editoriales. Lautaro, entre otras. En Losada dialogaron en mi ausencia sobre la peligrosidad de quienes como yo figuramos en la Lista de la Traición que publicó Democracia. Me consta fehacientemente que la lista fue enviada desde la presidencia de la Nación. Hace dos días desaforaron al diputado Balbín. Gran discurso de éste. Al día siguiente la policía allanó el salón de la Cámara Argentino Ruso donde Varela intentaba dar una conferencia. Alegaron la falta de permiso y en vez de meter en gayola a los dirigentes, metieron a más de 300 asistentes. Treinta días de arresto. Entre ellos está el Dr. Dubranich. Yo me salvé por un pelo porque olvidé la dirección de la sala. Estamos bien, como ves. Lo de mi peligrosidad... les cuesta a ciertos amigos un grano en la nariz. Ya les saldrá. Estoy contento de mi viaje a Méjico. Los venezolanos son buenas gentes con psicología muy parecida a la de los buenos argentinos.
AHORA A LO TUYO: hablé con Grete Stern que tiene allí un primo con muchas vinculaciones. Grete les escribe a ustedes y al primo, pidiéndoles a todos que se pongan en comunicación. Supone Grete que el primo podría hacerte comprar algunos cuadros. Con respecto a los dineros que te adeuda Losada: como apenas he podido conversar, sólo me ha dicho que no es posible enviar dinero. Ahora bien: con los cambios habidos aquí con la moneda (sin garantía oro, y en vísperas de lanzar otro billete por esa misma razón para que la leyenda no diga más que por un peso te entregaran el equivalente en oro) y con el desbarajuste resultante de las desvalorizaciones de infinidad de monedas, todo está estancado y hecho un lío. De todos modos volveré a la carga pasado mañana: veré si es posible hacerte un giro desde el Uruguay, pero sucede que la moneda argentina que estaba a 3,45 por peso uruguayo antes de mi partida a Méjico, está ahora a más de 4,50. A mí me jodió porque antes de ir tenía los planos terminados para mi proyectada casita en Punta del Este. Al regreso ya me costaba 10 mil pesos más. Por ahora estoy, pues, a la espectativa.
Si recibes esta carta, me contestas enseguida diciéndome de cuanto tiempo dispones y que crees que puedo hacer. De poder hacer algo, lo haré enseguida: ahora, por como están todas las cosas, por no saber si aún estás ahí, no atino a hacer nada. Como no sea la intervención de Grete. Si hubiese recibido la carta a tiempo, o sea, si hubiese estado aquí y no en Méjico, acaso hubiese sido posible una solución con el dinero que en libras debe recibir periódicamente Grete desde Londres. Pero sucede que hace apenas 8 o diez días recibe el importe trimestral de sus intereses. Quedo, pues, a la espera de tus noticias. Yo, bien, pero cansado. Me dura todo el nerviosismo del viaje. De un día para otro se hacen 10.000 kilómetros. Desaparece el espacio. El salto de pulga del avión nos deja en vilo. Me parece que he llegado tarde a la aviación y que eso de estar sin estar (estar aún en lo que se ha dejado ayer, y estar no estando en lo que se está hoy) es cosa estrafalaria y desconcertante. Hoy se festeja aquí, como se puede, el día de la paz, o la jornada internacional de la paz. Gracias a que los rusos tienen la bomba atómica, el diálogo político económico entre las naciones tendrá el parejamiento en el que es posible que triunfen las razones. Menos mal. En Estados Unidos está el fascismo. Lo que he podido saber con mis camaradas norteamericanos blancos y negros es cosa seria.
Un abrazo para los dos y ojalá esta carta llegue a tus manos. Expone aquí Torrellardona quien pronto irá a Francia. Expone un amigo mío de Perú: Camino Brent. Conque Colmeiro en Galicia? Lo supe por Paz Andrade. Me cuenta con emoción el encuentro de Maside con Colmeiro. Este se habría ido a pasar tres semanas a Lalín. Ya estará de vuelta en París. A ver cuando vuelven. Un abrazo cordial para ti y Maruxa.

(Por si quieres saberlo, estoy hecho un lío. Todo me ha ido mal).

Norberto

1951-06-19 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Seoane. 1951
Nova York
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1951 en 19/06/1951


París, Hôtel du Quai Voltaire, 19 jun., 1951

Mi querido amigo Luís Seoane:

Tenía el propósito de escribirle desde Londres, pero me falto tiempo para hacerlo. Lo hago, pues, desde aquí –desde este París que quiero entrañablemente y que no me explico que a Vd. no le haya gustado–, o, por lo menos, gustado en la medida que debió gustarle. Puedo decirle, en cambio, que Londres no me gusta? Cómo explicar que habiendo tantas cosas que nos gustan a ambos disintamos precisamente en esto? Para mi gusto, Londres es una ciudad demasiado grande, con un movimiento enloquecedor en sus calles. Luego, no tiene cafés. Esto es sencillamente terrible: el hombre, desde que sale desde su casa y hasta que vuelve a ella está obligado a trabajar o bien a entrar en una taberna o en una iglesia –las únicas dos cosas que hay en abundancia. La mayoría de los ingleses parece preferir la taberna, donde se emborrachan con cerveza caliente... Una ciudad donde uno no puede sentarse a una mesa de café para conversar con un amigo o para mirar la calle simplemente, para pensar o nada más que dejar pasar el tiempo (en las tabernas, los ingleses están casi siempre de pie y beben junto al mostrador), podrá ser todo lo que se quiera, pero no una ciudad civilizada... Londres es seguramente la ciudad del mundo que tiene más Bancos y donde se ven más hombres de galera y aún con sombreros de copa y jaquets. El Dr. Derisi (que guarda un muy cariñoso recuerdo suyo y que tiene colocado en un sitio de honor la tela que le ha comprado –ciertamente muy buena) nos ha puesto su automóvil y su chófer a n/ disposición; con él hemos recorrido la ciudad en todos los sentidos: reconozco que tiene unos parques muy hermosos, que las calles son limpias, que el Támesis es un río respetable y que todos los policemens tienen un aire absurdo de senadores (qué cosa distinta del policía de París, bonachón y con un aire de pícaro que comprende muchas cosas –sobre todo, si de debilidades humanas se trata!) y con todo, repito, Londres no me gusta. A las 10 de la noche cierran los restoranes y a las 12 sólo se ven algunos borrachos retardados, o prostitutas en las esquinas, o invertidos. Es claro que los ingleses ricos tienen sus nightclubs donde pueden emborracharse a gusto y hasta divertirse...; pero Vd. se imagina, Seoane, un pueblo que se emborracha con cerveza caliente? Le advierto, Seoane, que no tengo motivos de resentimiento; antes al contrario, la semana que pasamos Aída y yo en Londres ha sido como un paréntesis principesco en la vida un poco estrecha que estamos haciendo para que la plata nos alcance: Derisi nos reservó alejamiento en un barrio residencial (20, Chesham Place –cerca de Hayde Park: un departamento que daba sobre la plaza, con baño y cocina eléctrica, frigidaire, etc. La placita –un triángulo que no pasa de un cuarto de manzana –sólo se veía concurrida de 8 a 10 de la mañana y de 6 a 7 u 8 de la noche; pero no por chicos o por pareja de enamorados (estos prefieren el Hayde Park –y con razón, desde luego), sino por mujeres u hombres que traían a pasear –y a hacerles hacer sus necesidades– a sus perros...
Además de poner a n/ disposición su coche y su chófer todas las veces que nos daba la gana, nos acosó con toda clase de atenciones: cenas, una première de Antonio y Rosario (dos bailarines –un hombre y una mujer– que bailan danzas españolas y que en la noche del debut tuvieron un éxito estruendoso), entradas para ver el Hamlet con el actor Alec Guinness (en el New Theatre) nada más que porque vio que yo tenía interés en verlo... Se imagina Vd. todo eso? No es como para que todo ya le guste a uno? Pues bien, a pesar de todo esto, en Londres yo me sentía como un extraño –y no ciertamente por el desconocimiento del idioma (menos lo conocía en Amsterdam, pues en inglés, por lo menos, sé decir hasta una media docena de palabras y contar hasta no sé qué cantidad– pero siempre superior a la que necesitaba). El sábado último caminé casi dos horas por las más importantes y céntricas streets: Picadilly, Oxford, Regents... y no encontré un solo sitio donde tomar un café! Aparte de todo eso, los ingleses son gente muy simpática... Todos los ingleses (Bernard Shaw era una excepción) respetan a su rey, a los policías y el uniforme de los soldados de la guardia real; siempre se ven ingleses embobados contemplando el espectáculo bastante pueril del cambio de la guardia. Y es que el inglés, comparado –por ejemplo– con el francés o incluso el español es siempre un poco provinciano –a pesar de su aire distinguido y de su capacidad para los negocios.
Sí, evidentemente no me gusta Londres y podría pasarme muy bien sin conocerlo, si no fuera por sus Museos. Éstos son realmente magníficos. Sólo visité muy ligeramente el British Museum, pero, en cambio, lo hice muy detenidamente con la National Gallery, la Tate Gallery y la Wallace Colection. No voy a hablarle a Vd. precisamente de tanta obra como me ha impresionado. Sería caer en una ingenuidad imperdonable. Pero, a propósito de la pintura inglesa, sería demasiado osado decir que me empalagan un poco Gainsborough y Reynolds y Lawrence (este último en menor grado) a pesar de ser grandes pintores? Qué distancia cuando uno los compara –a ellos, esencialmente retratistas– con los retratos de Goya y Velázquez de la National Gallery y de la Wallace Colection! En cuanto a los prerrafaelistas, puedo decir que me parecen tontos –además de insignificantes– con Dante Gabriel Rossetti a la cabeza? Pienso que solamente Turner y Constable son realmente grandes; sobre todo, y antes que todo, y por encima de todo, Turner. Ellos salvan la pintura inglesa; sobre todo Turner. Cómo pinta este hombre! Y qué lirismo en toda su obra –aún en la de su época comprendida (y así clasificada en la Tate Gallery) entre los años 1805-1810 y que por momentos parece un anticipo de Corot; pero es a partir de 1830 cuando Turner alcanza su más alta expresión y al final de su vida ya es una verdadera locura de la luz –casi medio siglo antes de que Monet pintara sus “Nimpheas” y su maravillosa serie de la “Catedral de Rouan”... Los impresionistas franceses están bien representados en la Tate Gallery y, sobre todo, los postimpresionistas: Cézanne, Gauguin y Van Gogh –de quienes este Museo posee algunas de las talvez mejores cosas. Es curioso que cada vez que uno se topa con los grandes de la pintura se está tentado de decir que es lo mejor que se ha visto de ellos. Lo que hay en realidad es que todo, o casi todo lo que han hecho es impresionantemente bueno. Y a propósito de Gauguin y Van Gogh, cómo se achica el primero al lado de éste, tan apasionado, tan atormentado: es como un pozo en ebullición, en tanto que Gauguin se pierde un poco en la decoración, sobre todo en su época de Tahití... Hay una discreta representación de Modigliani y de Chagall en tanto que muy buena de Bonnard y, de los vivos, de Picasso (de éste tienen La femme a la chemisse –1905, Femme assise –1925, entre otros) y de Bracque, y de Matisse (no sé por qué, pero siempre me parece Matisse un tanto superficial –con una marcada tendencia a lo bonito).
Perdóneme, sin querer parecería que incluyo a Chagall entre los muertos cuando en realidad sólo quise incluirlo entre los que están nada más que medianamente representados... En escultura, con excepción de Rodin, quien me ha impresionado realmente es Epstein. La Tate Gallery sólo posee de él algunas piezas pequeñas –pero qué fuerza expresiva y qué seriedad en la factura! A Falcini le mandé una fotografía de The Visitation que me parece estupenda.
Y basta por hoy: No piensa Vd. que uno se pone tonto viendo tanta cosa bella y queriendo comunicar su entusiasmo a los demás? No me crea pedante, por Dios! Sólo pretendo fijar la impresión que me producen las cosas y lo que pienso de las mismas. Es probable que me equivoque a menudo, pero estas cartas son para mí un medio de descargarme –como quien, en la marcha, descarga las baterías de su coche para evitar que éste se ahogue. Hay momentos en que me parece que mi receptividad está colmado y tengo miedo de que me estalle algún compartimento del cuerpo...
Y me defiendo escribiendo. Nunca sentí realmente la necesidad de escribir hasta ahora; pero cómo hacer para no gritar a los cuatro vientos mis admiraciones y mi entusiasmo? A veces, frente a algunas obras, me pondría a cantar o a gritar si no temiera que me tomen por loco: No lo hago, pues y en su lugar escribo estas interminables cartas – como si los amigos tuvieran alguna culpa. Aunque, pensándolo bien, es claro que la tienen y justo es que se aguanten.
Y termino. Estamos de nuevo en París, de donde pensábamos salir el sábado para Viena; pero se nos ha presentado un inconveniente y francamente no sé ya bien lo que voy a hacer. Al pedir pasaje para embarcarnos de regreso el 2 de octubre en Lisboa (tengo tomado y pagado el pasaje de regreso –open dat) me informan que no lo hay para esta fecha ni para fechas aproximadas, etc. Escribí urgentemente a Derisi para que, con su influencia, trate de solucionarme este lío. Entretanto, no podremos movernos de París hasta no saber a qué atenernos –pues sería difícil mantener contacto con Derisi, o la Empresa, moviéndonos de un lado a otro... París me agrada ciertamente –pero en mi estado de ánimo con este contratiempo que me desorganiza (ojalá no sea en mucho) los planes tan cuidadosamente trazados, nada es muy agradable; y aún mayor es la preocupación de Aída –que se traga las lágrimas para no aumentar la mía. Espero que todo se arreglará, sin embargo. Es inconcebible que se me venda un pasaje “a fijar fecha” y que, a casi 4 meses de la fijada para el regreso, se me conteste que para ésa y las próximas fechas el pasaje está completo en los tres barcos que tocan Lisboa; pero cómo ponerme a discutir desde aquí? Yo no tengo tiempo para hacerlo –y nada se arregla conque la razón esté de mi parte. Espero, repito, que con la mediación de Derisi todo se arreglará.
Perdóneme, querido Seoane, esta lata. Mucho, muy muchos saludos a todos los amigos –que, por ser muchos, no nombro, y para Vd. y Maruja un grande abrazo de Aída y mío.

Scheimberg

1951-09-27 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Seoane. 1951
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1951 en 27/09/1951

París, 27 de sept (a la 1 de la mañana), 1951

Amigo Seoane:

Está de Dios que yo no vea Galicia. En 1920, cuando vine a España entré por Cádiz. Cuando iba a salir de Madrid, se me había acabado el dinero y las ciudades que visité luego de Castilla: Ávila, Salamanca, Valladolid, Burgos y León, lo hice con dinero de mis compañeros de viaje y siguiendo un itinerario común que non incluía Galicia. Esta vez ya tenía pasajes y alojamiento reservados pª La Coruña, Santiago y Vigo y hasta me había munido de una guía de Galicia muy completa. Pero, he aquí que al ir a visar n/ pasaportes pª entrar en Portugal pª embarcarnos en Lisboa, nos pusieron dificultades en el consulado de ese país pª el visado del pasaporte de Aída por su origen ruso. En vano, traté de convencer al empleado que Aída era argentina y que viajaba con pasaporte de tal. Nos dijo que era indispensable consultar a Lisboa y que eso llevaría entre una y dos semanas. Esto sucedía el día 20 y nosotros debíamos embarcarnos el 2 de octubre. No había posibilidad de comunicarme con el cónsul (que, según el empleado, estaba de vacaciones) y habría sido tonto pretender convencer al empleado de que Aída no se proponía derrocar al gobierno de Portugal, porque evidentemente no lo creería: “Pero es de origen ruso”, insistía el pobre... Qué miedo le tienen a la revolución los gobiernos de estos pueblos de mendigos! Se sienten terriblemente cómodos en su mísero papel de lacayos del imperialismo yanqui o inglés –cualquier cosa!– con tal de mantenerse arriba, es decir, abajo –a los pies de sus amos–, hay que leer los editoriales de su prensa dirigida pª darse cuenta. Hasta donde llega su abyección. A pesar de las molestias que todo esto me ha ocasionado (y los gastos, sobre todo) me he sentido ampliamente compensado por el gusto que sentí de ver el miedo que les inspira Rusia a los grotestos dictadores de Portugal como de España. Y a sus clases pudientes... Decidí, pues, marchar rápidamente a París pª arreglar la salida por el Havre. Con qué gusto se vuelve siempre a París. Il n´y a pas de literature en touts ça; pero es que aquí hasta el aire es dulce. Aquí no sería concebible siquiera esta frase oída a un vendedor de cacahuetes de la Alhambra de Granada, nos dijo: “me gustaría acostarme a la noche y no despertar al día siguiente y acabar así esta vida miserable”. Hacía cinco años que no probaba carne y come apenas lo indispensable pª ir tirando. Y así como él lo pasan los 4/5 de los habitantes de España.
Perdóname que vuelva sobre este tema, pero él me ha amargado todo el tiempo q’ he estado en España, casi un mes... Y luego las dificultades pª desplazarnos de un punto a otro: o se resigna uno a hacer colas interminables, hasta de días enteros –sin la seguridad de que va a tener billetes o se los adquiere a los estraperlistas que realizan sus negocios en las mismas colas y a la vista de las policías (y seguramente que en combinación con éstos). Uno, en Madrid, pª conseguir billetes pª Sevilla me exhibió su cédula de identidad e invocó el testimonio del vigilante que cuidaba la cola pª avalar su honorabilidad. Debido a estos inconvenientes uno nunca puede estar seguro de llegar a un sitio en la fecha propuesta, o si va a llegar siquiera. Y uno tiene que decidirse a viajar en autobús a pesar de tratarse de un medio de locomoción muy costoso (así viajamos de Sevilla a Granada) a viajar en 1rª donde hay una posibilidad mayor de conseguir pasaje. Pª obtener billetes de Granada a Madrid (suprimí Córdoba del itinerario pª no complicarme más la existencia) tuve que asegurar una propina al empleado de R.E.N.F.[E] y así fue como obtuve pasajes que –según los informes que se daban a los pasajeros en la misma R.E.N.F.[E], estaban agotados desde hacía varios días. No es cosa fácil avenirse a todo eso. Ya me había resignado a omitir Ávila, Segovia y León en razón de esas dificultades cuando surgió la inesperada del Consulado portugués. Lo que aproveché pª hacer una escapada a Ávila (el Escorial, Toledo, Aranjuez, los visitamos antes de salir pª Andalucía) antes de dejar España; y me alegro de haberlo hecho a pesar de que esta ciudad –como Toledo y el Escorial– ha perdido su vieja espontaneidad y se ha incorporado al detestable mercado turístico. Cómo he extrañado esta vez las noches pasadas hace 31 años en Toledo, y en el Escorial, y en Ávila, en que el silencio era tan denso que infundía miedo!
Cuál es el sentimiento dominante que me ha dejado este viaje a España? Desilusión? Talvez el término no sea exacto. Yo no venía a España a visitarlo a Franco, sino sus Catedrales y sus Museos (los de España); pero, se puede visitar acaso esta España –la de los Museos, Catedrales, sin ver la otra? Casi diría –por lo menos, esto me ha pasado a mí– que la España de Franco se nos ha impuesto pª no dejarnos ver a aquella aparte de la humillación que se siente siempre de viajar por un país donde hay que estarse cuidando de lo que se habla). Y es que habría que vendarse los ojos pª no ver a este pueblo consumiéndose de falta de comer y con su tradicional dignidad perdida! En ninguna parte, hemos visto tantos ciegos, por falta de higiene, ni tantos retardados –seguramente por la misma razón– y ni en Nápoles tantos mendigos como en Sevilla, y Granada, y en Aranjuez el día que fuimos allí a ver una corrida de toros. Hasta mujeres de aire respetable y vestidas decorosamente le piden a uno una limosna así que le ven cara de extranjero. Yo nunca me había imaginado –hasta ahora, se entiende– que un retardado, o un contrahecho o contuso pudiese ser un verdadero capital pª su familia; y, sin embargo, así es. Los hay a quienes acompañan uno o dos miembros sanos de la familia pª pedir y recoger la limosna... Todo esto es ciertamente desesperante.
Pero no le hablo de n/ visitas a los Museos, a las Catedrales –que es a lo que vinimos. Que cosa nueva, por lo demás, podría decirle de esos verdaderos dioses de la pintura que son –cronológicamente, no por el orden de mis preferencias– el Greco, Velázquez y Goya? Quién les habría dicho en vida de ellos que con el tiempo llegarían a ser una fuente de recursos importante pª su Nación! Porque Vd. puede prescindir de las Catedrales góticas o románicas de España: las hay superiores, respectivamente, en Francia o en Italia; pero suprima Vd. al Greco, a Velázquez, a Goya, a los turistas de todo el mundo no tendrían casi pª que venir a España... Se me olvidaba la Alhambra y el Alcázar, pero es q’ ese arte de miniaturista casi –a pesar de la grandiosidad de esos monumentos de la arquitectura árabe– no ha llegado nunca a conmoverme, esto es, a hacerme vibrar (es un arte sensual que no nos hiere más allá del a corteza y que siempre se aproxima a la decoración); y de los primitivos, sobre todo de los fresquistas catalanes, porque estos no son un tópico pª la generalidad de los turistas. Qué continuidad encuentro yo entre esos frescos de los siglos XI a XIII–y no más allá del XIII– y la pintura “negra” de Goya y algunas de las cosas de Picasso. A veces, pienso que la gente no se da cuenta hasta qué punto es español Picasso, a pesar de haber realizado casi toda su obra fuera de España. Y es que el artista, cuando lo es de verdad (no me refiero a esos indiferenciados académicos del arte abstracto –que no pasa de ser un arte de modistería), lleva a la patria –es decir, la tradición y los sentimientos de su pueblo, en la sangre, en las entrañas, y aún sin proponérselo lo representa. De las cinco o seis veces q’ he ido esta vez al Prado, dos he ido nada más que con el propósito de despedirme de Goya, y no he podido dejar de hacerles una visita cada vez al Greco y a Velázquez especialmente. Dios mío, cómo se puede pintar así?...
Vuelvo a lo mío. No desilusionado, sino asqueado. He atravesado esta vez España –yo que tanto la quiero y la siento– o talvez por eso precisamente con cierta repugnancia; repugnancia de los pobres muñecos, pobres y criminales muñecos que la gobiernan; repugnancia de los que aplauden o de los que se limitan a hacer chistes pª convencerse talvez a sí mismos de que no son tan viles; y repugnancia, sobre todo, de los mercenarios de la prensa. Estos plumíferos son hoy los únicos “intelectuales” visibles de esta pobre España de Franco. A un viejo mozo del Café Universal al que pregunté por la peña literaria q’ allí se reunía cuando yo estuve en 1920, me dijo: “Desde la guerra (cuando un español habla de la guerra, se refiere a la suya –a la guerra civil española–, pues pª los españoles de España la otra guerra, la universal, no ha existido y recién ahora al engancharse España al carro de Truman empiezan a darse cuenta de q’ hubo una guerra además de la suya); desde la guerra –repito– no existen más peñas en Madrid”. Al principio, no quería hablar, pero luego nos fue tomando confianza y era él quien me buscaba la lengua. Pero no es cierto que no existan peñas, existen, las de los periodistas, y la de los fabricantes de confituras teatrales –pero pª hablar de toros (que ya casi tampoco existen: hasta los toreros han perdido el coraje –coraje nada más que animal, pero coraje al fin) o de putas (que éstas sí existen hoy en abundancia, por necesidad). Qué chatura, Díos mío, en esta España “deshabitada” (no es de Rafael este epíteto?) de Franco. Las librerías están inundadas de libros de religión, mejor dicho, de cosas de sacristía, o de novelas bobas. “Tiras 2 mil ejemplares de una obra –nos decía una librera y editora de Madrid– es ya un verdadero éxito; por lo general, ninguna edición pasa de los mil ejemplares”. Decía que los españoles no leen porque el libro es caro y no está al alcance de los bolsillos del pueblo; y tal vez sea mejor que no lean pª no envenenarse más la sangre. El diario más importante y respetable de España, el de ese vacuo monigote de Luca de Tena, el ABC, dedica sus editoriales a protestar de la “familiaridad” con que algunas españolas tratan a sus santos preferidos o de la manera como visten los turistas y de otras cosas por el estilo. Por todas partes, no se ven si no curas y militares, que apesta. Toda España parece hoy una aldea y a pesar de que no hay uno sólo que no proteste por la carestía de la vida (un huevo vale entre 2 y 2 y media pesetas; en los cafés un vaso de leche no grande vale más que un coñac y mucho más que un vaso de manzanilla: en España resulta más barato emborracharse que llenarse apenas el estómago), salvo los obreros más ilustrados y que deben vivir ocultándose permanentemente, yo no podría asegurar en qué medida está la generalidad contra Franco; “Franco es un asceta” nos decía en un tono insolentemente chulo un farmacéutico que viajaba de Granada a Madrid en el mismo compartimento que nosotros. “Nosotros también tuvimos un asceta –le dije– hace más de cien años y dejo empobrecido y ensangrentado nuestro país. Y ahora tenemos dos”. Y es que llega un momento en que no se puede aguantar ya tanta sandía, o tanta farsa...
Pero ya estamos de nuevo en París. Aquí camino con la cabeza levantada y aspiro con fuerza el aire como pª limpiarnos los pulmones. Yo no sé si esta carta es una mera repetición de la que le escribí desde Madrid al día siguiente de visitar el Manzanares (la recibió Vd.?); pero la rabia, la indignación que me produce todo esto es tan fuerte no me deja hablar de otra cosa, aún a riesgo de aburrirle –y de repetirme. Y es que uno debiera no avergonzarse de repetir las cosas todas las veces que sea necesario hasta que se nos metan por los ojos –como los maestros de escuela. Y luego que al hablar de estas cosas de España hablo también un poco de n/ pobre Argentina y de lo que a los argentinos hoy nos está pasando...
Van a hacer 5 meses que aquí en París empezó n/ peregrinaje por la Europa occidental. Y con qué miedo! Veníamos con un idioma deficiente y con una ignorancia de toda una vida. Yo no sé si le he sabido tomar el pulso a esta Europa tan castigada!; pero juro que he tratado de acercarme a su vista con el corazón limpio y dejando de lado, tanto como es posible, ideas formadas. Creo que mis convicciones –de las que no me avergüenzo, sino al contrario– no me han impedido ver las cosas; digo mal, me han ayudado a verlas mejor. El 29 nos embarcamos en el Havre. Con qué impaciencia esperamos Aída y yo este día. Casi 6 meses son mucho tiempo pª estar lejos de la patria y de los amigos. El hombre es un animalito que necesita del cariño de los amigos para vivir tanto como de las cosas más primordiales para comer. Extraño n/ tertulias, n/ extravagantes y a veces insensatas discusiones y, sobre todo y por encima de todo, el afecto amasado en muchos años de convivencia, las cosas que nos han rodeado siempre y que queremos que nos sigan rodeando. A todos, a todos, un gran abrazo de Aída y míos.
Y ahora sí: hasta pronto!

Un abrazo particular pª Maruja

Scheimberg

1952-01-24 Mencionado/a
Carta de Seoane a Dieste. 1952
Bos Aires
Cambridge [nac. Inglaterra]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Dieste. 1952 en 24/01/1952


Buenos Aires, 24 de enero de 1952

Sr. D.
Rafael Dieste
Cambridge

Querido Rafael:

Estamos pasando unos días infernales de calor y humedad. Creo que en los años que llevamos en ésta nunca hizo tanta humedad ni tanto calor y estos días anuncia el diario que del norte se acerca a la capital una vistosa plaga de mariposas blancas que preocupa por sus larvas y su voracidad a los técnicos del ministerio de agricultura. Dentro de unos días pues, Buenos Aires parecerá una ciudad de almanaque valenciano con un cielo muy azul y muchísimas mariposas blancas, muchas más de las que nunca soñaron los autores de tapas de Blanco y Negro. Y nosotros, para desdicha nuestra en el centro de tanta cursilería, porque las mariposas no son más que otro elemento, uno más, en el total de la decoración actual.
No recuerdo ahora si os he escrito luego de mi exposición que fué en octubre, creo que no. La hice en Viau y constituyó un éxito de público y tambien de venta, y estoy seguro de que fué la más unida y la mejor de cuantas hice hasta ahora, creo que en ella se notaba más que en ninguna anterior mi aspiración de dar un carácter acentuadamente expresivo a la forma y al color. Esta era la exposición que debí haber hecho en Londres en lugar de la que me parece ahora disparatada, que las circunstancias y lo absurdo de la galería me obligaron a hacer, porque además deseaba hacerla un poco como fuese y a la que tú le dedicaste el expléndido (sic) y generoso artículo que tanto te agradezco. Desde la exposición sin embargo no he pintado mucho, pienso comenzar a hacerlo nuevamente con intensidad en estos días. La venta y el público no es suficiente estímulo para un pintor, hacen falta muchas otras circunstancias que Buenos Aires no tiene, no tuvo nunca, e incluso tambien creado por un núcleo de amigos que hablan, que discuten, el núcleo de amigos que nos reuníamos hace ocho o diez años y ya no sé cuántos, tan lejanos parecen. Os extrañamos. Varela acaba de llegar de Montevideo a quedarse nuevamente en Buenos Aires no sé por cuanto tiempo, viene animado. Azcoaga está ya instalado aquí con su familia, su mujer y cuatro hijos y trabaja en la imprenta Chiesino de Avellaneda. No deja de tener su aspecto heróico el emigrar así acompañado de cinco de familia y a un país como este tan distinto de España y donde todo es desconocido. Te está profundamente agradecido por el departamento, que por otra parte lo cuida y lo limpia él y los suyos de una manera un poco maniática según apreció Frontini. Para los chicos compró unas literas que no le estorban en el departamento. Pronunció tres conferencias al llegar, una en Artistas Plásticos sobre retratos de Goya, y dos sobre la poesía y la novela contemporánea en España en el Colegio Libre de Estudios Superiores, muy interesantes y con una información sobre jóvenes escritores españoles desconocida para muchos de los que estábamos allí. Escuchándole nos afirmábamos que una de las consecuencias más trágicas de la guerra civil es esta separación producida entre los escritores y artistas de uno y otro lado. Ellos apenas tienen noticias de cuanto se hizo fuera de España y a nosotros se nos escapan por falta de medios de información lo que allí se produce. Azcoaga está contento de haber salido y parece –no siempre Buenos Aires es una realidad demasiado abrumadora– animado a trabajar. Nuestros amigos en general le recibieron con simpatía. Alberti es probable que salga estos días a hacer un recorrido por América con algún contrato de conferencias. Este último año se ha defendido haciendo dibujos con sus poemas, coloreados, algunos muy graciosos, género que denominó “liricografías”. En pintura y en literatura todo está igual que en 1948, más bien un poco peor por el problema editorial agravado por muchas circunstancias poco favorables. Cuadrado y yo continuamos haciendo heroicamente algún que otro libro de Botella al Mar. De viejo tenemos pensado que la última editorial que fundemos se titule “Hombre al agua”. De otra gente: Guillermo de Torre, Baeza, Casona, Gori, etc., no tengo noticias, son otro mundo, el mundo, el mundo de los negocios. Negocios a veces más sórdidos que el de los directivos del Centro Gallego, con quienes continúo compartiendo las últimas horas de cada tarde.
¿Qué es de vuestra vida? ¿Trabajáis mucho? Contarnos algo de Cambrigde. Y tú, Rafael, has escrito nuevas obras? Estamos deseando tener noticias de todo cuanto hacéis y de como estáis en ese país al que siento más próximo de España, quizá porque para los gallegos nos resulte cercano. ¿Recuerdas las viejas escrituras de Ortigueira que expresaban al señalar los lindes de una finca “limita al N. con Inglaterra mar por medio”?, o tambien por el puritanismo católico de los españoles, porque el puritanismo no es exclusivamente un fenómeno protestante. Nosotros nos acordamos muchas veces de las severas calles de Londres, de los parques, de las tabernas, de los museos tan llenos de obras prodigiosas y tal como si no las tuviesen, de las caras de los ingleses y del paisaje maravilloso de Richmond. Pensamos volver no sé cuando. Pero volveremos, seguro. Claro que nuestro destino, creo que el de todos nosotros, es esperar volver a los sitios que tuvimos que dejar por alguna circunstancia. Buenos Aires además continúa siendo, aún no pareciéndolo, una ciudad misteriosa aunque insoportable viviendo seguido en ella.
Escribirnos sobre vosotros, sobre vuestros proyectos, sobre Cambridge, sobre las exposiciones que véis. Os rogamos que nos déis envidia, mejor, más envidia aún escribiéndonos sobre todo eso y creo que esto no lo logró nunca nadie.

Recibid los dos, Carmen y tú el fuerte abrazo y el recuerdo de Maruja y mío:

[Seoane]

1956-04-06 Mencionado/a
Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1956
Bos Aires
Vigo
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1956 en 06/04/1956


Buenos Aires, 6 de abril de 1956
Sr. D. Francisco F. Del Riego
Vigo.

Querido Del Riego:
Recibí tu carta y las colaboraciones que me enviaste, así como el interesante artículo de Bouza sobre las danzas gremiales. Las ilustraciones, lo mismo que las fotografías de la entrevista te las enviaré tan pronto como me hagan los clisés. Me alegro que te hubiese gustado mi libro, me interesa tu opinión y la de los amigos de esa. Hasta ahora aquí es prácticamente desconocido en la colectividad, pues aún no fué puesto a la venta. Tampoco lo conocen fuera de ella aparte de algunos amigos. Los ejemplares numerados te los enviaré, sinó treinta todos los más posibles, pues estoy obligado con algunos coleccionistas de esta que siguen las cosas mías, aunque como le expresé a Díaz Pardo mi interés es que vayan a esa, pues para mí de otra manera no se justifica el hacerlos. Estos días comenzaré a mandar ejemplares a todos los amigos de esa, pues hasta ahora solo se los remití a Maside, Domingo, y a tí. Estoy deseando ver tu artículo de La Noche, pues me interesa conocer que poemas te interesaron más y si encontraste en la totalidad del libro un camino distinto al que viene caracterizando la generalidad de la mejor poesía actual de Galicia, pues ese era uno de los propósitos que me guiaron. Quería hacer un homenaje a Santiago que fuese el recuerdo de un mundo perdido en el tiempo y que a la vez fuese todo tiempo. Hice coincidir mi homenaje con el veinticinco aniversario de la terminación de la carrera que se cumplen este año y si no puedo estar presente físicamente en Santiago, como seguramente lo estarán muchos de mis compañeros, lo estaré de esta manera quizá más anónima. El destino, a algunos de aquella promoción de licenciados en Derecho, nos jugó, quizá, una mala pasada. Más no hablemos de esto.
Estuve trabajando mucho. Aparte del libro salió estos días una exposición de 20 óleos para New York que se expondrán a fines de este mes o en el mes de mayo, e hice un nuevo mural en ésta de 9 metros por 3 y tengo que trabajar bastante durante estos meses, pues el Museo de Córdoba (Argentina), me solicita una exposición para el mes de agosto. Por otra parte me invitaron a participar en la próxima Bienal de Venecia con obras que salen estos días. Diciéndote esto trato de justificar de alguna manera mi silencio. Soy deudor de una porción de cartas pero confieso que la conciencia solo me remuerde en el caso tuyo. Hice la gestión del pago de la deuda contigo del Centro Gallego y estos días, al fin, dieron orden de liquidarla. Dile a Ferreiro que recibí su espléndido libro Sono sulagado, que si no le escribí fué simplemente por dejar la respuesta para cuando estuviese con alguna calma, y con la intención de no decirle cumplidos sino de hablarle de verdad del libro, de esa pequeña joya por ejemplo que es “María Soliña” que recuerda a la bruja de Cangas, que pienso que es de aquellos temas del paisaje, de los sentimientos y de la propia intimidad debe convertir el poeta de historia en mito. Su libro está, con formas e idioma de hoy, en la línea mejor que tendieron los precursores.
Supe de la marcha de Ovidio Fernández al día siguiente de haberse ido. Según me dijeron no se despidió de mucha gente por la precipitación del viaje y sentí de verdad no haber sabido de la fecha de embarque. Quizá quiso librarse de compromisos posibles. Recibí los libros que me enviaste. El de Castroviejo me interesó mucho aunque seguramente pudo haber trabajado más el tema; de todas maneras resulta un libro curioso y útil. Ahora me pregunto, ¿quién es Rafael Melero que publica un artículo sobre diez años de pintura gallega en La Noche y no habla de los diez años de pintura gallega, o desconoce lo que se hizo en esos diez años y sí en cambio pedantea con cosas que no conoce bien? Tengo una nota contra ese artículo y no quiero publicarla por si se trata de alguna persona amiga, o no es conveniente hacerlo. Desde luego Melero piensa que los pintores cambian de nacionalidad al abandonar por lo que sea su país, por lo que resultaría que Gauguin no es francés, ni Beckman alemán, ni Modigliani italiano, ni Picasso español, etc., y en este caso está tambien el mismo Goya de los últimos años de su vida.
Bueno, creo que hoy me he extendido bastante, quisiera que tu hicieses lo mismo en la próxima.
Con saludos de Maruja y míos para Evelina y para tí, recibe el fuerte abrazo de tu amigo:

Seoane

1956-06-13 Mencionado/a
Carta de Seoane a Zegrí. 1956
Bos Aires
Nova York
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Zegrí. 1956 en 13/06/1956


Buenos Aires, 13 de junio de 1956

Sr. D.
Armando Zegrí

Estimado amigo:

Recibí su sincera carta que me agradezco y lamento hondamente el resultado final de la exposición. En cuanto a las críticas de los diarios, que no llego a saber concretamente si tienen o no importancia en ésa, aparte de las frases alentadoras para un pintor desconocido ahí, noto que ponen demasiado ingenuo empeño en querer encontrar filiaciones al pintor, de lo que se deduce que Picasso, Matisse y Leger están influyendo en mí, a pesar de la disparidad entre sí de sus obras, cuando la verdad es que es posible que determinadas coincidencias se produzcan por mi interés, cada día más creciente, en la pintura románica y en la obra de los miniadores medioevales de códices. Busco mi expresión por medio de una pintura plana de fuertes contrastes de color y con un grafismo espontáneo que se le superpone, que es quizás lo que chocó a los amigos que gustan de mis grabados y dibujos y a quienes desconcertó mi pintura. No trato de hacer una pintura lavada, sino de huir de cualquier clase de texturas que distraigan la intensidad del tono plano. En este sentido, prefiero la pintura lavada de Velázquez y Goya de la última época a las calidades, insuperables como tales e inocuas, que encontraba en el siglo XIX el francés Monticelli o que encuentra ahora Monsieur Dubuffet (nunca tan Monsieur como este pintor, nin tan clase media en pintura). Entretenerse en buscar las calidades, por ejemplo, de una pared descascarada, su textura, no puede ser una finalidad de la pintura que no debe librar esta finalidad al hallazgo fortuito de esas calidades o del uso de instrumentos extraños de distintos oficios para conseguirlas. El color, el dibujo y los grandes ritmos son para mí nada más que un medio de expresión. Busco una pintura que tenga su mayor fuerza en el sintetismo de elementos con que la realizo. El afán de los críticos de ésa de querer buscar en los franceses la filiación del pintor y en hablar de escuela francesa me llamó la atención. La llamada escuela de París es una escuela universal en la que la mayoría no son franceses más que de domicilio y su afán de libertad ayudó a crecer a la actual pintura del mundo. En Matisse, tienen tanta importancia para su formación las decoraciones de los muros de Argel como los impresionistas y en Picasso, Grecia, la Prehistoria española, los íberos y Goya pesan más que los pintores que le rodean o que le ayudaron a formarse, como para Leyer las figuras de los naipes son más importantes para su obra que los cuadros de Monet. Y es lo que me ocurre a mí, salvando las distancias. Me importan más los murales de San Isidoro de Léon, los miniados de los libros de horas o las tallas populares que la famosa escuela de París, excluyendo, claro está, algunos de sus valores. Si me encuentro afín a esos pintores que citan los críticos es, pues, en sus preocupaciones y en el posible origen de lo que caracteriza su obra. Siento, pues, que no hayan visto en mi obra otra cosa que una pintura lavada en lugar de su espontaneidad y falta de arrepentimiento y que no se diesen cuenta que también ese lavado es una forma de textura, pero más honesta, a mi juicio, que el poner un tono, borrarlo, insistir con otro, limpiarlo con cuchillo, pintar uno nuevo, pero no con pincel, sino con rodillo, pegar un poco de arena o de papel o lo que sea y pintar con otro tono encima para conseguir esas famosas texturas que nada tienen que ver con la expresión pictórica, y sí con el aburrimiento. Sólo el tiempo produce auténticas texturas.
En cuanto a los cuadros, dígame usted qué debo hacer. Quisiera que devolviera el del señor Lóizaga y que su señora y usted seleccionasen para su casa el que más le guste como obsequio mío. Si usted cree que vale la pena, utilícelos de momento para sus exposiciones colectivas y como fondo de la galería y si usted [...]

1958-06-24 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Seoane. 1958
Nova York
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1958 en 24/06/1958

París (Hôtel Quai Voltaire), 24 de junio [1]958

Amigo Seoane:

Me he tomado esta tarde unas pequeñas vacaciones para escribirle. Pensaba hacerlo en Santander, antes de abandonar España –para despacharle la carta desde Hendaya, por temor a que fuera abierta y que la mención de nombres de los amigos de España pudiera crearles a estos alguna molestia (lo sucedido a a Del Riego es para tenerlo en cuenta); pero las cosas se dieron en tal forma que no pude cumplir con mi deseo. Al llegar a París, el día 19, me enteré de la muerte de Maside y Vd. no se imagina todo lo que me ha conturbado esta noticia. Aunque sólo cambié con él algunas palabras, pues su estado de salud (como se lo dije a Vd. en una postal despachada desde Santiago) le impedía casi hablar y no había mejorado, cuando unos días después fui a despedirme de él, su muerte me impresionó como si se hubiera tratado de un viejo amigo mío. Y es que todos sus amigos, nada más que por serlo nosotros de Vd., nos recibieron, a Aida y a mí, como si hubiéramos sido amigos de toda la vida. Y yo se lo agradezco ahora. Si en toda España no me he sentido en ningún momento extraño, en Santiago nos hemos sentido, Aída y yo, como en n/ propia casa. Cuánta cordialidad y calor humanos hemos hallado en sus amigos! Era a nosotros, si, pero era principal y fundamentalmente a Vd. a quien agasajaban. Aquí –es decir, en Galicia–, se lo quiere a Vd. talvez como a ninguno. Y yo me alegro de que así sea... Cuando cruzamos el Miño, en la frontera que separa a Portugal de España, a Aída y a mí se nos apretó el corazón y casi lloramos de emoción. El Miño, para Aída y para mí, era muchas cosas juntas: era Rosalía de Castro (cuya tumba visitamos e Santiago, en compañía de Bouza Brey) y era Unamuno, en sus Andanzas y visiones de España y Portugal y eran Vds., Vd. y Maruja. Veníamos de Coimbra, donde durante tres días nos sentimos por un momento estudiantes –aunque un poco maduros– Aída y yo y participamos de los festejos de la Quema de las Cintas, tan particulares y tan llenas de encanto. El paisaje era el mismo (Portugal y Galicia forman casi una unidad –no sólo geográfica, sino idiomática) y, sin embargo, nos pareció distinto. Y lo es en verdad. El paisaje parece que se adulzara y el ser humano es más hondo. Sí, creo que se trata de eso en realidad. En el portugués, talvez, haya siempre algo de teatral, como en el andaluz –aunque en menor medida–; en el hombre gallego no hay nada de teatral. Daría la impresión que se mueve siempre como si estuviera entrecasa, con naturalidad, pero con una naturalidad llena de señorío... Pero, por Dios!, no es de eso de lo que yo quería hablarle, sino de la cordialidad de que nos rodearon sus amigos a Aída y a mí. Con Del Riego y su mujer, Evelina, pasamos dos días deliciosos en Vigo... Y sólo estaba en mi plan quedarnos allí algunas horas! Pero quién se separa así como así, de las personas tan agradables e inteligentes ambos, que rivalizan en agasajarlo a uno? Con Evelina caminamos la ciudad y con ambos, conocimos las comedurías típicas y hablamos de tantas cosas que nos eran comunes. Y luego, Santiago... Llegamos allá el 22 de mayo a eso de las 8 de la noche. Dejamos n/ equipaje en el hotel España y salimos a caminar, Aída y yo, debajo de los soportales, a meternos la ciudad en el alma. Es una ciudad viva, donde las piedras llenas de ancianidad no son un obstáculo. El encargado del hotel se empeñó en que esa misma noche me comunicara con Maside y me presentó para eso a un sobrino de éste, un estudiante que está cursando, creo que el último año de sus estudios de medicina y es aficionado a la pintura. Se llama Carlos. A él le entregué la carta suya para Maside –y por él me enteré de la gravedad del estado de su tío. El pobre no quiso dejar de cumplir con su pedido y comprometió al doctor Bouza Brey para que nos acompañara a todas partes. No creo que muchos hayan tenido un más entendido guía que nosotros. Con él caminamos de arriba abajo Santiago. Y a cada momento, nos repetía: “No dejen de decirle a Seoane que conocieron la calle del Preguntoiro y la iglesia de la Ánimas, y..., y....” así toda la ciudad. En el Instituto de Estudios Folclóricos nos presentó a a P. Jesús Carro. Qué viejecito simpático! Allí en el Instituto guardan todas las cosas que Vd. publica. Por primera vez, creo que no me habría costado ningún esfuerzo decirle padre a un cura, a pesar de mi natural resistencia a hacerlo (y de aquellas palabras del Evangelio que dicen más o menos: “No me llaméis padre; Padre hay uno sólo, y está en el cielo”). Sólo la Catedral la quisimos visitar sin Bouza Brey. Qué majestuosa fábrica romana [sic] la Catedral de Santiago! Y luego, su Pórtico de la Gloria... No menos de seis veces volvimos a verla, a distintas horas y tratando, yo, de no dejarme llevar por recuerdos o sugestiones literarias.... Tiene talvez razón Unamuno cuando dice que aquí no se puede, como con el gótico, hacer literatura. Ni aquí caben distracciones. Y, sin embargo, dos misas importantes que allí, en la Catedral, escuchamos –la que se celebra el 23 de mayo en recordación de la batalla de Clavijo, y una misa del Episcopado (creo que el 25), carecieron de unción mística...
Pero vuelvo a sus amigos. El día 24 estuvimos con el matrimonio García Sabell. Le dejé su carta en el consultorio y unas horas más tarde nos llamó al hotel para que fuéramos a tomar el café a su casa. Qué persona extraordinaria es el doctor García Sabell (y qué hermosa y agradable su esposa)! Había muchas personas a la mesa y se habló de muchas cosas –y de todas era de ver y oír con qué precisa exactitud hablaba García Sabell. Al llegar a la casa y ver allí tanta gente reunida casi lamenté haber ido, pero luego sentí –después de casi 3 horas– tener que marcharme. Tiene una extraordinaria biblioteca con raras y lujosas ediciones de literatura y de arte, y pinturas y dibujos seleccionados con un finísimo gusto. Como recuerdo de ese día, para Vd., hizo firmar a los presentes una foto en que él –García Sabell– está en su Consultorio, con la pared del fondo cubierta con los estampados que le editó Bonino a Vd.. No se la envié desde España –y sí lo hago ahora, por temor a que se perdiera. El único que allí desentonaba era un socialista ,Tarul o Marul, que decía una sarta de banalidades en un tono que habría envidiado Lerroux –y a quién García Sabell había pedido que me informara sobre las cosas de España. En un momento dado, García Sabell le corto el discurso para mostrarnos la biblioteca y las pinturas, y todo terminó bien... Felizmente en España hemos tenido mejores informantes que ese presuntuoso y trasnochado socialista: lustrabotas, mozos de café, un changador en La Coruña, un maquinista de la RENFE en el camino de Salamanca a Madrid, un conductor de automóvil en Santander, etc., etc. En la misma mesa de García Sabell, un señor Briones de Villa García de Arosa. Estos socialistas tan fuera de época y que no sirven ni para colgarlos de la pared! (Ahora, al releer las firmas, veo que se llamaba Martul)... Pero me estoy perdiendo en detalles sin interés. Abandonamos Santiago, Aída y yo, con verdadera pena, dejando amigos y cariños. Y me fui a despedir de Maside, sin sospechar que se nos moriría pocos días después. Para Vd. me mandó un gran abrazo, un emocionado abrazo. Ahora, al transmitírselo, pienso que él presentía que era el último...
Y luego según n/ desfile precipitado: La Coruña, con su Torre de Hércules, a cuyo faro ascendí hasta el punto más alto –celebrando así a mi manera lo que Vd. celebró en dibujos de sabia caligrafía y Rafael Alberti en emocionados versos; León, cuya catedral sigue siendo un milagro de ligereza, y su Igl. de San Marcos –de un románico sobrio y cuya capilla funeraria conserva en su cúpula unos frescos sólo equiparables a los del Museo de Arte antiguo de Barcelona. Y luego más, Zamora –en que todo, o casi todo, es románico y en la que el reloj del tiempo pareciera haberse detenido. Y Salamanca, que para mí estaba llena de recuerdo de Unamuno; y, sin embargo, en esta España de Franco sólo se ha salvado de él el hermoso busto en bronce de Victorio Macho (y una cabeza en bronce, de la misma obra, en Madrid, en la Academia de San Fernando). Con quienes intenté hablar de Unamuno, o no sabían mucho de él, o temían hacerlo, y hasta el aula donde en 1920 le escuché dictar una de sus clases de filología ha desaparecido. Sólo el chófer que nos condujo de Santander a Irún tuvo un recuerdo emocionado para Unamuno; y era nada más que un obrero del volante!.. En Madrid estuvimos con Maíztegui (políticamente muy bien ubicado) a quien hicimos llegar su carta y con quien caminamos y hablamos mucho. Debo volver sobre las emociones experimentadas frente a Goya, y Velázquez, y el Greco? En cada sitio nos fuimos despidiendo como si fuera la última vez que vamos a verlo. En Madrid, al salir de San Antonio de la Florida, visitamos una vez más el Manzanares y con Aída nos juramentamos que volveríamos, sí, a España –pero acompañando a los españoles del exilio y para danzar todos juntos sobre los podridos restos de Franco... Yo no sé si se puede crear sobre el odio; pero cuando pienso nada más que en lo que en España tenemos oído sobre este grotesco payaso de la historia que es Franco, empiezo a creer que el odio es casi un deber. Odiar, sí, y hasta la muerte. Hay que formar el gran ejército del odio contra los enemigos de la vida. Cómo se comprendería en España a un nuevo [Mateo] Morral! Pensándolo serenamente, ya sé que no sirve de mucho el atentado individual; pero qué satisfacción se sentiría si alguien hiciese estallar por los aires a esa carroña. O es que solamente los tiranos tendrán derecho a disponer de la vida de los demás y nos hemos de horrorizar si alguien les revienta a ellos los huesos? Desvarío, pero, Seoane, hay que haber oído todo lo que llevamos oído en España y pensar en este pobre pueblo que se muerde los codos de rabia ante su propia impotencia –y que nos venga luego con reflexiones académicas sobre la buena táctica política. El atentado individual, sí, ya lo sé, no es solución –pero a veces puede ser una lección; y el tiranicidio, en cualquier caso y en última instancia, siempre será una medida de higiene para el mundo... Desgraciadamente creo que habrá Franco para rato –y solamente un vuelco total en la política internacional podría precipitar su caída. Se producirá ese vuelco? Lo espero. Pero, cuándo?.. Yo he recogido datos sobre lo que ganan los obreros y los empleados en España y lo que cuestan los artículos de primera necesidad. Pensaba mandárselos a Vd., pero, después de reflexionarlo, me parece tonto hacerlo. De qué le serviría a Vd.? Bástele eso: el pueblo está cada vez peor y las cárceles no se vacían. Todos los días se filtran noticias de nuevos procesos y nuevas condenas, mientras los rufianes de la prensa ensayan nuevos ditirambos para el Gran Payaso. Es un asco! Y termino, Seoane. Lea en los diarios españoles la “interviú” que acaba de hacerle a Franco un periodista de Le Figaro; produce náuseas...
De otras cosas quería hablarle, y ya ve, siempre se cae en lo mismo. Pero algún día eso deberá terminar. Terminar... Es lo único que ya nos queda por pedir.
Si en otro momento llego a estar más tranquilo (y aquí, en Francia, con De Gaulle, no es como para estarlo) le escribiré de otras cosas. Esta vez, perdóneme. Sepan, Vd. y Maruja, que están en nuestro corazón –y que, para Vds. y para nosotros, deseamos un mejor porvenir.

Los abrazamos

Scheimberg

P. D. He retenido esta carta hasta hoy, 25, y al fin me decido a mandarla; no sabría que cambiar en ella, o si destruirla del todo. Esto lo dejo a su arbitrio…Y adiós.

S.
1. O autor éstase a referir ás obras Por tierras de Portugal y España (1911) e Andanzas y visiones españolas (1922) , mesturando os títulos.

1960-02-18 Mencionado/a
Carta de Seoane a Dieste e Muñoz Manzano. 1960
Basilea
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Dieste e Muñoz Manzano. 1960 en 18/02/1960


Basilea, 18 de Febrero de 1960

Sres.
Carmen y Rafael Dieste
Buenos Aires

Queridos Carmen y Rafael:

Ayer hemos pasado el día en Strasburgo, una bella ciudad con una catedral con fundamentos y capilla románica, que tiene sobre todo unos vitrales tan extraordinarios que a cualquier pintor que se hubiese acercado alguna vez a esta artesanía le cura por muchos años del defecto de vanidad. Creo que este es mi caso. Un detalle solo que tendrá 1 m x 1 m., entre tantos centenares de metros cuadrados de vidrios, que representa un caballero blanco en el infierno hecho con almas corporizadas quemándose, en color ocre entre llamas rojas, es, por sí, una maravilla de dibujo, composición y color. Pensamos volver uno de estos días pues en realidad hacen falta muchas horas y días para poder ver la riqueza de detalles de estos vitrales, de épocas distintas por lo que se aprecia en su conjunto.
El Museo, un palacio que habitó, según se señala en una puerta, durante cinco días Luis XV y que son cinco días del pasado por los franceses o los alsacianos aprovechan para la eternidad, me hacen pensar en un lugar de la parroquia de mi madre, en Arca, que se llamó Duas Casas y donde un mediodía comió Carlos V, sin que nadie señale en placa alguna este acontecimiento histórico; y en las placas que faltan por colocar en Santiago de Compostela, o en cualquier vieja ciudad peninsular. Mas en ese Museo, independiente de los carteles turísticos, están guardados dos magníficos Zurbarán de gran tamaño, una notable cabeza del Greco, La Dolorosa, y un retrato espléndido de Don Baldomeri Iriarte, académico y “protector de las tres artes” según reza en la dedicatoria, de Goya. Hay tambien algunos pequeños Rubens, bastantes flamencos y una pequeña colección de primitivos y renacentistas italianos, un cuadro notable de Simoni y un Boticelli, además de una colección de primitivos franceses y alemanes confundidos unos y otros de Alsacia. Pero el Goya se destaca en los carteles del museo con grandes letras mayúsculas y pienso que debieran destacar igualmente a Zurbarán, con sus blancos, amarillos y tierras que son un prodigio de belleza y de pintura y bastante distintos, en cuanto a su color, a los de Lisboa, quizás por el tema, pues las dos figuras de Strasburgo son dos santas que los carteles del museo no identifican, no sé en el catálogo.
En cuanto a Basilea y Zurich estamos encantados, nos gustan las ciudades y los museos y más desde que descubrimos que en carnaval, aquí en Suiza alemana, se hacen filloas y orejas como en Galicia, aunque les llamen “fastuachtskriechli” a las primeras y “ohrli”, (exactamente orejas en el dialecto de aquí) a las segundas. Si fuese etnólogo solicitaría una beca para averiguar si proceden de la vieja población celta de esta parte de Suiza o de sus vecinos los suevos que invadieron Galicia y me iría a explorar la Selva Negra, donde, según dicen, aún se conservan las máscaras a caballo que improvisan versos como en nuestras montañas. Existe tambien una región que se llama Brandón, como el apellido gallego con la raiz Bra, que tanto gustaba a Valle Inclán, donde uno de los días de Carnaval se toma sangre de cerdo, que en Galicia, en muchas partes, se mezcla a las filloas. Desde luego no veré mi exposición por culpa del sentido organizador de los suízos, más aparente pero menos eficaz, pienso, que el de los latinos como ellos dicen, aunque comamos filloas y orejas por la misma época del año.
Hoy Basilea está cubierta de nieve y más bella aún que a diario. Es un día de los que Erasmo, Holbein y Paracelso, ilustres vecinos de esta ciudad, debieron haber gozado del calor de las grandes estufas de loza sabiamente decoradas. Holbein se distraería tratando de encontrar la línea que define la sonrisa de purgatorio de Erasmo, y Paracelso aprovecharía su tiempo haciendo algún ensayo físico en el fuego de la estufa.
Bueno, nada más por hoy, sino un gran abrazo de Maruja y mío para vosotros y todos los amigos y uno en particular a los dos de:

[Seoane]

1960-03-13 Mencionado/a
Carta de Seoane a Dieste e Muñoz Manzano. 1960
Basilea
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Dieste e Muñoz Manzano. 1960 en 13/03/1960


Basilea, 13 de marzo de 1960

Sres. Carmen y Rafael Dieste
Buenos Aires

Queridos Carmen y Rafael:

Acabamos de regresar de Munich que debió haber sido antes de la guerra una ciudad agobiante por su barroco, claro que con detalles muy buenos, y ahora resulta más bien una ciudad aburrida con su nueva arquitectura, ordinaria y repetida. El río Isar aunque poco nutrido de aguas resulta refrescante, aún dando por sabido que el refrescar es una cualidad de las aguas y de los ríos. Creo que debo esperar a madurar el recuerdo de lo visto para tener una opinión y puede que en esta opinión de hoy esté influyendo la antipatía que me merecen esos alemanes altaneros de cicatrices en el rostro que se muestran serviles al ayudarle a uno a ponerse el abrigo a la salida de los cafés, o el constante sonido de la sirena de la policía atravesando la ciudad. De cualquier manera gozamos del arte de los museos y del que encontramos en la calle en edificios públicos, o en las fachadas de edificios privados, sin saber bien cuales edificios fueron reconstruídos o se conservan tales como eran. En uno de los museos encontramos otro de los Quijote de Daumier, la mayoría están en Zurich y Basilea; algunos espléndidos Manet, otros no menos bellos Constable y entre la cantidad considerable de pintura bávara y alemana, en general del siglo XIX, tres Fortuny no tan notables como otros que tengo visto. En pintura no hemos contemplado nada anterior al siglo XVIII, pues la Pinacoteca Nacional que vimos en París aún tiene el edificio por restaurar. En ésta colección están los Goya, los Murillo y creo que un Greco. En cambio vimos algo de la pintura expresionista de la primera veintena de este siglo, mucha obra de Kandinsky de esos años realmente muy importante en lo que él denominaba “improvisaciones”, que revelan un pintor extraordinario que luego se amaneró, por lo que vimos en París en el otro viaje, convirtiendo la pintura en ilustración de sus teorías. En Basilea gozamos del carnaval, un espectáculo inusitado por su belleza, organizado tradicionalmente por artistas locales, escultores y pintores, y en el que se comenta con humor, por comparsas, los acontecimientos del país y del mundo en el año. Todo ello con auténtica gracia de color en las ropas inventadas y excelentemente modeladas las caretas. Más todo ello es difícil de describir. Hay que verlo para poder percibir su carácter excepcional. El pueblo no hace más que admirar estas comparsas y apenas interviene sino como público en la celebración, aunque el carnaval esté presente desde dos o tres semanas antes anunciándose en toda la ciudad. En ningún momento creí volver a tener el gozo infantil del carnaval de la montaña gallega, con sus generales a caballo, como tambien le gusta a Laxeiro y más bien, más tarde, desdeñé todos los carnavales que pasaron hasta éste, nada espontáneo sino organizado, perfectamente organizado, como un ballet, que es lo que resulta ser, sirviendo la ciudad de escenario. Formamos parte del público, aún cayendo bastante nieve, durante horas. Las flautas y tambores que tocan las comparsas, así como su desfile, son motivos de pacientes ensayos durante semanas.
Bueno, éstas son en general algunas noticias. Las que se refieren a mis obras gustan en general bastante y preparan una gran exposición en la Kunsthalle de esta ciudad, en combinación con entidades de Alemania y Holanda, pero debo enviar más cuadros de ahí y renunciar, hasta que se celebre, a las exposiciones de galerías privadas. Esta semana se concreta todo y os daremos más noticias. Los grabados también interesan mucho y se sorprenden del adelanto de las artes gráficas argentinas. Esto convendría que lo supiesen en la Imprenta López para que bajasen los precios de nuestros libros. Quizá mejor que no lo sepan para que al revés, no los aumenten.

Bueno, por hoy no recuerdo más sucesos. Un saludo a todos los amigos y un gran abrazo para vosotros dos de:

[Seoane]

1961-05-12 Mencionado/a
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1961
Bos Aires
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1961 en 12/05/1961


Buenos Aires, 12 de Mayo de 1961

Sres. Esther y Lipa Burd
París

Queridos Esther y Lipa:

Creo que esta carta debe llegar a tiempo para encontraros en París si no modificásteis las fechas que teníais señaladas para vuestra estancia en esa. Supongo que debéis tener noticias abundantes de Buenos Aires. Las nuestras en muchos aspectos no creo que tengan demasiado interés. Todo se desenvuelve con la misma normalidad o normal anormalidad de estos últimos años extendida a lo largo del continente. Uno trabaja como puede, sumido en esta anormalidad de silencio e indiferencia que solo altera algún grito salvaje de malón. Ese malón que, a despecho de Sarmiento, continúa latente como una amenaza en el país y que ahora tampoco excluye el arte. Y no es que piense que estén de más los malones en pintura por ejemplo, sino que continúo prefiriendo en este aspecto el grito individual y solitario del pastor montañés deseoso de afirmarse hombre en el grito y de sentir, al emitirlo, una esperanza de solidaridad de la tribu o de la aldea. El malón llegó este año en Buenos Aires al Museo y expone, a través del patrocinio de Ver y Estimar, ese berrido que no procede de la individualidad de cada expositor, sino del rebaño, con excesos de negro –un negro de paños funerarios, no el de Goya, lujoso y dramático– y chatarra comprada en la calle Warnes o procedente de las quemas. De entre los expositores del museo a que me refiero, alguno en quien se ve talento, de quien uno espera la actitud solitaria expuesta e indiferente de las modas. Hoy acabo de encontrarme con el escultor Lorenzo Domínguez que pasó un año en la Isla de Pascua, viviendo parte del tiempo en cuevas y que trajo unas ochocientas fotografías de las grandes esculturas labradas en lava volcánica, de petroglifos, a las que hasta ahora nadie había dedicado demasiada atención, y unos ciento cincuenta dibujos de esas grandes y misteriosas cabezas y de los temas, hombres pájaro sobre todo, grabados en las rocas. Una maravilla que hasta ahora conocimos en escasas fotografías hechas en general por sabios arqueólogos ignorantes de su interés artístico, o viajeros de buena voluntad y escasos conocimientos que no encontraban diferencias formales en esas tallas remotas. Domínguez vuelve nostálgico de esa isla, con ese pasado poblado por esas grandes rocas talladas laboriosamente, colectivamente, por un pueblo, y de las mismas gentes actuales que allí viven herederos de aquellos grandes escultores anónimos y a su vez tallistas que andan de un lado para otro de la isla con las maderas que labran en cualquier parte, sentados sobre una cabeza de piedra caída o montados sobre un caballo que marcha al paso.
Por mi parte estoy más tranquilo. Estoy trabajando en unos murales y he pintado algo, muy poco, tratando de afianzarme tercamente en lo mío con algunas variantes, las que me dicta mi necesidad de expresión y las experiencias que surgen en la propia obra. Volviendo a la Isla de Pascua, algún petroglifo representa en su esquematismo un barco europeo con una forma indeterminada, quizá sea una nube furiosa precursora de la tormenta con que los antiguos habitantes conjuraban su presencia. Quizá nosotros, individualmente, sin dejarnos guiar por sacerdotes anacrónicos, a nuestro juicio, estamos conjurando algo que presentimos como una amenaza y que se encierra en nosotros mismos. Aquellos primitivos conjuraban el barco tripulado por hombres corruptores de su inocencia y de sus costumbres. Quien sabe si nosotros no conjuramos el barco a la deriva, el solitario barco holandés de la leyenda, que llevamos dentro. Bueno, perdonarme esta carta, pero no quería escribirte nada que se refiriese a Frondizi o a Alsogaray, o a cualquiera que solo merezca una caricatura hiriente en un día cualquiera, aún sabiendo que señalan nuestra época en este país a pesar de todos nosotros.
Creo que os abrazaremos pronto, para entonces guardo cualquier novedad. Un abrazo de Maruja y mío para María, Jonquiéres, Aurora, Cortázar y todos los amigos y otro muy fuerte para Esther y para tí de Maruja y de:

[Seoane]

1962-10-16 Mencionado/a
Carta de Carballo Calero a Otero Pedrayo (1962)
Fingoi
Ourense
Orixinal
1963-04-01 Mencionado/a
Carta de Seoane a Falcini. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1963 en 01/04/1963


Ginebra, 1 de Abril de 1963

Sr. Luis Falcini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hace veinte días que estamos en ésta y hasta ahora no traté de hacer otra cosa que mirar y, cuando pude, ver y comprender. Las ciudades suízas son encantadoras, más, para mí, las de la Suíza alemana: Berna, Basilea, Zurich, me gusta lo que tienen de medieval estas ciudades, sobre todo Basilea y Berna y encontrar el arte por sus calles, bueno y malo, pero siempre hecho con amor y oficio. Me gustan las fachadas pintadas, con relieves, o solo con viñetas heráldicas y frases en caracteres góticos que no entiendo, pero distribuídas de manera que uno puede encontrar en su disposición el genio gráfico suízo. Es un arte racional el que hacen las gentes de este pueblo. Racional como sus máquinas y sus comidas.
Suiza va siendo una inmensa máquina donde los hombres actúan formando parte de su engranaje y cuando tienen tiempo para detenerse a pensar en sus vidas sueñan con el apasionado desorden latino, o con la supuesta vida libre en la para ellos desconocida América de las grandes pampas, horizontes y selvas. La misma belleza del paisaje está aquí muy construida y pensada. Apenas queda rincón que el hombre no hubiese diagramado. Se trata de un esfuerzo de siglos y el propósito de libertad que les llevó a hacer este país condicionándolo a las montañas, los ríos y la nieve, y a racionalizar su religión, acaba por encadenarlos. Pienso que la vuelta de muchos suízos a la iglesia católica es un regreso instintivo a las viejas supersticiones, a la poesía de las imágenes y los ritos, a la anarquía teológica y al desorden y variedad latina que distingue a esta iglesia. Nosotros, herederos de Grecia y Roma y de las leyes bíblicas, que la iglesia nos resumió en catecismos y más bien procuró hacernos olvidar, buscamos algo de ese orden y racionalidad que a ellos ahora les distingue. Pero corremos el peligro de sumirnos en otro exceso y en la nostalgia de la acción instintiva, humana y verdaderamente libre. Perdóneme esta disquisición.
Al arte suízo le falta en general dejarse llevar por el instinto, por ese supremo valor del “me dá la gana” de otros pueblos. Todo está demasiado calculado y sabido, por esto, seguramente, su genio se expresa fundamentalmente en las artes gráficas, industriales y prácticas, lo que, a mi modo de pensar, no les desmerece, sino que los distingue. Son sobre todo notables e ingeniosos artesanos y su arte tiene siempre una finalidad colectiva. Se comprende que Le Corbusier sea suízo y hubiese inventado aquello de la “máquina para vivir” refiriéndose a la casa. Uno ve en los museos las habitaciones medievales de este país y ya entonces eran “máquinas para vivir”, como verdaderas máquinas semejan las fachadas de sus casas antiguas, cada ángulo de la decoración formada por las maderas obedece a una necesidad formal de resistencia y geometría.
Quizá esto explique a Max Bill y su concretismo. Pero uno come los sabios e insuperables chocolates de Suíza y a uno le queda en el paladar la nostalgia de los chocolates hechos a mano en las viejas ciudades españolas, heredado del descubierto en Méjico, menos dulce y más arenoso. Más primitivo y más humano, como ocurre con los quesos de Italia y España. He vuelto a ver a Hodler y a los primitivos suízos, Conrad Witz y Nicolás Manuel, se trata de extraordinarios técnicos de la pintura, de grandes pintores que hay que conocer, pero les falta el toque de dramatismo, locura e instinto, o el genio renovador de sus contemporáneos de algunas otras partes de Europa. Hodler pintó algunos cuadros con figuras yacentes. En ellos está todo lo que caracteriza a la muerte, el color y los gestos últimos, pero se trata de una muerte limpia, ascética, muy poco dolorosa y cruel, humanamente animal, tal como la descubrieron Rembrandt o Goya.
En los museos de Basilea y Zurich encontré nuevos ejemplos de escultura, incorporados a partir de 1960 por adquisición o donaciones. A la entrada del Museo de Zurich junto con La puerta del infierno de Rodin y la gran escultura de Lipschitz están ahora Moore y Marino Marini con una maternidad y un caballero, respectivamente. En el patio del de Basilea junto con Los burgueses de Calais de Rodin, está otro caballero de Marini de bronce, como el de Zurich. Pero más que en escultura es en pintura en lo que aumentaron estos museos. Extraordinarias piezas de impresionistas y casi todas las escuelas posteriores se han incorporado a ellos, pero a todo esto iremos refiriéndonos con tiempo en otras cartas. Uno siente como el arte constituye una necesidad para las gentes de Suíza. Está presente en todas partes y hasta ahora no me referí a los maravillosos libros que se ven en las vidrieras de las librerías impresos en Zurich o en Lausanne, o en Newchatel, y por los cuales uno siente, otra vez más, no ser millonario.

Un gran abrazo para todos los amigos, de Maruja y mío, saludos para los suyos y otro abrazo de su amigo para usted:

[Seoane]

1963-04-02 Mencionado/a
Carta de Seoane a Sofovich. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1963 en 02/04/1963


Ginebra, 2 de abril de 1963

Sr. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estoy ahora empezando a escribir cartas. Dejé pasar todo este tiempo para poder de mejor manera concretar las impresiones que voy recibiendo de lo que veo. Suiza me gusta mucho. Me encanta su paisaje, su nieve y sus ciudades y hasta sus gentes, creo que más a partir de Berna y hacia el norte. Se ven los defectos, pero también puede uno ir admirando sus virtudes y éstas son todas aquellas que nos enseñaron a practicar de niños nuestros padres y la escuela. Se trata de virtudes elementales y prácticas que sirven para hacer cómoda la convivencia. La practicidad es la norma de conducta habitual de estos montañeses, seguramente impuesta por el clima y la necesidad de preservarse de vecinos ambiciosos. Su fantasía está destinada a la invención de objetos útiles y a encontrar en su ejecución satisfacción artística. Les gusta que las cosas estén bien terminadas y produzcan buen efecto, que sean bellas. Quizás esta cualidad les viene de una larga herencia campesina, de encierros caseros en las largas nieves de sus montañas. Alrededor del fuego para calentarse el cuerpo debieron nacer las mejores virtudes suizas, y las virtudes de su arte. Pintan, dibujan, esculpen con exacta corrección, con largo conocimiento del oficio y con tozudez destinada a hacerlo lo mejor posible. Un gran pintor suizo es Hodler, que no tiene, a mi juicio, la resonancia universal que debiera. Extraordinario dibujante y pintor, un poco frío, pero muy sabio y que en su obra es espejo fiel del temperamento de su pueblo. Yo no sé si fue verdad histórica el suceso de Guillermo Tell o es leyenda, pero, cualquiera sea su origen, esa precisión conque dispara la flecha sobre la manzana que está en la cabeza de su hijo, es la precisión que caracteriza a Suiza y a sus artistas. Posiblemente, nada se encuentra individualmente genial en este país. Su genio, en todo caso, es producto del esfuerzo colectivo. Los retratos de Holder son admirables como lo son muchos de sus paisajes de montañas, donde las nieves y las nubes se confunden en color y forma para dejarnos ver por trozos el azul del agua y el verde de los vegetales. Cada línea de sus retratos es exactamente del tamaño que corresponde y está en el único sitio donde puede estar en el cuadro, sirviendo al mismo tiempo para definir al retratado. Pero esto mismo ocurre en los retratos de Goya o de Rembrandt y existe además algo indefinible que escapa a toda lógica y a la corrección del oficio. Félix Valloton, otro suizo, es un maestro, pero le falta el valor de saber desprenderse de lo que es correcto y que fue aprendido. Uno piensa en Renoir o en Monet, que vivían por los mismos años, posiblemente de más edad, no lo sé, pero que se atrevían a dejarse llevar por la fiebre del color y de la expresión. He visto estos días un desnudo rojo de Renoir muy descuidado de dibujo en el sentido académico, pero bellísimo de color y, ¿quién nos diría que esas manchas verdes y azules de Monet componen el detalle de un paisaje?
Vi algunas exposiciones extraordinarias, una de ellas de Jawlensky, del que le hablo a Scheinberg, y en una galería dedicada a libros de arte y grabados cuatro libritos, más chicos que los librillos de papel de fumar, de 3 centímetros por 2 aproximadamente, ilustrados por Picasso con aguafuertes. Son ejemplares numerados y de muy poco tiraje y cuestan 1.000 francos suizos, unos 31.000 pesos más o menos. Aparte de esto, también algunos espléndidos Picasso que vi por galerías, aparte de los museos, que nunca he visto reproducidos.
Bueno, refiriéndome a cuestiones de otra índole. ¿Cómo va el asunto del cobro de la Hebraica? ¿Qué dice el doctor Bruetman? ¿Y Bernárdez? ¿Continúan yendo a Ranelagh? Suponemos que sí si el verano este año es tan constante en ésa como aquí el invierno. Ayer nevó en Ginebra y hoy amanecimos con lluvia y frío, a pesar de esto, los comercios y las gentes están preparadas para gozar de la primavera. Me gustaría que nos enviasen noticias de ésa. Supimos por los diarios de la renuncia del Ministro del Interior y antes de los sucesos provocados por la actitud de la Marina. Le ruego que nos escriba.

Reciban Elsa y Ud. el saludo de Maruja y mío y además Ud. un abrazo de:

[Seoane]

1963-04-29 Mencionado/a
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 29/04/1963


Ginebra, 29 de abril de 1963

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Querido Varela:

Recibí tu carta del 22 y te agradezco todas las noticias que me envías. Resulta confusa la de Paspagnoli, ¿es Director del Museo Nacional, como escribes, o del de Arte Moderno, en lugar de Squirru? Si lo es del Museo Nacional, ¿qué pasó con Romero Brest? Siento verdaderamente la muerte de Lorenzo Domínguez, era un gran artista y un excelente amigo. Para mí, además, otro español del exilio, aunque hubiese nacido en Chile, ocupado cátedras en la Argentina, etc., como escultor nació en España, donde se formó y a cuya sangre pertenecía. De aquí la noticia más importante fue la ejecución de Julián Grimau en Carabanchel. Toda Europa se conmovió. Manifestaciones en todas las ciudades europeas. En Francia, Italia y Suiza, obispos y organizaciones católicas hicieron pública su protesta. Aquí, en Ginebra, hubo dos manifestaciones. La última, el sábado 27, de todas las organizaciones sindicales. Al terminar el acto, donde sólo hizo uso de la palabra un dirigente obrero, lanzaron al lago dos coronas de claveles blancos y centenares de claveles rojos para que remontasen las aguas del Rhône y llegasen simbólicamente a la costa de España. Franco se cerró definitivamente, pienso, muchas puertas europeas, las que se había entreabierto para la liberación de su economía y su política. La prensa francesa es en casi totalidad, intransigente con él, con la ahora dudosa ayuda económica de De Gaulle y con Malraux, del que nadie puede escuchar su silencio. Pero ahí van algunas noticias, pues no creo puedas pasar la de Grimau.
En Ginebra, se ha inaugurado una gran exposición del pintor cubano Wilfredo Lam en la Galería Krugier, seguramente una de las más amplias y selectas de esta ciudad, que comprende obras desde 1938 hasta 1962. Se trata, en general, de cuadros de gran formato, de un surrealismo muy particular y realizados con una técnica muy sintética. Sus temas, muy repetidos desde hace años, se refieren a un mundo cubano tropical y de resonancias africanas y oriental. Cañaverales, grandes pájaros, pies y manos muy dibujados sugiriendo no se sabe de qué cuerpos, picos de aves, todo formando ángulos agudos dibujados con precisión. En la primera época, usaba una paleta de verdes, rojos y violetas muy tímidamente puestos al modo impresionista y en los últimos años dibuja simplemente con negro sobre un fondo gris casi blanco. Manifiesta un mundo original que tiene que ver lo mismo que con su país, con su origen chino y negro. Se trata desde luego de un excelente pintor, sabio y menor, que con los años redujo sus aspiraciones y que alcanzó, como los chinos con sus aguadas o como Goya con sus últimos óleos y grabados, a encontrar todo el color posible sólo en el negro.
En la ciudad vieja de Ginebra, se instaló una nueva galería de arte, la Galería Iolas. Se trata de una galería de Nueva York que ha abierto dos sucursales en Europa, en París y en Ginebra. Seguramente, en esta última ciudad, como muchas empresas norteamericanas con el fin escondido de burlar los impuestos de su país. Se inaugura con una muestra de Max Ernst, unas sesenta obras, casi todas ellas de la última época del pintor y los precios de los cuadros oscilan entre 150.000 francos suizos, es decir, 4.600.000 pesos aproximadamente, el de mayor tamaño que es de alrededor de un metro cuadrado, y 21.000 francos suizos, es decir, 690.000 pesos el más chico, el grandor de media tarjeta postal. La calidad, con ser buena en general, no está, pensamos, de acuerdo con los precios. Los mejores cuadros de Max Ernst se presentan, como ya comentamos, en el Museo de Zurich.
Suiza acabad de obsequiar a la Unesco con un tapiz de Le Corbusier de 6,50 x 3,50 metros que decorará la sala 5 y que evocará, según una frase del delegado suizo, “la alegría de vivir y una incesante juventud”. Esperamos que el tapiz, como los tapices de los cuentos orientales, pueda desprenderse a ratos de la pared a que fue destinado para llevar, entre nubes, alegría y juventud a los pueblos subdesarrollados y hambrientos que tantas valiosas horas de preocupación consumen a los delegados de la Unesco. La preocupación de Le Corbusier fue, antes de pronunciarse los discursos, colocar su gran tapiz en la pared de una sala exigua como parece que es la sala cinco de la Institución internacional. Se le presentó al arquitecto racionalista un problema de Chesterton que, seguramente, por nada racionalista, podría el escritor inglés resolver más fácilmente.
Uno de los más importantes críticos de arte de Europa, el francés Georges Duthuit, acaba de publicar un libro, Le feu des signes en Ediciones Skira de Suiza. Con este motivo, acaba de declarar “los estetas generalmente vienen después de los artistas, de sus obras”. En el libro se vuelve contra la estética contemporánea, la dispersión del arte de nuestra época, la concepción individualista del arte y reniega de los prefacios que hizo en los últimos tiempos para pintores del informalismo y de la abstracción lírica, como Riopelle y Sam Francis. El pintor, afirma, debe participarnos la certeza de pertenecer al mundo. La obra de arte no puede reducirse a sabios juegos formales ni a especulaciones geométricas o psicológicas. El libro de Duthuit estalló como una bomba en los medios artísticos y del comercio de arte. Antes se había rebelado contra la concepción estética del Malraux publicando su excelente libro El museo inimaginable.
Georges Mathiew, afecto por la mala crítica que obtuvo de su gran exposición en el Museo de Arte Moderno de la ciudad de París, responde a uno de los más sañudos, André Chastel, de Le Monde, con un artículo en uno de los últimos números de Arts, en el que, si bien logra comadrear alrededor de la obra de Chastel, no consigue desde luego defender su pintura, que era lo que algún público esperaba. En compensación, en uno de los últimos números de París Match, aparece retratado en las poses más diversas vestido de lujosos trajes, que unas veces parecen hacen surgir su figura de una tela del Ticiano o de Velázquez y otras de Goya, y entre muebles muy curiosos y caros. Fotografías singulares que en nuestra época tienen mucho que ver, aunque parezca mentira, con el comercio artístico.
Morir en Madrid es la última película de Frédéric Rossif, el autor de otra muy buena Le temps du ghetto, hecha a base de documentales extraídas de los archivos. También de los archivos de varios países extrajo la documentación gráfica para relatar la guerra de España. Un relato apocalíptico, según juzgan algunos críticos, que mereció el que interviniese la censura francesa cortando frases del texto redactado por Madeleine Chapsal. En estos días, la película de Rossif es la más comentada de Francia y su nombre Morir en Madrid sirvió, en general, como título a los numerosos comentarios que se hicieron contra Franco alrededor de la ejecución de Grimau. Resulta un excelente recuerdo en el momento en que Francia se apresta a ayudar financieramente a España formando parte de su gobierno Malraux, el caballero, subrayamos entre comillas, de La esperanza.

Querido Varela. Éstas son las noticias por hoy. Creo que abundantes. Escríbeme. Un abrazo de Maruja y mío para los dos:

[Seoane]

1963-05-22 Mencionado/a
Carta de Seoane a Scheimberg. 1963
Xenebra
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1963 en 22/05/1963


Ginebra, 22 de mayo de 1963

Sr. Simón Scheinberg
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estábamos verdaderamente alarmados por la falta de noticias directas de ustedes. No sabíamos a qué atribuirlas. Nosotros, es cierto, no escribimos inmediatamente después de nuestra llegada porque no queríamos dejarnos llevar por impresiones rápidas. Su primera carta, la del día 16 de la que usted me escribe, no la hemos recibido. Pero no fue la única perdida. Tampoco recibí una que me envió un amigo mío del Centro Gallego a quien envío semanalmente las colaboraciones de la audición Galicia emigrante. De modo que puede imaginarse la alegría con que Maruja y yo abrimos su segunda carta, la que nos llegó, del 12 de mayo. De mis asuntos, los referidos a la pintura, no puedo decir aún si me va bien o mal. Creo que, en general, me va bien. Es posible que haga algunas exposiciones en Basilea, Zurich y Ginebra, en las tres ciudades o en dos de ellas, aún no lo sé, pues no tengo nada firme concretado, y es también posible que haga un mural de hierro para unas oficinas de Zurich. Gustan mucho mis obras y en este sentido estoy contento, pero la gente es muy lenta para decidir cualquier asunto, y yo, venido de Buenos Aires, soy aquí como un caído de Marte, pues la vara de medir en cuestiones artísticas es París o Nueva York. Para la Suiza alemana, Alemania además de París y Nueva York. Nueva York cada vez menos, pues París recobra en estas cuestiones su influencia. El arte italiano actual no cuenta en Suiza. El caso de Marino Marini, muy comprado aquí, no sirve como ejemplo, pues vivió muchos años en Zurich. Se trata de una influencia económica, de intereses comerciales de galerías en la que nada tiene que ver la calidad de la obra de un artista. En Ginebra, según veo ahora en un diario para transmitírselo a usted, hay 23 galerías de pintura. De ellas dos o tres son directamente sucursales de galerías norteamericanas y llevan el mismo nombre de la casa central, las otras tienen nombres independientes, pero sus dueños son agentes de venta de grandes galerías de París. El marchand, aquí, más que un agente cultural es un agente financiero que depende de otros agentes financieros de tipo distinto. La obra de arte posee un valor económico al que se atiende en primer término y, concretamente, la banca le dedica especial atención. Un marchand de París o de Nueva York invierte sumas muy importantes en la propaganda de un artista contratado por su galería, le hace intervenir en exposiciones internacionales, bienales, concursos, etc., promueve campañas de prensa por medio de ensayos de expertos, reportajes sobre el artista, su vida, sus costumbres, etc. Todo sirve como pretexto de la nota, el castillo que compró Buffet que es un pintor de 32 o 35 años a quien espera un porvenir más glorioso que su pasado; la colección de perros de otro; el amor por los muebles antiguos y las ropas lujosas y extrañas de Mathieu; el catolicismo gaga de Utrillo, cualquier motivo sirve para una nota en París Match o en revistas similares y otras breves notas para agencias periodísticas internacionales, que luego compran y reproducen por precios baratísimos los diarios y revistas de todo el mundo, especialmente las que como en Buenos Aires son exclusivamente comerciales. Luego, también por medio de agentes, los mismo directores, comienza la venta a museos europeos de países ricos, los del Báltico, Suiza, Alemania Occidental, Holanda, Bélgica y es entonces cuando aparece el agente bancario o el experto financiero que invierte grandes cantidades en estos valores. En Suiza, se ve muy bien esto. El experto financiero de cualquiera de esos multimillonarios árabes, por ejemplo, lo que más abundan de países petroleros, o que un día siendo ministros se levantaron con el tesoro de su patria, norteamericanos, o de cualquier parte, compran una cantidad de cuadros del pintor consagrado en París, que tiene ya una cotización alta, y los deposita en un banco suizo sin que el propietario jamás los vea, pues no le interesan como arte, sino como inversión, y sin que esos cuadros vean más la luz en mucho tiempo. Estos cuadros rinden más beneficio al adquiriente que muchas acciones de empresas industriales y comerciales. Calcule usted la suba de valor de una obra de Buffet o cualquiera en su condición, de 1950 a 1960, este cálculo le dará a usted idea del beneficio. De Max Ernst podía adquirirse en París en 1949 un pequeño óleo suyo por unos 15.000 francos de entonces. Ahora, en una galería norteamericana de Ginebra, óleos suyos de tamaño de media tarjeta postal valen 21.000 francos suizos, es decir, alrededor de 650.000 pesos argentinos. Y esto que ocurre en la obra de artistas actuales para con las antigüedades. No hay, creo, pequeña villa suiza, casi aldeas, que no tengan su tienda de antigüedades, objetos extraños que pasan de unas manos a otras creciendo de valor. Creo que me extendí demasiado sobre esta cuestión, pero ello explica muchas cosas. Solana, un gran pintor español, tiene una cotización local en España, pero no la tiene internacionalmente y eso ocurre, por ejemplo, con Carrá en Italia, Figari en la Argentina, etc. Pero todo ello aclara porque lo que se ve en galerías son exposiciones de artistas provenientes de París. Alguien que venga por su cuenta, solo, de Calcuta o Buenos Aires, debe luchar con enormes dificultades y la primera importante es el miedo de las galerías a perder dinero. Sin embargo, por mi parte, no me quejo. Vine, eso sí, en mal mes, debí haber llegado en invierno. Ahora tengo que esperar. Mientras tanto, iremos a España alrededor de mediados del mes que viene luego de pasar unos días en París para ver museos y amigos y volveremos aquí en septiembre. Hemos estado en Grenoble y vimos espléndidos óleos de Matisse, Bonnard, Picasso y los cubistas en general. También notables obras antiguas: Zurbarán, Velázquez, Goya, aparte de los franceses y primitivos. Un notable retrato de Fantin Latour. Grenoble es una ciudad encantadora que como todas las del Delfinado y la Savoya tienen además el atractivo de su soberbio paisaje. Por todas partes, trabajadores españoles en cantidad. Como aquí mismo en Ginebra, castellano, catalán y gallego son idiomas que se escuchan corrientemente por las calles. Anduvimos también por regiones suizas. Hasta estuvimos en Gruyère, el lugar de los famosos quesos que resulta que se hacen sin agujeros, muy compactos y que los agujeros son de Ementhal, un sitio entre Berna y Lucerna. Gruyère tiene un hermoso castillo. He hecho algunas acuarelas de paisajes alpinos. Todo esto me atrae mucho. Pero, en esta época del año, los suizos, por lo menos los que a mí me interesan para mis asuntos, se marchan de vacaciones y nosotros aprovechamos para ir a España.
Tuvimos noticias del tremendo efecto causado por el movimiento europeo de protesta por la ejecución de Grimau, sobre todo de las protestas católicas, de obispos, de congregaciones, etc., que se manifestaron con firmas o en la calle junto a las personalidades de izquierda y los partidos políticos. Los diarios españoles, por vez primera, dieron noticia de algunas de ellas sin alterarlas, aunque luego las comentaran caprichosamente. Pemán arremetió contra Mauriac en el ABC. Es inútil, algo cambia también en España. Pemán usa argumentos que no sirven para un católico francés y que empiezan a no servir tampoco a algunos españoles con miedo al porvenir. Sobre la Argentina, los comentarios son de pesimismo alarmante. Nosotros sentimos no tener más noticias.
Bueno, Scheinberg, nada más por hoy. Lamentamos la enfermedad de Aída. Esperamos que cuando llegue ésta haya mejorado. Nosotros los recordamos siempre y les extrañamos como a todos los amigos de ésa, a los que escribimos y a los que aún no les hemos enviado noticias nuestras. Para todos, todos, un gran abrazo de Maruja y mío y otro especialmente para Aída y usted de Maruja y de:

[Seoane]

1963-06-07 Mencionado/a
Carta de Seoane a Varela. 1963
Xenebra
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 07/06/1963


Ginebra, 7 de junio de 1963

Querido Varela:

El domingo saldremos para Madrid. Volveremos aquí en septiembre y entonces será cuando pasemos por París. Las gentes que a uno le interesan salen de Suiza para pasar vacaciones en alguna parte y yo me voy a España a ver a los míos y a ver qué se puede hacer. No te extrañe que pase una semana sin enviarte noticias. No creo pueda hacerlo la semana que viene. Luego alterné las de España y Europa, Francia, como ahora.
Ahí van algunas:
El pintor español Saura, que acaba de exponer en París, clasificado como informalista por uno y nuevo figurativo por otros, pero perteneciente al arte negro español y concretamente al grupo El Paso de Madrid, hizo las siguientes declaraciones en una entrevista que le hizo una cronista parisién: “Para expresarse los pintores españoles han recurrido siempre a medios muy simples con el fin de establecer una presencia humana. En general y en su pintura existe un desinterés total por lo accesorio. Si me abro a todo lo que pasa en el mundo, quedo ligado a esta pintura como a la realidad social de mi país. Así soy capaz de pintar otra cosa que la estructura humana. No creo interesar por la anécdota y estoy en contra del oportunismo de la nueva figuración. Exprimo el contenido del hombre, su contenido estructural, ensayando de expresar la realidad que veo”. “El gran problema del pintor que crea es no separar su concepción política de su pintura, es poder comunicar sus opiniones sin traicionar el lenguaje plástico de su tiempo”. Refiriéndose a la actual pintura española expresó: “Por necesidades de la causa (con fines de propaganda oficial), se han colectado pintores como patatas y se ha fabricado artificialmente una pintura falsamente austera, falsamente violenta... Después de la guerra existen sobre todo Tapies y la fuerte realidad de los grabados de Ortega”. “Pintar –añadió– es trabajar por aquello que el pintor desea, es un medio de acción política, aunque el pintor sea el artista más limitado para influir sobre la sociedad. Su posición social, su sentido moral importan tanto como su obra”.
En el Museo Pedagógico de París, se celebra la exposición del Grupo de estudios Françoise Mintowska, que emplea el dibujo como medio inmediato de aprehensión de la personalidad profunda, en la línea de las búsquedas modernas de la psicología por la cual toda forma de expresión tiene un significado y se refiere a una realidad subyacente. Utilizan como tests los dibujos infantiles y por ello nos enteramos muy groseramente que el epileptoide sensorial tiende a la vehemencia, a lo explosivo, ligado a algo concreto, etc., y el esquizoide-racional dominado por la abstracción, el alejamiento, rotura, recurriendo al símbolo. He aquí como el crítico de arte, al mismo tiempo que juzga la obra del artista, puede suministrarle su diagnóstico y posiblemente métodos de curación. Ejemplo de epileptoide-sensorial sería Van Gogh y de esquizoide-racional Seurat, según Mintowska. Por nuestra cuenta, pensamos que Kandinski o Picasso reunirían en ellos, a través de sus dibujos, grabados y pinturas al epileptoide-sensorial y al esquizoide-racional.
Según el crítico Pierre Schneider (L´Express), “El grabado, por su técnica misma, es un arte de maníaco”, se refiere a los grabados de Bresdin, un notable grabador romántico que Baudelaire calificó de genial. “Es en la manía, en la obsesión donde reside la singularidad de Bresdin”, escribe Schneider. La crítica parece de Mintowska.
Jean Giono, en el prólogo de un álbum de croquis de Marruecos de Ives Brayer, afirma: “Nada más inteligente que un dibujo; es la impresión misma de la inteligencia”. “La palabra existe –añade Giono– tal como uno la emplea, en la memoria o en el diccionario; pero no hay catálogos para el trazo, hace falta inventarlo en el instante y nace a la existencia en el momento mismo que uno lo realiza”.
Otro pintor español, Pelayo, exilado en París, expone en esta ciudad (Galería Synthese) una serie de óleos que titula Retratos apócrifos. Se trata de personajes literarios o históricos españoles realizados brutalmente, a la vez gestuales y mediados. Algunos críticos señalan su preferencia por los paisajes austeros, secos, calcinados, que representan La Mancha y que caracteriza su obra anterior.
El escultor argentino Marino di Teana realizó gran parte de las esculturas de la actual exposición de Arte Contemporáneo que se celebra en el Gran Palais de París. Una, de acero inoxidable, tiene 13 metros de largo por 6 de alto y otra, 7 metros de alto por 18 de largo. En el catálogo de esta exposición se afirma la abstracción comienza con El Greco y Goya. Es un punto de vista, como escribe Michel Ragón.
He aquí algunas afirmaciones de Braque contestando a unas preguntas de André Parinaud: “En pintura es lo imprevisto lo que da lugar al acontecimiento”. “En arte no existe más que una sola cosa que valga: aquellas que uno no puede explicar”. “Lo que interesa a Picasso es un juego de formas. Él juega... él juega siempre por otra parte. Viene a ser un caricaturista de la pintura en el sentido grande y noble”. “El renueva el destino y la novedad de todo hasta la caricatura, bien sabido que en el sentido pictórico de la palabra”.
“La naturaleza muerta debe estar sujeta al control del tacto”.
“Después de Cezanne es la gran aventura la que comenzó, la libertad. La libertad, sabemos, se conquista, no se otorga”.
“Se ha terminado el cuadro cuando se borró la idea”.
“Con la edad, arte y vida son uno”.

He aquí todo por hoy. Dile a Marika que los grandes compradores de antigüedades en Suiza son los árabes que se levantaron con el tesoro de su país o que cobran un tanto por ciento por la extracción extranjera del petróleo en sus países. Os recordamos. Escribid. Un gran abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

1963-07-13 Mencionado/a
Carta de Lois Tobío Fernández a Virgilio Garrido, 1963.
Madrid
Montevideo
Orixinal Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Lois Tobío Fernández a Virgilio Garrido, 1963. en 13/07/1963

13.7.63

Querido Garrido:
Recibí su carta última hace ya algún tiempo y posteriormente Constanza recibió el regalito que Vd. le envió por intermedio de León Cárdenas y que ella le ha debido de agradecer por separado. Nosotros seguimos sin mayor novedad, descubriendo cada día nuevas cosas en este nuevo y cambiado Madrid. Miguel aprobó el 6º y último año de bachillerato, pues solo le habían convalidado hasta el 5º, y se ha ido a Galicia desde donde nos escribe cartas entusiasmadas.
Desgraciadamente no podremos nosotros tener la suerte que el tiene y deberemos contentarnos con no más de una semana en Alicante y quizas otra, más tarde, en Málaga. Las playas del norte se encuentran, este verano, muy frías y hay que ir al sur o a levante para disfrutar de algún calorcito veraniego.
Estuve con Verdú y charlamos de muchas cosas. No sabe si quedarse o volverse. Desde luego que, económicamente, esto está mejor que aquello y dada su experiencia y su cancha probablemente prosperaría más y más rápidamente aquí que allá. Pero parece, que, por otra parte, tiene allí muchas amistades y muy atractivos ofrecimientos. No sé si se habrá decidido ya. La vacilación era manifiesta cuando nos vimos y él, riendo, me decía que cada mañana las hijas le preguntaban si el día iba a ser en favor de esto o de lo otro.
Hace unos días que estuvimos en Toledo con los Fernández Suárez. La ciudad es realmente impresionante y produce una sensación de encontrarse uno 4 o 5 siglos atrás, pues practicamente lo nuevo es muy poco y lo antíguo domina por completo. Es asombroso que a un paso de Madrid se encuentra esta ciudad en que lo oriental, judío o árabe, domina evidentemente aun en las construcciones levantadas por los cristianos. El turismo empieza ya a hacer de las suyas y se ven ya tiendas, tinglados y aptitudes con vistas exclusivamente al turismo extranjero que desnaturalizan la autenticidad del ambiente. Se venden damasquinados fabricados en Eibar en numerosos tienduchos en los que, para que el turista pique, invitan a uno a presenciar una ficción de labor artesana de damasquinado que es puro engaño.
También estuvimos, recientemente, en el Escorial, por la noche, para presenciar un recital de danzas de Antonio. No me gustó, sinceramente, la primera parte, fantasía de baile flamenco bastante mistificada y con detalles incluso de mal gusto; tampoco me gustó, naturalmente, la tercera parte, otra fantasía mistificada de folclores gallego con una santa compañera grotesca sobre música intrascendente de Ernesto Halffter. Pero en cambio si me gustó bastante la 2ª parte, estampas de ballet de ambiente del 18 sobre sonatas del P. Soler. Fue algo gracioso, fino y elegante. Este recital se hace al aire libre en el patio de los reyes del monasterio, marco esplendido, en una hermosa noche de luna. Nunca había visto de noche el monasterio. Muy bien iluminado, daba una impresión formidable. Resulta verdaderamente increible ver aquella serie de construcciones gigantescas en medio de la soledad de la noche.
Me estan ya llegando los mailings desde Suiza, pero, en cambio no he recibido todavía ningún número del "Marcha". Es posible que no esté en retraso, pues Vd. me había dicho que empezarían a remitirla desde el 10 de junio. Sin embargo, he leido algún número que me dejó Alvaro y por ello he visto que, al fin, reventó el grano de la devaluación y que el país se encuentra en una situación bastante apurada.
Por carta de Bowie supe de la muerte del pobre Apolant, tan inesperada. Bowie me había escrito para anunciarme la visita del Dr. Varela Feijóo, quien vino a Madrid con motivo de una operación que le hicieron a la madre. Varela le había dicho que trataría de verme para que yo le entregara un cuadro que compré por encargo de aquél. Pero no vino a verme.
En el giro de las impresiones que voy recogiendo en este Madrid me viene ahora a las mientes la verbena de S. Antonio de la florida. Tenía un vago recuerdo de lo que había sido antaño, refrescado recientemente con la magnífica estampa de Goya. Tremenda desilusión. Las 2 ermitas, la nueva y la vieja, parecen abrumadas y cohibidas entre tanta masa urbana. La suciedad y el polvo eran indescriptibles, los tenderetes, las atracciones de feria y de verbena miserables y pobretones como en el peor poblado de la Mancha. De Majas y Manolas, total ausencia. Algún raro organillo desvencijado y catarroso se esforzaba por mantener el viejo color local. Un Manzanares lleno de suciedad con algunos merenderos tristes completaba el degenerado cuadro actual. Evidentemente, el Madrid del siglo pasado, la gente de aquel Madrid, era más feliz porque tenía lugares adonde ir para espacirse y divertirse al aire. Hoy es una ciudad sin alrededores ni salidas, una enorme población que no tiene a donde ir a respirar en los fines de semana como no disponga de un coche para alejarse a un mínimo de 100 km. Fuera de las visitas al Escorial y a Toledo solo hicimos otra a Aranjuez, también con los Fernández Suárez. Aquella vega es ciertamente hermosa y los palacios de subido interés, pero hay demasiado público en los fines de semana y también demasiado calor en esta época.
Creo que esta carta se va haciendo ya demasiado larga pero la verdad es que si tuviera que contarle todo lo que se me ocurre no acabaríamos nunca. Por esta razón voy a ponerle punto final. Todos nosotros le enviamos muchos abrazos y esperamos que siga bien y que los problemas de los vecinos de en frente no le compliquen demasiado la vida. Deles muchos recuerdos de nuestra parte, asi como a todos los otros amigos del barrio.
[sen asinar]

1963-07-15 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Seoane. 1963
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1963 en 15/07/1963


Buenos Aires, 15 de julio de 1963

Querido Seoane:

Estoy realmente alarmado. De tres cartas que le escribí a Vd. sólo ha recibido la segunda. La última, del 8 de junio pasado, como medida de seguridad, se la despaché certificada al nombre de su cuñado en Madrid. Salvo que Vd. haya recibido ésta con retraso –después que me despachó la suya del 19 de junio, en la que me habla de su viaje y admiración por El Escorial–. Comparto su entusiasmo y admiración por esta monumental e incomparable fábrica arquitectónica. Desde 1920, en que visité por primera vez el Escorial, admiro a Herrera y en las dos veces que volví a visitar España, nunca dejé de hacerlo al Escorial –éstas con Aída– y mi admiración no ha hecho más que acrecentarse. Su estilo –modelo de sobriedad y de limpieza– corresponde a mi juicio al estilo de vida de la época de Felipe II, ascético, pero en modo alguno pobre (que son dos cosas distintas). Allí, en el Escorial, además de El Carro de heno de ese gran surrealista que fue El Bosco, he vuelto a ver siempre con deleite el San Mauricio, del Greco, y creo que un Expolio1 maravilloso de Goya –con un Cristo estupendo en el centro, envuelto en una túnica de amarillo de seda (allí lo he visto?), un Velázquez y creo que un par de Tizianos –entre muchas otras de valor–.
Ya aquí, en nuestro Buenos Aires, estuvimos unos días con Esther y Lipa, quienes nos transmitieron sus afectuosos saludos. Muchas gracias por recordarnos y pensar en los pobres que no podemos viajar.
De haberse realmente perdido mis dos aludidas cartas, me daría una verdadera pena, pues la historia habrá perdido irremisiblemente el testimonio de dos nuevos augurios políticos míos total o casi totalmente equivocados –como casi todos los míos–. En efecto, a pesar de mi temor de que se llegara a votar el 7 de julio (con proscripciones y ostracismos) el país votó –y creo que con una sensatez que no habría sospechado–. Por mi parte, colaboré en ese acto de sensatez votando para Presidente y Vice la fórmula de Ilía-Perette, de la UCRP (que era una manera de votar contra Aramburu y el continuismo). En el caso de Ilía, hay por lo menos: 1º, que es un hombre honrado y de una vida limpia; 2º, que prometió anular –y por decreto, como corresponde– los contratos petroleros, en cuyo nombre se ha saqueado al país (aunque Sofovich siga creyendo lo contrario); 3º, prometió comerciar con todos los países que quieran comprarnos y vendernos; y 4º, promete anular las proscripciones y los decretos en que se procesa las ideas y en los que, so capa de anticomunismo, se coloca en el index a todas las fuerzas liberales y progresistas del país. Esperemos que esta vez los militares permitan que esas promesas se cumplan. Por de pronto, hay muchos de éstos que están deseando que alguien tenga los c... suficientes para hacerlo. Además que hay una experiencia que no puede repetirse...
Permítame que por razones de prudencia y para no equivocarme una vez más, interrumpa aquí mis pronósticos y esperanzas. El nuevo gobierno tendrá que luchar a brazo partido con los sectores más reaccionarios del Ejército (que son los más) y con el Pentágono, que no se van a cruzar seguramente de brazos y movilizará al ejército de mulatos que lo sirven. Y no sigo. Cuanto menos escriba, menos me equivocaré.
Por de pronto, hay una verdadera euforia en el país y yo participo de ella –aunque, le confieso, me alarma una sola cosa: el coro de aplausos conque ha sido recibida esta victoria de la UCRP. Además, son muchos –y yo entre ellos– los que se alegran que hayan sido desoídas las órdenes de nuestros dos santones: Perón y Frondizi, aunque de paso hayan sufrido un descalabro los de la CGT.
Y ahora a otra cosa: en mi última, le escribí de una sección argentina de pintura, escultura y grabados que un grupo de amigos piensa protagonizar dentro del Museo de Bellas Artes de La Habana. La primera lista de obras la integrarían: Usted, Alonso, Anadón, Audivert, Badi, Berni, Castagnino, Diomede, Giambiagi, Lea Lublín, Policastro, Soldi, Spilimbergo y Urruchúa, y de los escultores, Falcini, María Carmen y talvez Sibelino. A Badi le escribió Falcini y a Berni y Spilimbergo, Falcini y Castagnino. A mí me encargaron que yo obtuviera su asentimiento. Luego que las obras de éstos hayan llegado a su destino, el grupo organizador ampliará la nómina –aunque cuidando siempre que se trate de artistas con títulos para figurar en un Museo. Piénselo con calma, y mándeme su consentimiento a la brevedad posible.
Lo felicito por el mural que le han encomendado y la preparación de sus Exposiciones de grabados y pintura. Estoy seguro que tendrá éxito –y tenga presente que en esto acierto bastante más a menudo que en política. Mándenos noticias, para seguirlo en su carrera de éxitos.
Por sus últimas cartas llegadas a amigos, y más por lo que nos dijeron Esther y Lipa, veo que están Vds. contentos de encontrarse en España. Me alegro, aunque no se encariñen tanto como para quedarse allí definitivamente. La Argentina –a pesar de todo– sigue siendo un país donde es agradable vivir y si mis augurios y los nuevos gobernantes no nos fallan, se volverá a vivir sino como en la belle époque, por lo menos bastante mejor que ahora. Lo de la belle époque corresponde a una asociación de ideas que no deja de ser lógica –pues cada vez que pienso en Balbín (jefe virtual de la UCRP) no puedo dejar de hacerlo simultáneamente en los buenos tiempos del tango con corte y el conventillo de las 14 provincias –mejor desde luego que “villas miseria” de hoy.
En cuanto a otras cosas, estoy pobre de noticias. Salgo poco para no hacerlo sin Aída, cuya sordera no mejora. A veces, ella se olvida y sobrepone, aunque otras sufre mucho con lo que le pasa.
Dentro de unos momentos, veré a Varela (Lorenzo) que me citó para EUDEBA. Le dije en mi última que la exposición de los dibujos de los 10 fue un éxito de público y la edición de los 10 cuentos (120 mil ejemplares) se está vendiendo como pan?
Mis Cartas europeas están casi listas. Todavía no vi como quedó la tapa que Vd. me dibujó (espero que resulte estupenda). Manuel López –que ya se repuso después de casi dos meses de enfermedad– retomó a su cargo el cuidado de la edición, en la que suprimí el pie de la editorial. Le manda muchos saludos.
Y termino. Un gran abrazo para Maruja y Vd. de todos nosotros y que sigan bien y con suerte. Saludos a los amigos que le salgan al paso. Chau,

Scheimberg

O autor refírese á obra de Goya: El Prendimiento de Cristo

1963-07-16 Mencionado/a
Carta de Frontini a Seoane. 1963
Madrid
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Frontini a Seoane. 1963 en 16/07/1963

DR. NORBERTO A. FRONTINI / ABOGADO / Buenos Aires, / LAVALLE 1312, 5º A / TELÉFONO 40-7512.

Julio 16 de 1963

Sr. Luis Seoane
Madrid

Querido Luis:

Estaba todavía, creo, en Brasil cuando llegó tu carta del 4 de mayo. El regreso me fue demorando la respuesta por las muchas preocupaciones profesionales que por mi ausencia se agolparon y más que eso, que es peripecia menor, por la podre que se nos mete dentro del ánimo, la podre de este pobre rico país, con centenares de miles de desocupados, y centenares de empresas comerciales y fabriles en estado de quiebra y el deterioro que ya tiene incidencia personal.
En Brasil vi a viejos amigos, conocí nueva gente y asistí a un espectáculo político insólito con motivo de la conferencia de solidaridad con Cuba. Es un país curioso, de tajantes contradicciones. Río, una ciudad de edificios monumentales, tiene 750 mil personas viviendo en favelas. San Pablo, un Estado cien por ciento capitalista y Pernambuco con ganas de darse una hechura socialista. La dialéctica tiene contemporaneidad y es sucesiva a la vez.
Y aquí, qué ocurre?
Aquí, hasta las amistades se deterioran. Es difícil saber a veces cuáles son los ingredientes que las sustentan. País sin solera, sin tradiciones, mezclado de abajo arriba y viceversa con nostalgias de todo tipo y esperanzas interferidas por una incertidumbre nada metafísica sino real y persistente, con ganas de introducir grandes cambios y sin voluntad para realizarlos, lo poco que se hace parece un milagro si no fuera que nos consta que es obra de un puñado de hombres. Siempre es un puñado el que hace punta. Los demás esperan. Pero, en este país casi todo está corrompido. Y los militares son los seres más anacrónicos del mundo. Doy por supuesto que son otras muchas cosas. Pero son gentes que se han quedado en mitad de camino. Habrá cosa más anacrónica que el indumento con que se visten? Cosa más dura, más rígida, más encolada que las charreteras, los ribetes dorados, blancos, azules, especie de arabescos de sastrería confiteril, que los hace más anacrónicos que los sus curas con sotana? Y así por la mollera, con ideas de nada o nada de ideas, reviejos y rellenos de aserrín de la peor madera. Así nos va!
Vi El ángel exterminador, de Buñuel. La encerrona que Buñuel muestra como símbolo de la burguesía, es formidable. No puede salir. Cuando sale es para volver hacia atrás, desandando el tiempo, y yendo a la iglesia, que también es encerrona; y cuando quiere salir a la calle, la calle es otra encerrona con gentes que disparan delante de los tiros de los policías que son los que sostienen, en definitiva, la gran encerrona. Y todo ello es una apariencia barroca muy de España, muy de país en que sobreviven los varios estilos de varias épocas, superpuestos y mezclados. Pues en eso estamos y con ganas de salir de nuestra encerrona. Y con complejo de huida, que es cosa peor. Y ya la padecemos. Más de 2.000 técnicos o que lo pretenden salen mensualmente del país. En qué vendremos a parar?
Yo creo que iré a pasar un par de semanas a Chile. Me iré. Hay que cambiar de aire mientras se pueda. No es remedio que cure, pero es cataplasma o calmante de unas horas. No van las gentes a pasar el fin de semana a otra parte que la de sus afanes? Pues a mí me han entrado ganas de un año sabático. Y para eso me estoy preparando con la voluntad. Ya que creo que, si no me rompo una pierna o no me sigue subiendo la presión arterial (me está subiendo y es por esta puñetera vida) en enero hago mi viaje. Entonces nos veremos.
Tuvimos elecciones. Veinte y cuatro horas antes de la elección se detuvieron las artimañas del gobierno militar. Quienes decidieron votar en blanco fueron desoídos. Se pensaba que votarían en blanco más de 3 millones. Votaron menos de un millón y medio. Fracasó Perón. Fracasaron los jerarcas de la CGT. Fracasó el PC. Bueno! Y como Alende se largó solo, fracasó [Arturo] Frondizi y el Frente Nacional con [Rogelio] Frigerio, etc. Ganó la UCR del Pueblo. Las gentes decidieron el destino temporario del país en 24 horas. La desobediencia ha sido beneficiosa. No me hago ilusiones, pero soy optimista. Mi optimismo es más subjetivo que objetivo. Sigo temiendo a los factores del poder. Con todo, ciertas cosas habrían cambiado. [Arturo] Illía es parco pero contundente. Pienso que no tiene conciencia cabal de lo que le espera. Se dice que las fuerzas armadas están conformes con Illía. Los ucristas Alende (1.6 millones de votos) votarán por Illía. Los democristianos (más o menos 30 electores) también. Otros partidos menores. Udelpa tuvo un millón trescientos mil votos. Udelpistas y demócratas progresistas. La Cámara de Diputados tendrá diputados del pueblo, de la UCRI, cristianos, conservadores, socialistas de los dos partidos, udelpistas, demoprogresistas. Si no salimos adelante, padeceremos, días más días menos, una tragedia. La promesa del radicalismo del pueblo es tajante: nulidad de los contratos petroleros por decreto, desvinculación del Fondo Monetario Internacional, revisión del puerco asunto de SEGBA. Fácil de decir, menudo engorro real. Pero el pueblo está de acuerdo con eso. Casi la totalidad de los partidos. Creo que podríamos salir con bien. Pero habrá que tomar medidas de tipo constructivo. Illía-Perette declararon que tendrían relaciones comerciales con los países socialistas. Mencionan el caso del Brasil. Todo es, pues, posible y algún beneficio saldrá de tales planes. También prometen la derogación de las leyes y decretos limitativos de la libertad. Cuando Illía decía hace unos días eso mismo, el P. E. daba un decreto reglamentando la persecución, al detalle, de los comunistas. Una cosa tan estúpida como sádica nunca vista. Cosas como ésta confunden y desasosiegan.
Te refieres a Gris y a Zurbarán y dices que el blanco y el negro son los colores definitivos de estos dos pintores. Yo recuerdo la serie de apóstoles de Zurbarán vista en un convento o sala capitular de España y solo recuerdo los amarillos castellanos. Los grises exaltados y de color pizarra de Gris también recuerdan los páramos acerados de Castilla y ciertos lugares de la geografía de España, de León a Lugo. Los recuerdos del Paul Klee, a que te refieres, corresponden a marzo de 1933, cuando volvía de Italia, Francia y Alemania. Fue en este último país donde los había visto. Ya estaba Hitler, ya la gente empezaba a huir. Recuerdo una noche del Romanischer Café, con las caras silenciosas y llenas de espanto de los amigos con quienes conversaba. Fue entonces que conocí a Rafael [Alberti] y a María Teresa [León], en la cripta de una cervecería, después de haber oído una conferencia de Margarita Ken1 (Puede ser?) o de María de Maeztu (Puede ser?). Rafael y María Teresa regresaban de Moscú. Eso era todavía posible. Yo regresé a Génova a encontrarme con Mony [Hermelo] y Polilla [Frontini hijo]. De ahí pasamos a París. También en esta ciudad el caso Hitler producía estremecimientos profundos. Recuerdo una conversación en casa de Geneviese y Simone. Una conversación llena de dramatismo que anunciaba la próxima guerra. Lo que nadie entonces olfateaba era la guerra de España. Cuando volví a España a principios de 1935, estando en Barcelona, la gente sentía ya en la boca el gusto amargo de los acontecimientos y preanunciaba algo grave. En París conocí, sin tratarlo, a [José] Calvo Sotelo.
Tenía una hija como de 13 o 14 años, hermosísima. Polilla la trató. Entonces tenía 5 años. Yo la miraba como catador de belleza. Tendría ahora más de 40 años. Los 30 años más han pasado desde entonces, llenos de dolor y de inestabilidad, y de ni saber que pasa el día siguiente. Así se nos ha ido el tiempo. Cuando días pasados leía el primer número de la nueva época de la Revista de Occidente (el mismo formato, el mismo tipo de letra, la misma composición y el mismo tipo de razonamientos) creí que el tiempo se había detenido. Por un rato me sentí feliz. Creí que todo lo pasado había sido mera fantasía onírica, una detención insomne. El artículo de Antonio Espina sobre Ramón, me transportó a los 20, 30 años; me sentí joven, casi recién nacido para recibir el fruto de la inteligencia creadora de un tiempo arremansado, quietecito y sin otras inseguridades que las de la natural duda del pensamiento mientras se construye y se expresa. No. Las cosas han sido terribles y nuestro tiempo una especie de detención maligna. Porque, aunque hayamos comprendido muchas cosas, las nuevas de la ciencia y la técnica que tantos cambios o modificaciones ha introducido, es tanta la urgencia del cambio mismo, tanta la inestabilidad que él introduce, tanta la preocupación por el pan cotidiano, tan escaso el remanso conversacional, tan limitada la esperanza concreta aunque sea ancha la esperanza en abstracto (el futuro espléndido del hombre, etc. etc.) y tantos los terroríficos instrumentos que han sido creados para una destrucción total del género humano, que todo tiene dimensión cotidiana, de ayer para hoy y de hoy para mañana. Además: ¡qué difícil es hoy entenderse con la gente! Porque: quién sabe ya escuchar? Los jóvenes se los lleva el diablo. Y a los viejos, el dogma o la esclerosis. Uno se va acostumbrando al monodiálogo o al diálogo con uno, o dos o tres amigos. Y si quieres hacer tu monólogo pensando en la multitud que estaría dispuesta a escucharte, se te ponen trabas en medio, y aún en esto, nunca falta un buey corneta.
Aquellas cosas que te habría dicho sobre Klee, Hofer, Sintenis y la pintura alemana de entonces, las repetiría. Tengo las imágenes como si hubiesen nacido ayer. Me dices que entonces me gustaba la pintura y que me fui apartando de ella. Me parece que no es exacto lo que dices. No me he apartado nunca. Lo que ocurre es que con los años que se me han juntado, andando y quedándome, y con la incertidumbre que la época introduce por sus cambios, cambios positivos, que son presente y futuro y cambios que no son ya presente y sí involuntario o voluntario anacronismo por no enfrentar el drama que transcurre en las horas que pasan, con todo eso, me deja frío cuando no me desconcierta el ánimo, lo que no es obra concluida sino reflejo analítico de la crisis del espíritu por incomprensión de lo que está a nuestro alrededor inmediato y mediato. Sólo la incomprensión es paralizante y todas las formas del arte que la denuncian son expresiones de un aristocratismo intrascendente, incomunicable o esteticista. El hombre debe darse entero, trasmutarse. Y no todos los hombres lo son cabalmente. Me gusta la pintura y la escultura. Pero me siento profundamente latino y quiero que la obra de arte, como una forma transmisora del espíritu del hombre, sea inteligible.
El arte que no trasmite algo, con implícita inteligibilidad, algo que, valiendo en el creador valga también para quien se lo destina, valga como sentido cabal y entero en relación con la enteridad del hombre, tal como es con todas sus dimensiones, me parece cosa de minoría en que se implica un tipo de elite elusiva de la humana responsabilidad. Lo del realismo socialista no nos fue explicado bien hasta hace poco. Pero yo había descubierto en mi viaje a la URSS que se trataba de una cosa que concierne a la ética del ser humano, frente a un cambio de sistema social, y no una estética. La estética se da por implicancia. (Te recomiendo que leas sin demora un pequeño librito del escritor y hombre de ciencia inglés [C.P.] SNOW que se titula Las dos Culturas y la construcción científica. Es un librito de no más de 75 páginas que no tiene desperdicio2. Allí hay algunas consideraciones que en mi opinión debe tener presente cualquier artista y escritor). Pero volviendo a eso del realismo socialista: diría lo que dijo Aragon una vez: existe el hombre socialista? O como dijo Huizinga: existió el hombre del Renacimiento tal como lo caracteriza Burkhardt? Todo es tránsito, cosa que viene con nuestro nacimiento, impregnándonos la psicología del alma, y cosa que va con ella hacia el futuro, siendo empero nuestro propio presente, más que como cosa inmediatamente comunicable, como refracción espiritual de algo que está en nuestro contorno con ímpetu de cambio y con implícita futuridad distinta. Naturalmente, el socialismo está dando que hacer y está a la vista. Y la ciencia y la técnica, también, y esto parece que pertenece al ser humano, no importando la etiqueta política o económica que tenga.
Cuando recuerdo el Museo del Prado, lo que más me asalta y me exalta es el Goya de los fusilamientos de la Moncloa. Cómo ha sido posible ese milagro “político” con el color? Y los estupendos cuadros de la Academia de San Fernando. (Ese si sabía y de qué modo!).
Expuso [Carlos] Castagnino. Yo había visto óleos suyos al año pasado en su casa. Me parecieron cuadros estupendos. Estaba allí el óleo magnetizando el cuadro y los colores finamente trabajados, como el poeta que, por las palabras, busca el más recóndito matiz musical. Esperaba ver eso. Pero sus cuadros, con temas de paisaje o figuras, con ímpetus expresionistas estaban velados por cierta opacidad que les da carácter descriptivo, lo que, a mi parecer es propio del claroscuro, que me impidió una comprensión cabal. La libertad que muestra en sus aguatintas estaba latente en esos óleos desiluminados. Pero el vuelo, la trascendencia, no diré misteriosa sino clarísima, poéticamente clarísima, que a mi juicio debe tener el color–aceite (los Goya, caray!) no estaba presente. Claro es que el espectador es un ser comprometido consigo mismo y en cierto modo un ser anacrónico. Pero hay quienes pueden liberarse de sus inercias porque son seres con sensibilidad poética y esperanzados en el hombre.
No, sí me gusta todavía la pintura. Y en eso soy un puñetero romántico. Me den en arte lo que ven mis ojos, pero mucho mejor que ellos lo ven y de modos diferentes, pero sin escamoteos y sin dolos. Como lo que es propio del mundo del hombre que hace historia para los demás, para que los demás la vayan viviendo y sosteniendo. Una historia en la que los hombres se puedan intercomunicar los unos con los otros y no una historia para una minoría espiritualmente parásita.
Estoy escribiendo sin saber dónde estás. Quería contestar tu carta y en realidad me he puesto a platicar contigo como solemos hacer cuando nos encontramos en tu casa, ese remanso de claridad y de amor en que Maruja es huésped principalísimo y tú un duende capaz de genialidades.
Gracias por tu carta. Un gran abrazo para los dos.

Norberto

[Manuscrito:] Acabo de saber por Sara donde están. Ah, Galicia! Deja unas flores junto a las tumbas de Eiroa y Maside, y recuérdame cuando te eches a andar por las rúas de Santiago. Me leyó tu carta. El “escarbadientes” de los pícaros del Siglo de Oro, hoy tiene 6 cilindros! Muy bien! Aquí ocurre lo mismo. Pero nuestros burgueses son más ladrones que en Europa. Abrazos a todos.
Estuve días pasados con [Antonio] Baltar. Siempre encantador. Ves a los Dieste? Abrazos. No dejes de ver a Antonio Espina y Pepe Bergamín. Y los abrazas en mi nombre. Salud! Saludos!

1 Parece una confusión entre Margarita Nelken y Victoria Kent, aunque debe tratarse de Margarita Nelken

2 El titulo exacto del libro de C.P. Snow es Las dos culturas y la revolución científica, edición original de 1959.

1963-10-26 Mencionado/a
Carta de Seoane a Sofovich. 1963
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1963 en 26/10/1963


Madrid, 26 de octubre de 1963

Sr. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hemos recibido la carta de ustedes con la noticia del nacimiento del niño Pablo David, que acabamos de conocer por una carta de Varela y que fue una agradable sorpresa por la que les felicitamos muy sinceramente a Elsa y usted. Este acontecimiento venía a explicar para nosotros cuando llegó la carta de Varela, el silencio de ustedes, y al llegar la que ahora nos envían del día 15, teníamos una escrita felicitándoles que ahora sustituyo por ésta. En la última carta que les hemos escrito acusaba recibo de las pesetas en La Coruña, llevaba fecha del 22 de agosto y era la tercera enviada desde España de las que no teníamos respuesta. Así se lo hice saber a Varela hace pocos días, pues me escribió bastante alarmado de que yo no les escribiese. Creo que el nacimiento del niño les debió tener muy atareados, que deben de estar ustedes, como es natural, absorbidos por él y muy ilusionados.
Estamos siempre hambrientos de noticias. Trabajé mucho todo esta temporada, hice con mucho éxito la exposición de grabados en La Coruña, de la que usted tiene noticia, y ahora pronto, dentro de un mes, el 25 de noviembre, haré una gran exposición en Madrid de unas ochenta obras entre óleos y grabados. Todo este trabajo me retrajo de ver museos, monumentos, etc., lo que haré, volviendo a ver sistemáticamente lo que pueda de Madrid, a partir de la inauguración de la exposición. Calles y paisajes fue lo que más vi y lo que más hice fue hablar con las gentes que me fui encontrando en Madrid y Galicia. Hasta ahora sólo volví a ver muy de prisa Velázquez y Goya en El Prado. Volveré a verles con calma y extenderá las visitas a otros pintores y museos. Esta ciudad, me refiero a Madrid, (La Coruña tiene una belleza unida al paisaje, a las nieblas y al mito, nació bella) aparte de lo que sabemos continúa siendo una ciudad encantadora por su luz, tanto como por su pueblo, monumentos, calles, aunque nosotros preferimos la olvidada Galicia, cambiante de luz y visiones, matizada de colores, gris y verde sobre todos. Pinté muchos cuadros. Creo que influyendo en ellos este reencuentro con Galicia, con su paisaje y humanidad. Técnicamente, continúo el camino iniciado en Buenos Aires, un poco sorprendente, creo yo, para Madrid; no puedo saber como reaccionará la crítica y público, pues lo que hago, o intento hacer, es una pintura ascética y esquemática que no se aviene demasiado con el barroquismo y derroche de materia que parece norma de la más última pintura española, la que tuvo éxito en el exterior, coincidente, en este momento, con la de todas partes, pero con un carácter muy peculiar e imprimiéndole en general un fuerte sentido social a su manera, a la manera de cada pintor. Desde luego el promedio de pintura que se ve en galerías es, en cuanto a oficio, superior al de muchas partes. En general, se nota que los pintores, como los grabadores y escultores, se han aprendido muy bien su academia y algo de ese largo aprendizaje queda en sus obras a pesar de la iracundez de sus propósitos y de los resultados. Naturalmente, también existen quienes por snobismo o por lo que sea se improvisan pintores. A las jóvenes de buena sociedad y ricas parece haberles entrado el gusto de pintar como un modo de satisfacer su ocio, y como algo divertido que puede resultar de combinar materiales diversos, resultando que lo que fue drama creador en un artista se convierte, en manos de estas jóvenes, no en todas, en entretenimiento snob. Pero esto ocurre en todas partes. Existen gentes que parecen tener la suerte de tener tiempo de aburrirse, un tiempo que además no les cuesta dinero. Estos días se expone aquí un espléndido retrato pintado por Goya de José Bonaparte, el José I, el Pepe Botella del pueblo español, que tiene tres metros de alto por dos de ancho. El retrato parece haberse encontrado con motivo de la Guerra Civil, pero, hasta ahora, estuvo guardado y en reparación. Es la prueba definitiva, se cree, de la simpatía de Goya hacia los ideales de los invasores. Goya, Bethoven, esos dos sordos geniales pensaban, en cuanto al mundo de entonces, Europa, de igual manera.
Refiriéndome a otras cuestiones, con el dinero que usted, Sofovich, tiene procedente de los intereses que debe pagar Bernárdez, le ruego pague la cuota del Fondo de las Artes que vence creo que el 20 de diciembre. Le escribiré a usted con tiempo. No sabe cuanto le agradezco todas estas molestias que usted se toma por nosotros.
Esto es todo por hoy. Escríbanos. Aprovechen algún momento del feliz sueño de Pablo David para hacerlo. Un gran abrazo de Maruja y mío para los amigos comunes y para los dos:

[Seoane]

1963-11-14 Mencionado/a
Carta de Seoane a Varela. 1963
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 14/11/1963


Madrid, 14 de noviembre de 1963

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estoy trabajando mucho, te lo digo en todas las cartas, pero es la realidad y esto me impide estar al corriente de bastantes actos culturales que ocurren en Madrid que no alcanzan la suficiente divulgación en su prensa por razones que no son de este momento analizar. Inauguro el 26, o el 25, aún no sé ciertamente la fecha, y estoy esperanzado, pero con un poco, es natural, de temor. Quienes vieron mis obras, muy pocos hasta ahora, me auguran un éxito. Veremos qué ocurre. Tengo muy pocas noticias de Buenos Aires. ¿Que fue de Larralde y Brughetti y quien es el nuevo director del Museo? ¿Qué pasó en San Pablo? ¿Y la exposición de París? ¿Qué ocurrió con el libro de cuentistas y pintores argentinos de la Editorial Universitaria? ¿Se hizo la exposición de los dibujos? Me gustaría que en un momento libre me contestases estas preguntas. Ahora ahí va alguna noticia:
Se acaba de inaugurar en Madrid, patrocinada por la Dirección General de Bellas Artes, una espléndida exposición de aguafuertes del pintor español Gutiérrez Solana. En el acto de inauguración se hizo donación de las planchas originales al Estado español luego de haberse realizado con ellas una edición numerada en la que se rinde homenaje al pintor. Esta edición consta de 277 ejemplares distribuidos de la siguiente forma: 7 ejemplares numerados con cifras romanas que contienen una serie de grabados estampados sobre papel con características muy especiales; 27 marcados de la A a la Z, contienen una serie de los grabados estampados sobre papel nacarado; 230 están numerados, con una serie de grabados estampado sobre papel de hilo y 13 ejemplares más, numerados, destinados 10 a los colaboradores, dos a la Biblioteca Nacional y uno a la Biblioteca de la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. La introducción a la edición es de Ramón Gómez de la Serna. Su precio oscila entre 160.000 pesetas los primeros ejemplares y 60.000 los impresos sobre papel de hilo. Es decir, 400.000 y 150.000 pesos argentinos aproximadamente. Debemos advertir que el álbum de litografías de Miró, de menos tiraje (75 ejemplares) se vende en su exposición actual de Barcelona, de la que dimos cuenta, a 210.000 pesetas. Los propietarios de las planchas eran los herederos del coleccionista madrileño Juan Valero, amigo y protector de Solana en los últimos años de su vida, que las habían adquirido antes del fallecimiento del pintor, precisamente para hacer la edición que ahora se exhibe de sus grabados. El maestro que enseñó a Solana el procedimiento fue el grabador gallego Castro Gil, fallecido también hace pocos meses, pero Solana no se atrevía a hacer pruebas de sus grabados porque, según decía: “eso del grabado tiene algo de milagro”. En Madrid se considera que esta exposición constituye uno de los mejores acontecimientos artísticos de los últimos años. En una entrevista del diario Pueblo el conocido crítico de arte español, autor de una biografía de Solana, Manuel Sánchez Camargo, afirma: “Para mí los aguafuertes de Solana son el eslabón que une el grabado español con Goya. El hiriente trazo, de una fuerza expresiva y de una calidad sorprendente no tiene par igual en género artístico similar. Cada aguafuerte es una vena carpetovetónica, que es decir dos veces española, llena, como toda la obra de Solana, de una extraordinaria melancolía”. Por nuestra cuenta, creemos que el Museo Nacional de Bellas Artes debieran adquirir, con destino a dicho Museo, uno de los ejemplares de esta extraordinaria edición. Solana se presenta para el porvenir como uno de los pintores más característicos y solitarios de los primeros cincuenta años de este siglo europeo y más unido al pensamiento anárquico y existencial que contribuye a caracterizarlo. Igualmente en su obra de pintor y grabador que en la de escritor, muy poco estudiada hasta la fecha, o sólo en su aspecto pintoresco.
El prestigioso crítico literario alemán Janheinz Jahn publicó hace poco un espléndido trabajo titulado Negritud y surrealismo. En él afirma que “desde que una cultura distinta, la africana, se extiende con sus rasgos comunes a lo largo de varias lenguas europeas, es necesario renunciar a la pura división lingüística, pues la lengua sola ya no permite reconocer a qué literatura pertenece un autor”.
El último número de Arts publica un artículo de d´Ormesson titulado Zen entre los snobs y afirma en un párrafo: “Lo zen entró en Francia con las danzas histéricas y en malas y breves obras de vulgarización”, refiriéndose a la curiosidad actual de Francia por los monjes pintores zen.
El productor cinematográfico español Cesáreo González es un hombre millonario y pintoresco. Afirmó, según dicen, que en época de escasez de productos en España él se hacía traer lo necesario por vajilla diplomática.

Y nada más por hoy. Un abrazo a todos especialmente para Marika de los dos y para ti de:

[Seoane]

1963-11-20 Mencionado/a
Carta de Seoane a Falcini. 1963
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1963 en 20/11/1963

Madrid, 20 de noviembre de 1963

Sr. Luis Falcini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hace unos días recibí su carta y no me puse a contestarla inmediatamente por todos los preparativos de la exposición, que se inaugurará el día 26 de este mes. Presenté 91 obras, 35 óleos y el resto grabados. En este momento tambien debe estar celebrándose otra mía de grabados en la Galería Engelberts, de Ginebra, pero no lo sé concretamente y espero carta de esa galería. En Madrid está lloviendo constantemente. Tambien aquí se habla del cambio de clima, pues a los madrileños parece les gusta más el año dividido en dos partes, de frío y calor, aunque sea de temperaturas exageradas. Pienso, sin embargo, que a los campesinos de Castilla, de los mismos alrededores de Madrid, les debe gustar esta lluvia. Castelao publicó una vez un dibujo que tenía el siguiente pié en gallego, que traduzco aproximadamente: “A los señoritos no les gusta la lluvia, pero les gustan las patatas”.
La novedad artística más importante de estos días es la muestra de grabados de Solana. Son 25 grabados aguafuertes que se reunieron en un álbum del que se hicieron unos 270 ejemplares en papeles distintos y cuyo costo va desde 160.000 pesetas por los primeros números, a 60.000 los más baratos, cifras equivalentes a 400.000 y 150.000 pesos argentinos. A Varela le he escrito que quizás el Museo de Bellas Artes de esa o el Fondo Nacional de las Artes debiera comprar alguno de los últimos para hacer más completa la muestra del pintor en el Museo de Buenos Aires. Algunos museos del norte europeo ya compraron ejemplares. El de litografías de Miró que actualmente se expone en Barcelona cuesta 210.000 pesetas y son 75 ejemplares. Es curioso como en todas partes se renueva el grabado y como cada vez más los artistas se dedican a él. Es como si conscientemente o no tratasen de encontrar una salida divulgadora y popular de su arte. Los de Solana son desde luego parientes en su desgarro de los de Goya, pero pertenecen a un mundo de él y tienen la calidad de sus óleos, aún siendo a veces deducidos de temas ya pintados o antecedentes de algunos de sus cuadros. Les falta el humor goyesco o en todo caso son de un humor distinto.
Solana recoge un trozo horrendo de miseria y lo pone a la vista de espectador y siempre parece decir: ahí queda eso, sin más comentarios. Goya les imprime como una intención metafísica, y el mundo sobrenatural mezclado con la intención social y política de su momento está presente en ellos.
Lo malo de Madrid es que para ver exposiciones quedan muy distantes unas galerías de otras, y, algunas, son de un snobismo en el lujo de su presentación que pienso que a mucha gente del pueblo les produce reparos entrar. Además sus encargados tan pronto uno pisa el umbral de ellas parecen hacer con la vista la radiografía del bolsillo del visitante. Es posible que esta especie de vendedores-rayos X sean útiles al pintor, pero si uno fuese comprador creo que los trataría como enemigos. Quizás estén permanentemente esperando al yanki que merezca el atraco. Nosotros volveremos seguramente en febrero. Es posible que antes ocurran sucesos notables que deseamos contemplar. Recuerden los últimos días de Evita presentándose en público obligada por las circunstancias del momento.
Las noticias de Buenos Aires parecen ser buenas según la información de los corresponsales de los diarios españoles y según las cartas de ustedes. Todo esto nos produce una gran alegría. Aquí conocí hace pocos días a un pintor, Usandivaras, de Salta, que desde hace años vive en España. No sé como es su pintura. Me dijo que estos días iba a exponer en La Coruña.

Bueno, esto es todo por hoy. Me acuerdo de todos los amigos y a todos les da usted un abrazo de Maruja y mío, así como a los suyos. Reciba usted otro fuerte de:

[Seoane]

1964-01-01 Mencionado/a
Carta de Seoane a Varela. 1964
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1964 en 01/01/1964



Madrid, 1 de enero de 1964

Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hace sólo pocas horas que estamos en 1964. Hemos llegado a este año antes que vosotros. Toda Europa dormía cuando ahí sonaron las sirenas del puerto y nosotros también dormíamos cuando seguramente brindabais porque fuese un año de fortuna para todos. Pero cuatro horas antes habíamos brindado nosotros por todos los amigos de ésa, por un 1964 venturoso y por la amistad. Seguramente, a esas horas os encontrabais en el café Moderno de Maipú o en el Jockey de Florida, o en cualquier otro. Eran las ocho de la tarde en Buenos Aires. Madrid en estos días es un bosque de pinos con luces de colores, poblado de Belenes. Los escaparates de sus comercios constituyen una insolencia de riqueza incluyendo al establo al que hace homenaje. Pero ahí van noticias:
Acaba de publicarse un libro titulado Les bleus de Picasso, en el que se recoge y reproduce la obra de la época azul del gran pintor. El prólogo es de Jaime Sabartés, actual director del Museo Picasso de Barcelona, instalado en uno de los palacios más antiguos de la ciudad mediterránea, que fue restaurado recientemente y habilitado para museo por el ayuntamiento a fin de reunir la obra de Picasso en España, y cuyo fondo lo constituye en su mayor parte la donación de Sabartés, amigo de casi toda su vida del pintor, secretario de éste durante muchos años y autor de varias monografías sobre él.
Alrededor de la exposición de Goya en Londres, Claude Roger Marx publica en Le Figaro Litteraire de la última semana del año 1963 un artículo que se titula Goya y Picasso, donde establece la relación y diferencias existentes entre los dos grandes pintores españoles y universales. También por estos días los diarios de España que dedican grandes páginas al éxito de la exposición de Goya en Londres, compuesta en su mayoría por óleos, grabados y dibujos enviados por el Museo del Prado y distintos museos europeos hasta totalizar 340 obras, anuncian el envío de tres obras de Picasso a la gran exposición que prepara el Gobierno de productos españoles en Nueva York. No se sabe bien qué fundamento puede tener esta noticia. Surgió de unas declaraciones vagas del organizador de la muestra. Lo que sí es noticia verdadera el el éxito que obtiene también en Londres la exposición de dibujos de Agustín Ibarrola, que sufre pena en la cárcel de Burgos justamente con diversos intelectuales más, y al que la crítica londinense denomina neo-Goya. Los dibujos están realizados en los papeles humildes y de cualquier índole de que se puede disponer en una cárcel.
Jean Chalon publica una entrevista en París a Victoria Ocampo donde dice de la ilustre escritora: “Pertenece a esa raza de privilegios que encuentran muy natural decir: Ravel me decía..., Borges me contaba..., Paseé mucho con Calery... Quise mucho a Drieu la Rochelle. Nos escribimos mucho. Únicamente la política nos dividía. El decía negro, yo decía blanco. Él se burlaba de lo que llamaba mi moral de institutriz inglesa”. Jean Chalón destaca con este párrafo, sin decirlo, el afán que tuvo Victoria Ocampo durante toda su vida de llegar a constituir una especie de Ghota de lo que ella considera aristocracia intelectual del mundo. En cuanto a la entrevista por sí misma, como tantas otras veces, destaca lo que hizo por la cultura franco-inglesa en la Argentina, como agente de ella, y no da a conocer en Europa el esfuerzo de los intelectuales argentinos, escritores y artistas, por revelar su propio mundo al universo. Y en una Europa de intelectuales muertos por años y sufren desterrados, etc., se refiere al mes que estuvo detenida en una cárcel de Buenos Aires. Algunas mujeres debieran quedarse para siempre en la edad de su belleza. En el caso de Vitoria Ocampo cuando Ramón Gómez de la Serna la citaba en Ismos, no tanto por su talento como por la hermosura de su espalda.
Daniel Rops, el escritor católico francés, descubre ahora que la autora de Una misa bajo el fuego de Viet-Minh, Relato vivido por Than Sou, es Madame Nhu, que lo acaba de revelar doce años más tarde. Este primer premio, creado para la mejor narración sobre la más bella misa, fue otorgado en 1951 y se hará efectivo en estos días. Consiste en 10.000 francos viejos. Than Sou era el seudónimo de Madame Nhu, la dama asiática que fue permanente noticia por sus audacias verbales y su desgracia en el último semestre de 1963.
Los dos más altos premios de poesía de España en el año pasado fueron otorgados a dos jóvenes obreros, un albañil y un repartidor de leche, ambos naturales del mismo pueblo, Tomelloso. El Premio Nacional para poesía fue dado a Eladio Cabañero, que fue albañil en sus comienzos y que sólo acudió en su vida cinco días a la escuela y por su libro María Sabia; el Premio Adonais, el más codiciado por los poetas jóvenes, a Félix Grande por su primer libro Las piedras, aún inédito, que trabajó de repartidor de leche.
En Madrid, está exponiendo la notable grabadora catalana Isabel Pons, que desde hace bastantes años reside en Brasil participando en muestras internacionales de este país. La exposición se realiza en la Sala Neblí y obtiene gran éxito de público y crítica por la calidad indudable de su obra.
Esto es todo por hoy. Seguramente para la próxima semana te enviaré algunas noticias originales sobre música, literatura, etc., españolas de Moreno Galván, Maiztegui, Marcial Suárez, etc.

Un gran abrazo para Marika y para ti de Maruja y mío y otro para todos los amigos que nos recuerdan:

[Seoane]

1964-08-13 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1964
Bos Aires
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1964 en 13/08/1964

Buenos Aires, 13 de agosto de 1964

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro

Querido Isaac:

Recibí tu carta con el catálogo de la exposición y las notas sobre Citania y el libro de González López. Te agradezco estos envíos y me alegro mucho de que te hubieses decido a exponer tus óleos. Estoy seguro que la exposición habrá tenido mucho éxito y te habrá animado para que vuelvas a pintar más regularmente. No tienes derecho a dejar de hacerlo cuando ya habías conseguido entablar ese diálogo que todo pintor sostiene con su pueblo a través de su arte. La pintura, dijo aproximadamente Picasso, en un momento decisivo de su vida, es un instrumento de lucha. Lo es para él y lo es para cada pintor o para cada artista en general cualquiera sea el arte que cultive. Con motivo de esa exposición tuya hice una nota sobre ti par a la audición de Galicia Emigrante que conocerás a tu regreso o te enviaré uno de estos días, que se pasará el domingo próximo, cuando ya esté clausurada tu muestra en la Audición de artista. Me gustaría haber estado ahí en esta oportunidad. A La Coruña y a la Galicia le hacen falta exposiciones como debió ser esta tuya, por los cuadros que conozco, en la que se vea a un artista tratando de expresar su verdad y la verdad común, la que no se dice en voz alta, en rebelión contra la conformidad. Cuando hacías tus formidables jarras de los vicios continuabas pintando, estabas en la lucha para éstas, a mi juicio, mejor dotado. Cuando dejas también esto y te entretienes un día, una semana, o el tiempo que sea, trabajando enormemente en la ejecución de una máquina, creo que escapas de ti mismo, que encuentras en ese trabajo una manera de drogarte. Perdóname que diga esto, está dicho como lo siento y con la mejor intención. Ser pintor, tú lo sabes tan bien como yo, o mejor, es en nuestra sociedad ser un desclasado, un hombre que se sitúa en lo más bajo de la escala social, alguien al que no puede comprenderse jamás del todo, una mezcla de mendigo, bufón y desquiciado, una persona que el técnico, el diputado provincial, el rentista, el que tiene una profesión universitaria ven con desconfianza y sin embargo es más riguroso que todos ellos, más exigente consigo mismo y más entregado a los demás, a todos los hombres. Pero no te escribo más sobre esto, porque es posible ese mejor tema de discusión cuando un día nos reunamos a comer juntos o a charlar. Ahora los técnicos están descubriendo paisajes y mundos que habían descubierto los artistas. Antes que una máquina, nos descubriese la luna, la habían descubierto los escritores, pintores, músicos, etc. No hacen más que comprobar las intuiciones y las verdades del arte. Cualquier día se nos aparece por la calle el monstruo manierista del siglo XVII, o el de Picasso y resulta que es un personaje de Marte que se vino a la Tierra y que desde hace tiempo lo conocíamos. Goya intuyó las calamidades españolas mejor que los nuevos sociólogos que quieran descubrírnosla y sus estadísticas en grabados y dibujos son tan exactas como las que encierran en planillas los burócratas actuales. El dolor de Galicia está mejor expresado por sus poetas y artista que por nadie dedicado a cualquier ciencia dedicada a aliviar el dolor, en economía, política, sociología, etc. No exagero. Es verdad. De Paz Andrade recibí una carta diciéndome que está en camino de arreglo el asunto de mis cuadros. Estoy contento de esto. Le hablé a Laxeiro de la posible venta al Círculo de las Artes de Lugo y tanto él como yo estamos dispuestos a que nos paguen en el siguiente ejercicio, que el dinero nos aguarde ahí. Tú dispón de este asunto de la manera que creas más conveniente, por mi parte y por la de Laxeiro que me pidió que te escribiese en ese sentido.
Bueno, esto es todo, perdóname la lata. Buenos Aires lo mismo. Mejor no escribir sobre esto. Me gustaría escribirte en cambio sobre el San Roque en Sada, sobre “la sardiñada” esa fiesta hospitalaria, generosa, de la que solo puede ser capaz un pueblo pobre, en su mayoría de gentes pobres, sobre la ría, el olor a sardina, el humo de esa orquesta que se ve como una porcelana desde la playa entre la maleza de la Corveiroa. Pero escribir sobre esto es casi tanto como ponernos a llorar Maruja y yo. Por vuestra amistad y sin ambición de nada hemos sido felices entre vosotros hace un año. Un abrazo a todos los que nos recuerdan y otro grande para Mimina, para los chicos y para ti de Maruja y míos. El domingo que viene es “la sardiñada” que seáis felices. Que Camilo, Rosendo y Xosé lancen su gran globo satírico a las nubes.


Seoane

1965-01-25 Mencionado/a
Carta de Kantor a Luís e Maruxa Seoane. 1965
Madrid
Nova York
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Kantor a Luís e Maruxa Seoane. 1965 en 25/01/1965


MADRID, 25 Enero 1965

L. SEOANE y Señora
MONTEVIDEO 1985
Buenos Aires
ARGENTINA

Queridos Maruja y Luis:

Sin pensarlo, estoy en Madrid de pronto por 7 días con Ana María a ver a Chuchi. Ella llegó de Jerusalem en nave. De Milán donde estuve 4 ½ meses con gran suerte, a pesar de ser inaccesible y el peor tiempo, salimos en avión. 2 horas. El color de España, tierra. Ríos y montañas. ¡Increíble! Soñando 40 años con verla. Estoy en la Sala Negra de GOYA. Pensando en todos los amigos y como en el templo de toda la pintura. Conocí hijos de amigos tuyos por casualidad el sábado, día que llegué. Encantadores! Mi idea era venir en Primavera por un mes y lo haré. Anoche, el Cante Hondo mejor de España; lo encontramos!
Vuelvo a Roma; escribiré de allí largamente.

CARIÑOS Y ABRAZOS

KANTOR

Sólo veremos Toledo. En Barcelona sale Ani en nave

1966-01-11 Mencionado/a
Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1966
Ávila
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1966 en 11/01/1966


11-1-66 17:30 h.

Desde Ávila, Maruja! No sé de qué hablarte primero, si de las rosquillas de Ávila, de Toledo, el Escorial o Madrid. O los campos sembrados con dibujos geométricos de olivos, o de los españoles, o de Goya, o de Velázquez. Estoy maravillada. He reaccionado frente a España reconociendo lo que nunca había conocido y reconociéndome. Me encuentro de repente hablando como los españoles. En cada calleja de Ávila, he encontrado a mis dos abuelas envueltas en pañoletas negras. Superado el trauma del avión, todo hasta ahora ha salido muy bien. Mañana salimos para Barcelona. Ya te escribiré más adelante. El viaje de hoy por el Guadarrama ha sido maravilloso. Con todo, siempre hay una hora del día, cuando el cansancio me vence, que siento un nudo de opresión que se llama nostalgia. Mis dulces hijos, los tres. Como España me conmueve, todo lo que siento, lo alegre y lo triste, lo siento más. Marujita, hasta muy pronto, desde lejos también se agrandan los amigos. Un gran abrazo a Luis y otro para ti.

Elsa

Irá carta de Bernardo para Luis.

1966-02-22 Mencionado/a
Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1966
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1966 en 22/02/1966


22-2-66

Caros Luis y Maruja:

Gracias por su carta. Aquí, en Londres, he completado el conocimiento de la diáspora española que conocí en Zurich y en París. No se sabe en que parte lo pasan peor, quizá en Zurich. En realidad, lo que hemos visto ya se lo hemos oído contar a Ud.
Londres nos trata bien, aun hoy que ha llovido torrencialmente y con truenos de verdad, no como los truenitos de París.
Hoy nos tocó la National Gallery, que muestra casi como ningún otro museo europeo. En Venecia, no pudimos apreciarla por falta de luz, la escuela veneciana. Y cuando uno pasa luego a los flamencos, Memling, Van Eyck, Rembrandt, Rubens, Van Dick, Turner, etc., y cree que ya no hay más lugar para tanto de bueno, tropieza de repente con el retrato de Isabel Cobos de Porcel, probablemente el Goya que más me haya gustado de los muchos que vi.
Ayer vimos una gran exposición Bonnard, 355 números en el catálogo, entre óleos, pasteles, dibujos, litografías, carteles, libros ilustrados, etc. Una estupenda selección hecha en el mundo entero por Dennys Sutton. Además, modelo de cosa bien organizada o de organización al servicio del arte. Dos veces por semana, tríos y cuartetos de música de cámara, al cierre de la exposición, dan breves conciertos de música francesa contemporánea de Bonnard, Ravel, Debussy, Erik Satie.
De la exposición en sí misma, maravillosa, hablaremos en Buenos Aires; yo no sabía que fuera tan maravilloso paisajista.
Querido Luis, mañana será la Tate Gallery y una visita especial a la Venus del espejo de Velázquez.

Hasta pronto

Sofovich

Cariños a Maruja.

1966-12-24 Mencionado/a
Carta de Frontini a Luís e Maruxa Seoane. 1966
Nova York
Bos Aires
Madrid
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Frontini a Luís e Maruxa Seoane. 1966 en 24/12/1966

DR. NORBERTO A. FRONTINI / ABOGADO / Buenos Aires, / LAVALLE 1312, 5º A / TELÉFONO 40-7512.

Diciembre, 24 de 1966

Sr. Luis Seoane y Maruja Seoane
Madrid

Queridos Luis y Maruja:

Les escribo desde mi Estudio, en el cubo de una ciudad silenciosa. Al parecer, todo el mundo está en sus casas volviendo a la tradición cuyo futuro parece deteriorado. Las familias, ¿dónde están las familias verdaderas? El hecho de que esté aquí solo es una prueba personal que podría universalizarse. Un hijo está donde ustedes saben. Como el procurador fiscal pidió licencia para no acusar o sostener el recurso de apelación en la Alzada, la Cámara designó a un cofiscal de la lista de abogados del foro tucumano. Naturalmente, el nuevo fiscal ad hoc necesitará mucho tiempo para enterarse de cómo son los vericuetos del expediente, mientras tanto los muchados, el hijo, deberá permanecer un mes, dos o tres meses más. El otro hijo, con sus dos criaturas, estará con los otros abuelos. Otra compostura que me es incompatible. Y la hija estará con su suegro o suegros. Y todo el mundo, de este modo, está y no está aunque quiera estar junto. Habría que volver a creer en dios con y sin mayúscula. O volver, como solía decirme aquel gran castellano Ángel del Río, volver a la idea de pecado. La idea de pecado me encanta como revelación del poder creador del ser humano. Todo cambio es pecado visto desde la normalización pretérita. Pero, ¿de qué les estoy hablando? De mí, por lo visto. Pero yo quería decirles que recibí con alegría la carta que Luis me envió desde París. Los envidio por haber visto esa exposición múltiple de Picasso. Una larga vida creadora, una ráfaga espermática en el nivel de la invención y del mundo. Nuestros nietos se acostumbrarán a ver sin asombro epidérmico. A ver con naturalidad. Y les pasará seguramente lo que (a) mí cuando he vuelto a ver a Goya. Se le ven las entrañas del genio. Y es ahí donde se advierte que los medios de que se vale el hombre para expresar su ser profundo son infinitamente variados y múltiples, desde la palabra, siempre insuficiente, hasta la música tan cerca de las excelencias que el hombre ha atribuido a la divinidad por él creada. Me gustó eso de “soldado raso de la pintura”. Que es como decir, estado de inocencia. Cuando lo leí, me acordé de Castelao, cuando en Santiago de Galicia, en la Universidad dijo aquello de que “hoy llamamos genialidad a lo que antes llamábamos inocencia”. Lo comprendí, o creí comprenderlo por primera vez. Lo había repetido miles de veces con intuición pretenciosa, pero sin advertir la similitud del sentido de ambas palabras. En ambos casos, con ambas palabras, me parece que se define el nivel de la levadura auténticamente creadora. El genio es la inocencia haciéndose conocimiento verdadero. O lo que es lo mismo: de la inocencia al conocimiento. De la nada a la creación. La nada y el ser? Bueno, ya próxima la media noche, les deseo buenas fiestas. Pero más, que se te hagan fruto verdadero, a ti Luis, esas tremendas, temblorosas ganas de pintar. Vaya monstruo simpático! Estará por ahí de aquí a pocos días Clarita, la esposa del Dr. Reati, con una sobrina. Le di tus señas para que pudiese ella conversar contigo. O mejor: para que te oyera. Le advertí que estarías trabajando. Pero podrías darle algunas indicaciones para París, pues seguirá para la ciudad picassiana. Ah, los recuerdos del [escrito na marxe esquerda:] Berlín de 1932/33. Hofer, Haeckel. Guardo las imágenes en la memoria. Nolde, Rene Sintenis. Los tiempos pasados entristecen si el presente está detenido. El tuyo es una vibración enternecedora. Bueno: falleció el hijo de Falcini. Qué se le puede decir a los sobrevivientes? Cada cual está solo con sus dolores, con su dolor. No sé a donde iré de vacaciones. He tenido tanto que hacer, o tanto aturdimiento, que no he dispuesto de tiempo para pensar en ello. Grandes abrazos para ti y Maruja y vuelve a escribir una de tus estupendas cartas.

Norberto

1967-02-27 Mencionado/a
Carta de Seoane a Rotemberg. 1967
Nova York
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Rotemberg. 1967 en 27/02/1967


Madrid, 27 de febrero de 1967

Sres. Dina y Abrasha Rotenberg
Buenos Aires

Mis queridos amigos:

Recibimos la carta que nos enviásteis ya no sé cuando, sospecho que antes de salir de vacaciones de las que llegaréis de vuelta seguramente estos días, pues, entendemos que pensaban tomárselas en febrero. Nosotros llevamos dos meses en Madrid, trabajando y paseando, más todavía trabajando que paseando, en un espacio cuyas medidas casi exactas se las digo a Julia e Isidoro en la carta que les enviamos, que sale conjuntamente con ésta. Desde que escribí esa carta, hace unas horas, tuve confirmación de la fecha de mi exposición en Colonia, el 4 de Mayo, y durará cinco semanas, como consecuencia del éxito de la alcanzada en Bonn cuya clausura volvió a prorrogarse, lo supe tambien hace unos momentos, parece que aún durará gran parte de marzo. Quizá, desde el punto de vista práctico, debiera estar en Alemania pero de alguna manera debemos poder pagarnos la felicidad de hacer lo que nos dá la gana, este tipo de libertad que no hay quien le quite a los españoles –éstos asi lo créen– o a los de su orígen y que es un modo, como otro cualquiera, de comprarse alguna satisfacción personal. Aquí estamos más a gusto que en Alemania. Estamos entre gentes libres de muchos prejuicios, no de todos, casi libres, aunque sientan su libertad encerrada entre las fronteras, aquí no son paredes, de una gran cárcel. En El Prado hay una aguada de Goya donde un preso arrodillado recibe en su celda un rayo de sol, y sonriente, expresa: “Divina libertad”. Así es, la libertad se lleva con uno y es lo que uno siente aquí de las gentes del pueblo. Goya lo sabía muy bien. Claro que no quiere decir que ellos lo sientan. Libres los siento yo en relación con suízos y alemanes. Cada vez que nos veíamos observados por esos alemanes de ojos de hielo, impersonales y fijos como los de algunas aves de rapiña, cuidando de que cumpliésemos con las reglas, nos sentíamos coartados en nuestra libertad. Otra cosa es que las reglas las formulen y las cuiden los de arriba, no los vecinos y parientes, los funcionarios del Estado y el Estado, que los españoles nunca están dispuestos a obedecer y que si obedecen es por los mismos motivos por los que soportan sin remedio, una tormenta, una catástrofe, una enfermedad, algo que ellos no pueden controlar, que en ningún caso depende de ellos. Es posible que esta libertad individual, esta tolerancia de unos con otros, sea el producto de siglos de desgracias comunes, de mezclas, de guerras perdidas, de su vejez como pueblo, como ocurre con los otros del Mediterráneo, o con esos otros que denominamos primitivos. Por mi parte, comprendo mejor a quien aún crée en un sacerdote tribal al que se le suponen poderes sobrenaturales y misteriosos, capaz de conjurar males con oraciones verbales y recetas vegetales, que a quienes adoran al dios Thyssen, el de los metales, incapaz de consolar con algún simple y extraño conjuro a un semejante. No me refiero, se entiende, en este caso, a la libertad política. No sé por qué les escribo todo esto. Debiera seguramente referirme a otras cuestiones. Al mismo Goya, de quien hoy mismo encontramos en el museo un dibujo a la aguada en el que se valió del “collage” para acentuar sus blancos, encerrando papel recortado en el negro de tinta, el dibujo número 328 de los que allí se exponen. O a Raimón, el valenciano que canta en catalán canciones “comprometidas” y cuyo último disco ya se agotó en unos días entre Barcelona y Madrid, sin que nosotros pudiésemos adquirirlo. España está hambrienta de que alguien se refiera a sus problemas. Yo acabo de pintar un cuadro titulado Emigrante, donde del cuello de una gran figura femenina pende un cartel que dice: “Elle s´apelle Manuela Rodríguez. Elle est analphabéte. Aidez-la. Genève 1963”, que es un tema que Maruja y yo vivimos precisamente en Ginebra y en ese año. Era una trabajadora española que viajaba en tren desde Tessino a España, a la que le colgaron el cartel en el punto de partida y se enloqueció en el tren.
Por hoy nada más. Escríbannos. Me gustaría en una próxima enviarle a Dina noticias que puedan interesarle para su arte. Un gran abrazo para los dos de Maruja y mío:

[Seoane]

N/D: Dr. Esquerdo 75, 3º, dcha. Madrid.

1967-03-17 Mencionado/a
Carta de Seoane a Sofovich. 1967
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1967 en 17/03/1967


Madrid, 17 de marzo de 1967

Sr. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Continuamos en Madrid hasta fines de abril, donde es casi seguro inaugure una exposición de grabados. El 25 de abril –iba a ser el 4 de mayo– se inaugura una de óleos en Colonia, pero enviaré los cuadros desde aquí. Para entonces seguramente estaremos en Asturias camino de Galicia. Pero estamos alarmados, no recibimos carta de nadie de ahí. He escrito a todos los amigos y no tengo respuesta. A ustedes les hemos escrito dos cartas, la última el día 7 de febrero y suponemos que han contestado, pero aquí no llegó respuesta alguna. Tampoco tenemos noticia de si recibieron el catálogo de la exposición de Picasso en París. Sabemos, sí, que Scheinberg lo recibió. Creemos que todo esto debe ser consecuencia de las huelgas últimas, pero al correo debían dejarlo en paz. Trabajo mucho, todo lo que envío a Alemania es nuevo y no gozamos, hasta ahora, demasiado del clima de Madrid que en estos últimos días es decididamente primaveral. De Buenos Aires tenemos solamente las noticias de los diarios que no son muchas y las que se dicen ahí de Europa no son demasiado optimistas. Se trata de presentar al mundo como absolutamente desquiciado, sumido en desconciertos, para exaltar la felicidad española, una felicidad que muchos hogares ciudadanos –los campesinos no resultan nadie– no alcanza a la cifra de 2.500 a 3.000 pesetas, o la superan en poco, en un momento de notable alza de precios. De arte, en general, gozando de los grandes ejemplos de España, sobre todo de Velázquez y Goya. Y disfrutamos las calles de Madrid, los diálogos con la gente, el ir encontrando en uno y otro que no se trata de vivos-muertos, sino de gentes que viven desesperadamente, pero esperan. Por aquí hay ahora muchos argentinos que van y vienen de Sevilla, Madrid, de Madrid a Barcelona, de los que tenemos noticias porque alguien nos dice que pasaron y dejaron dicho que van a volver. En Fernando Fe se inauguró una exposición de grabados de Rafael Alberti con mucho éxito. La asistencia de la inauguración se transformó en un homenaje. Esto es todo por hoy. Por favor, escriban. Deseamos noticias de ahí. Un gran abrazo para Elsa, Claudia, Pablito y usted de Maruja y mío:

[Seoane]

1967-03-17 Mencionado/a
Carta de Seoane a Scheimberg. 1967
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1967 en 17/03/1967


Madrid, 17 de marzo de 1967

Sres. Aída y Simón Scheinberg
Buenos Aires

Mis queridos amigos:

No tenemos noticias de ustedes. Les escribimos el 21 de febrero y no sabemos si les llegó o no nuestra carta. Hoy les enviamos el catálogo de la exposición de grabados de Alberti que está celebrándose aquí con gran éxito. A Kornblith le escribo con más detalle de esta muestra, que resultó muy importante por otras cuestiones que usted percibe y que de alguna manera se sobreentienden en la lectura de los trabajos de los dos críticos de arte y del Director del Museo de Arte Contemporáneo que se publican en el catálogo. Nosotros continuamos con la vida que, creo les manifestaba en nuestra última carta, hacíamos. Gran parte del día trabajando, al atardecer y de noche saliendo, cumpliendo compromisos, viendo cine y teatro, o simplemente paseando por las viejas calles de esta ciudad, de cuando verdaderamente era Villa y Corte, los serenos andaban con llaves de hombres, no yales, marcaban el va..., o el ahora voy con los golpes de vara y decían las horas. A las horas de los embozados en largas capas. Cuando Goya y Moratín, o Larra o Espronceda, o el Duque de Rivas, gustaban, seguramente, andar más por las calles, mientras los absolutistas discurrían en sus gabinetes románticos las más oscuras repercusiones. Cuando Valle Inclán declamaba a la luz de un farol versos del Canto a Teresa, de Espronceda, o estrofas de Zorrilla. A la hora de los maullidos de los gatos. Este es el Madrid que me gusta, el de Gómez de la Serna; el otro, el nuevo, el que está construyéndoseme parece atroz. Cuando no participa del gusto arquitectónico corriente en todas las ciudades es aún peor, pues la tradición, el viejo o los viejos estilos, sólo se guardan para algunos aspectos de la política y para la conservación de costumbres anacrónicas. La vida como las que envidiábamos siendo estudiantes desde Santiago de Compostela, con verdaderos jefes de peña, donde un escritor presidía un grupo derrochando diariamente talento e ingenio. Ahora casi el único café es el Gijón, del que escapo, pues temo escuchar el discurso de algún ex compañero mío de facultad, ahora magistrado, registrador de la propiedad o funcionario de algo, sobre como debe cazar el faisán y las características del faisán macho, o temas similares. Además se parece demasiado a las salas de estación de los pueblos, donde siempre llegan conocidos de Buenos Aires, o de otras partes, que están con nosotros de paso, por curiosidad, esperando un tren que no llega e igualmente incómodo. Lo que queda, pues, es añorar, transformar para uno la crónica en leyenda, y pasear. El pueblo es el mismo que vivieron aquellos inmortales que recordamos. Sólo cambiaron los trajes. También cantan las mismas canciones.
Escríbannos con noticias. Un gran abrazo de Maruja y mío para los dos. Azucen a los amigos para que nos escriban:

[Seoane]

1967-04-14 Mencionado/a
Carta de Seoane a Scheimberg. 1967
Madrid
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1967 en 14/04/1967

Madrid, 14 de abril de 1967

Sr. Simón Scheinberg

Mi querido amigo:

He recibido sus cartas y el catálogo de la exposición de Galatea con el prólogo tan bellamente escrito y justiciero de Varela. Debió haber quedado muy bien esa exposición, colocados uno al lado de otro los pintores tan distintos que fundamentan el arte argentino de nuestro siglo, vistos así, en una galería, independientes, alejados del hogar donde usted los tiene, sin el apoyo sentimental que les presta la colección y el coleccionista que, naturalmente, influye en la visión del espectador visitante y librado cada cuadro a su propia libertad y fuerza, la que del pintor pudo o supo transmitirle. Me hubiese gustado verla y haber estado con ustedes ese día. Nosotros continuamos el género de vida que creemos haberles descrito en nuestras cartas y que suponemos les habrá relatado Lala, a quien, por cierto, le pedimos que les dijese que no habíamos recibido carta de ustedes ni de los otros amigos en bastante tiempo. Pues bien, al día siguiente de su partida recibimos una de ustedes y luego fueron llegando otras. El lunes inauguro una exposición de grabados en la Galería Fernando Fe. Expongo entre otros los grabados de Santo Domingo y una cabeza que le hice grabada en madera, aquí en Madrid, a León Felipe sobre un apunte hecho en México. Es un modo de continuar la oposición que representó la exposición de Alberti y de anteceder a la del escultor Alberto Sánchez, gran artista abstracto, que ustedes conocen, muerto en el exilio. La exposición de Alberti constituyó un gran éxito de público, de venta e incluso de crítica. El ABC le dedicó una buena nota y todos ustedes conocen el significado de este diario en Madrid. Ahora se prepara, creo que para la próxima temporada, ésta termina en junio, una nueva muestra de Alberti en Barcelona. El día 23 de este mes salimos para Colonia, donde estaremos tres o cuatro días, pues inauguro el 25 una exposición de óleos. Veremos cómo me va, mejor dicho como les va a los cuadros, pues a partir de que uno los da por terminados siguen una vida independiente del autor. Cuando uno los ve, al cabo de meses y de años les encuentra, como a los familiares y a los amigos, las arrugas y los achaques del tiempo y no se sorprende un poco. Debe pasarle al pintor algo parecido al padre que luego de muchos años ve nuevamente a un hijo cuyo recuerdo se fijó en el instante de la separación, “¿pero éste es mi hijo?”. –“¡Qué cambiado está..!” pensará para sí. Nada es eterno, se suele decir y el dicho es una perogrullada, pero una perogrullada que se afianza en nosotros a medida que nos alejamos de los años en que soñábamos que nuestras convicciones, sentimientos, hechos, etc., estaban destinados a la eternidad. Cuidado, no estoy filosofando. Ni siquiera lo intento. Lo que ocurre que, de vez en cuando, me encuentro en España con un excompañero, amigo ahora, que me dice: “Tengo un dibujo tuyo que me regalaste en Santiago cuando éramos estudiantes, tienes que verlo...” Yo hago lo posible por no verlo para no tener que decirme “¿Cómo pudiste tú haber hecho esto y encima regalarlo?” Y me dan ganas de pegarme un par de bofetadas por haber creído, hace tanto años, haber hecho algo interesante. Quizás dentro de otros muchos años me ocurra lo mismo con lo que ahora expongo aquí en Madrid y en Colonia. Lo único que siempre nos conmueve es lo que otros han hecho y hemos querido y continuamos queriendo, aún no siendo genios sus autores, no llamándose, por ejemplo, Goya ni Picasso. Ésta es posiblemente una carta distinta a la que pensaba escribirles. Apenas noticias, casi escribiéndoles de cuestiones que uno piensa algunas veces y luego deja de pensar en ellas y que nos llevarían a tratar de vivir en estado primitivo en la selva, como soñaron los anarquistas, Quiroga y Giambiagi en sus juventudes, si en mi caso no estuviese demasiado encariñado con las ciudades y lo que éstas ofrecen en nuestra época, de cine, por ejemplo. Una noticia. En Mallorca se reunieron los parlamentarios europeos a tratar asuntos relativos a sus funciones, estaban representados todos los países, o casi todos, desde la Unión Soviética hasta España. Bueno, ésta es una noticia que libro al juicio de cada uno. Yo la doy por juzgada.
Escríbannos. Deseamos saber de todos los amigos y de Buenos Aires. Un gran abrazo para todos los familiares y amigos y para ustedes de Maruja y mío:

[Seoane]

PD: Después del 10 de mayo, estaremos en Gijón, en casa de mi hermana, cuya dirección es: Luis Eguiburu (Para Luis Seoane). Farmacia. La Calzada, Gijón, España.
Y ya en junio, en El Castro, en casa de Díaz Pardo. Cerámicas del Castro. Osedo, Sada. La Coruña.

1967-04-14 Mencionado/a
Carta de Seoane a Goldstein. 1967
Madrid
Nova York
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Goldstein. 1967 en 14/04/1967


Madrid, 14 de abril de 1967

Sr. Enrique Goldstein
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Ahora soy yo el que debo carta y paso a cumplir contestando. Estamos en Madrid quizá por un mes más, luego iremos a Asturias, pero antes, por tres o cuatro días, volveremos a Colonia donde el día 25 se inaugura una exposición mía de óleos para la que desearía un éxito similar al que obtuve con la de grabados en Bonn, que llegó a prorrogarse casi un mes. Aquí, en Madrid, inauguro otra de grabados en lunes 17. Esta ciudad está, desde luego, llena de interés en todo aquello que se refiere a arte del pasado, historia y costumbres populares. Como le dije en mi otra carta, o creo haberle dicho, nada en lo que tiene atigencia con la arquitectura nueva, o muy poco. En todo caso, los grandes ejemplos se refieren a ingeniería, o a las medidas que protegen la construcción que aquí hacen de la necesidad de tener los gremios sin pararlos, en un país cuyos campesinos emigran en masa como trabajadores a las ciudades y al extranjero.
Pero Madrid tiene un gran encanto si hacemos abstracción de muchas cuestiones, y, entre ellas, uno singular es el hablar con las gentes o visitar sus lugares de reunión habituales, las tabernas las noches de los sábados y todo lo que es el Madrid viejo. De vez en cuando, se encuentra por la calle una bruja de Goya, envuelta en paños negros y agitando billetes de lotería en lugar de una escoba que a fuerza de gracia en el decir le vende a uno un décimo. Por desgracia, no toca nunca nada porque el billete resulta embrujado, la bruja goyesca ha mirado antes el número con su ojo bizco sin dejar tiempo a algún conjuro eficaz. Habrá que pasarlo, antes del sorteo, por una joroba y en España, así como hay bastantes brujas, o que lo parecen, hay pocos jorobados. Habría que tratar de encontrar uno de eficacia probada resulta muy difícil. La pena es no poder hacer abstracción de muchas de esas cuestiones y alguna de éstas, como la política, es la que hace más difícil el total contento nuestro.
De arte vimos una exposición interesante de Lucio Muñoz, después de otra bastante menos a mi juicio, de Millares, ambos conocidos en Buenos Aires por haber expuesto en Bonino y en el Museo de Arte Moderno. Lucio Muñoz hace más coloreados su especie de relieves en madera, y Millares no logra superar su gusto por los materiales putrefactos a la manera de alguna moda pasada. Ahora se trata de volver al Art Nouveau, como se admite en algunas revistas femeninas para las ilustraciones y por la moda en general. Op y Art Nouveau conjugándose. Yo de todas maneras, prefiero esto a esos materiales sucios, negros y en descomposición que quisieron elevar a categoría de expresión de nuestra época, olvidándose de que la época, una época, encierra expresiones muy distintas, muchas veces opuestas y que esa variedad constituye su riqueza. Es una lástima que la historia de las costumbres y de la moda, capítulo muy importante de la historia general de la cultura, no sea de enseñanza obligatoria en los colegios secundarios. Esto evitaría la soberbia conque se muestra en su iniciación cada nueva manera estética, abriría paso a la modestia conque se debe intentar todo lo que se crea realmente original. Esto es algo en lo que no puede estar de acuerdo nuestro dictador estético R.[omero] B.[rest], en Di Tella. O si está de acuerdo, es para fastidiarnos. Nos alegramos mucho que estén ya en la Av. de los Incas y que hubiese quedado bien la puerta del edificio. Me gustaría ver como queda de día iluminándose hacia adentro y de noche despidiendo, como corresponde y no despertar a los dormidos, su luz hacia afuera. Escríbame de esto y de sus proyectos. Ese de los murales míos, reunirlos en un libro, aunque sea modesto, estoy sinceramente deseándolo, creo que es el único modo de que algunos de ellos queden. Pero en ese libro hay que hacer el homenaje debido a quienes los hicieron posibles.

Un gran abrazo de Maruja y mío para Anita, usted y los chicos, y todos los amigos comunes de:

[Seoane]

A partir del día 10 de mayo estaremos en Asturias. N/d es:
Luis Eguiburu (Para Luis Seoane)
La Calzada (Farmacia)
Gijón. España.

Y, a partir del mes de junio, de los primeros días, estaremos en La Coruña:
Luis Seoane
Parcelanas del Castro. Osedo
Sada. La Coruña
España.

1967-05-09 Mencionado/a
Carta de Scheimberg a Seoane. 1967
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1967 en 09/05/1967


Bs. Aires, mayo 9 de 1967

Querido Seoane:

Contesto a su carta del 14 de abril. Ni tantas arrugas ni para darse de bofetadas en lo que respecta a sus obras del pasado –o mejor dicho, juveniles–. Dice Unamuno en alguna parte que sólo escribe para siempre el que escribe con la sangre de su cuerpo. Y esto tanto vale para el que escribe como para el que pinta o esculpe, o crea en cualquier género. Con las obras así escritas nos pasa como con los hijos salidos de nuestra sangre –que no envejecen para los padres. Somos nosotros los que envejecemos. Y las obras podrán ser distintas con el tiempo; pero siempre habrá algo que denuncie la común paternidad. Yo he visto algún dibujo suyo de su época de estudiante; no sabría decir de su valor definitivo, pero creo que sabría descubrir que le pertenece. Con menos distancia, eso no sólo me pasa a mí con las obras suyas de tan distantes años como son los q’ van del año 47 a la fecha –sino a cuantos pasan por mi casa: “Esto es un Seoane”, dicen frente a cualquiera de ellas. Es algo parecido a lo que pasa con el mentón pronunciado de los Borbones (o lo que fueren). Es el hilo de sangre que da, repito, la paternidad. Quién más variado que el Van Gogh de colores negros de su época de Bélgica del delirantemente luminoso de sus últimos años? Y, sin embargo, Vd. que entiende y yo que no entiendo no nos equivocamos en la atribución. Y no digamos ya con Goya... Y esto que pasa con Vd., y con Van Gogh, pongamos por caso, no nos pasa con los apresurados incubadores de obras y de estilos en las que ni la esperma es la misma (perdóneme la expresión). Pero no quiero seguir por este camino tan fácil es extraviarse para el lego.
Espero que le haya ido bien –y con provecho además– en sus exposiciones de Madrid (grabados) y de Colonia (óleos). En cuanto a la primera, sé que, por lo menos de público, ha sido todo un éxito. Pero como no sólo de arte vive el artista...
Aquí siempre lo mismo: empantanados y sin vislumbrarse ninguna salida, que es lo trágico. Dios dirá.

Y nada más por ahora. Besos y abrazos para Maruja y Vd., de Aída y míos.

Scheimberg

1967-05-15 Mencionado/a
Carta de Frontini a Seoane. 1967
Nova York
Bos Aires
Nova York
Madrid
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Frontini a Seoane. 1967 en 15/05/1967

DR. NORBERTO A. FRONTINI / ABOGADO / BUENOS AIRES, / LAVALLE 1312, 5º A / TELÉFONO, 40-7512.

Mayo 15 de 1967

Sr. Luis Seoane
Esquerdo 75, 3º Dcha.
Madrid

Mi querido Luis:

Recibí oportunamente tu carta del 25 de febrero. A mis años el tiempo tiene vertiginosidad imperceptible.
O es que el quehacer cotidiano en vez de estrangular las horas las urge? El tiempo pierde su medida horaria, cosa de la inteligencia y no de la sensibilidad, cosa mecánica, no de la vida continua. Ocurrió que estuve con tu carta en el bolsillo y le fui añadiendo las dos que le escribiste a Luis, y así se fueron pasando los días. Supongo has regresado de Galicia y estás ahora en Madrid, y allí te vuelvo a escribir. He tenido noticias de tu exposición en la urbe castellana por la carta que me leyó Falcini y antes, de ustedes, por referencias orales de Clarita que vino emocionada por la dulzura de Maruja y alucinada por el tamaño de tu inteligencia y el fervor que pones al hablar de tu tierra natal. Me habría gustado nacer en tierras de árboles y no en ciudad. Junto al mar y no entre muros, a la vera de un río corredizo y no entre las calles de una ciudad que cambia su fisionomía día tras día. Quizá sea por eso que para mí la patria, como geografía, ha sido, durante muchos años, una metáfora vacía, y después, un largo paisaje diferenciado; más tarde fue una historia sin asidero en la vida concreta del hombre y del ciudadano y, por último, varios estratos con zambullidas repentinas en las desemejanzas que los siglos han dejado entre las gentes como residuos de culturas si no distantes, distintas. Ese viaje que haces por tierras de España tiene la presencia de las constantes de la historia que son la razón de ser de la biología profunda y la expresión de la relación con los aires de un contorno físico incambiable o poco menos. A nuestra edad, a la mía, querríamos menos cambios insustanciales y la presencia de un clima histórico que sea como nuestra memoria. Me parece convincente lo que me dices acerca del rigor –la clasicidad– del tránsito del hombre español. Por eso me parecen hermanadas la prosa de Cervantes, el ceñimiento formal de Velázquez, y la límpida arquitectura de Herrera. Y Goya? Acaso sea lo mismo con más expresividad. En vez del hieratismo de Rivera, el misticismo del divino Morales o la pasión un tanto acartonada del Greco (muy señorial, muy retratada) o la abundancia colorida de Zurbarán, Goya es la expresividad poética de la vida del cuerpo y del alma del hombre y sus pasiones.
Pero de tal fuerza trascendente que parece abarcar todo el proceso dramático de la vida humana desde la primera fermentación sobre la tierra hasta el deliquio (desfallecimiento y delicia) de la búsqueda de dios.
Y por qué dices de Barlach que es goticista? Siempre me pareció entroncado en las formas románicas. En aquéllas que más de una vez vi talladas en el bronce de los portales de algunas iglesias. Achatadas las figuras, indiferentes los atuendos, en planos cruzados sin violencias geométricas, dándose el cuerpo en función de las caras donde la expresión de la vida interior adquiere una fuerza dramática sorprendente. Lo cual, años después, asocié con algunas de las tallas de Rodin, el Sarmiento, el Balzac (los varios ensayos previos?). Quizá por otros motivos espirituales, quizá porque Rodin tenía conciencia de la importancia que estaba adquiriendo la inteligencia del hombre en la edad moderna.
Pero, qué pasará siglos mediantes, con la cibernética, con el lenguaje, y las significaciones que hasta ahora han servido al hombre para entenderse? Colijo que el hombre va permanentemente hacia su propio consciente cambio por la auto creación y que de aquí a siglos, todo será diferente. No lo será el diálogo que lo conduzca hacia la superación de sus constantes limitaciones. Será por eso que te estremecen los “momentos”? Tú agregas: la historia, es decir, el tránsito. Y de eso se trata, de cómo transitamos este mundo o por este mundo. Cuando a la distancia de decenas de años recuerdo ciertas lecturas de juventud, ciertas teorías, el lenguaje pedante que se me metió en los entresijos del alma a través de los libros universitarios, me doy cuenta que nuestra civilización es una costra de estupidez. La civilización que pone su acento en las cosas materiales. Claro, ellas vienen a nuestro encuentro. Empero, siempre será más encantadora la sonrisa de un niño o una mano de mujer que se mueve como ala, que todo ese estiércol que se desvanece, no de una generación a otra sino de hoy a mañana. El “momento” (me impresionó mucho esta frase de tu carta) es siempre un estremecimiento. Acaso por su instantaneidad, por su huidiza compostura. Cuando tú lo fijas, lo haces inteligible y perdurable. Un estudio comparativo de la sucesión de los momentos (los momentos claves del ser humano) serviría para constatar las constantes de la conducta. Esa es la virtud del artista. Y si se tiene genio como tú, vaya si la cosa tiene importancia. Pero los momentos que registras en tus obras son también tus propios momentos espirituales. Porque todos somos meros seres transitivos. Y este es nuestro drama y la razón de ser también de nuestra instantánea alegría. Tú dices que encuentras alegría en El Escorial. Me cuesta imaginarme ante El Escorial en ese estado de alegría. Y mis imágenes (tendría que haber nacido en España) son las del asombro. Pero también la del dominio de mí mismo, como vida fluyente, frente a esa sobria arquitectura. Un recuadro para los ojos, la voz, el cuerpo flexible, andariego, andante. Quizá sea esa la alegría. El contraste entre la vida y esa obra del hombre. Pero eso se da en España.
En las iglesias de Castilla, la muerte es muerte a más vida. Es cosa a mi modo de ver muy castellana, que acaso tenga que ver con el ensorbecimiento que dio al castellano la conquista y la riqueza de América. Un énfasis de su petulancia. Aunque no debe olvidarse que la Iglesia Católica inventó o reinventó la resurrección. Los muertos de supuesta noble vida merecieron estar en el templo de dios. Cuando la paganía del espíritu tiene remotas, visible u ocultas reminiscencias de los países aborígenes o de la Roma imperial, a los muertos se los despide bebiendo y comiendo. Y eso ha quedado entre nosotros, hijos de España, y persiste en las provincias. Se trata de la despedida. ¿Recuerdas la Tumba del Elefante que hay en Carmona? Pues allí hay mesa para comer, y vomitorios y un baño para aguas termales. Comer, vomitar, quitarse el mareo en agua tibia, y a seguir. La despedida. A mejor vida o a vida eterna?
En esta ciudad de encierro, ciudad de país ocupado, todo es incertidumbre. Puedes tener nostalgias del tango y acaso sea por amor, por división de tu vida entre España y Argentina, por contradicción de las vivencias del corazón. Pero yo, que vivo aquí, me aburro, me canso, huyo. Y me da mucha alegría conversar epistolarmente contigo, contigo, que eres uno de los mejores interlocutores del mundo. Menos mal que en estos últimos días hemos contado con la presencia de personas con quienes me hallo a gusto. Estuvo Orfila y estuvimos varias veces con él. Y en una ocasión con él y mi viejo amigo brasileño Caio Prado, y su esposa, que estuvieron pasando una semana con nosotros. Ahora están en Córdoba, de donde seguirán a Mendoza y luego a Santiago, regresando a fines de mes. De Grillo recibí carta hoy. Nos correspondemos por carta y a veces nos damos a tomarnos el pelo. Me provoca para que le escriba y yo a mi vez para sacarlo de sí mismo. Ayer llegó de Salta, Ana María. Estuvo allí varios días. Lo encontró muy flaco. Ya no puede digerir las comidas asquerosas que le dan. Y ya lleva tres años y más de dos meses. Mañana vence el plazo para dictar la sentencia del tribunal de Tucumán. Si, como esperamos, confirman la del juez de primera instancia, pronto lo tendremos con nosotros. No me hago ilusiones, pues el asunto de Bolivia podría despertar enconos oficiales y vaya uno a saber qué añadidos se hacen al proceso. Si confirman la sentencia, podría salir con libertad condicional. Lo esperamos. Pero eso depende de algunas quisicosas que podrían demorar la definitiva salida.
Mony está bien. Pero en estos días un tanto apesadumbrada por algo que le ha ocurrido en La Plata, que es largo de contar y creo que no vale la pena. Los demás familiares muy bien. La hija de Chispa es una delicia. Una “verdadera” nieta cuya compañía me hace mucho bien. Hemos estado con Castagnino y Nina. Te hemos recordado mucho. Y como todos los amigos han leído las cartas que le enviaste a Falcini, nos ha conmovido ese homenaje de los artistas madrileños. Me emocionó aquella lección acerca de la honradez que te dió tu padre. Esa es la honradez de toda tu admirable vida. Si no hubiese sido así y si la maravillosa Maruja no fuese como es, no habrías sido el pintor y escritor que eres. Yo he tratado de ser como mi padre en otro plano de actividades. Pero sobre todo en la vida profunda. Una contradicción me habría fastidiado mucho. Y a otra cosa: hace dos meses falleció el padre de César, el suegro de Chispa. Buena persona. Cuando estuvo en Madrid, se entrevistó con Maiztegui. Un derrame cerebral, media hora de conciencia y diez días en estado de coma. También falleció en enero, el Dr. Julio Peluffo. Creo que lo conociste.
Bueno: me parece que te he dado una larga lata. Es más de media noche en un día domingo. Hay en la ciudad ese silencio compacto de las noches porteñas, vísperas del lunes. Hace calor (estamos sufriendo un otoño caluroso). En las cartas de Grillo siempre hay saludos cordiales para ti y Maruja. Cuánto tiempo se quedarán aún? Un abrazo fraternal para Maruja y para ti, con abrazos de Mony (acabo de telefonearla) y hasta siempre vernos. Y abrazos para Maiztegui.

Norberto

1967-05-24 Mencionado/a
Carta de Seoane a Falcini. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1967 en 24/05/1967


Gijón, 24 de Mayo de 1967

Sr. Luis Falcini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Recibí carta suya hace bastantes días y otra más reciente de Frontini en vísperas de nuestra salida de Madrid. Una carta larga que me alegró mucho, como la suya, como las de todos los amigos de quienes siento ausencias y con los que me gustaría charlar y discutir sobre aquellos asuntos que a todos nos interesan, porque el discutir es tambien algunas veces, prueba de amistad, no se discute con cualquiera, sino con quien se estima o al menos se estima su juicio. En cuestiones de arte se discute ahora muy poco. Más bien se escribe o se habla despreciando lo que no se estima o no se comprende. R.[omero] B.[rest] dá por muerto, en grabado, en una noticia de catálogo, a Picasso o por existente en pasado, así me dijeron, o consideró su aporte poco valioso y, sin embargo, a mí me parece que su aporte en ese género, el del grabado, como en otros, el aporte de Picasso resulta fundamental en nuestra época. En España quienes siguen las nuevas tendencias estéticas no pueden soportar a los que continúan una tradición de la pintura española que tiene ya más de un siglo, la de Goya, y al revés.
A unos les parece que el dibujo de los más jóvenes, totalmente seco, mecánico, técnico, con mucho de “art nouveau”, es preferible a ese dibujo de línea sensible, caligráfico, temperamental, que constituyó la gloria de Toulouse Lautrec, de Bonnard y, antes, de Daumier y Goya. Pero no discuten, se desprecian. Quizá en lo más hondo de ellos se envidien y no comprenden que tanto para unos y para otros lo que puede salvar su obra es la “gracia”, ese algo indefinible que para los cristianos se alcanza en la santidad, lo que los andaluces denominaron “duende” y que es lo que yo encuentro en muchas obras de arte popular.
En el Rastro de Madrid hemos comprado unos ex-votos extremeños, naturalmente anónimos, que tiene eso, “gracia”, algo encantados, inexplicable, que vence a todas las torpezas. No tienen probablemente un gusto establecido por el hábito de repetirse, que es lo que constituye un estilo, pero tienen un candor que me atraen. Eso es lo que tiene todo el arte cultivado que estimamos, junto con otras cualidades de orden distinto, técnicas, y lo que le une a la creación popular realizada sin técnica alguna, una canción, una edificación campesina, una leyenda, etc.
En la zona minera de Asturias por donde pasamos para venir a Gijón, esas casas blancas de cal, en las que destacan como ornamento la cantería de sus aberturas, el color de las puertas y ventanas y la pizarra de sus techos, o la teja roja, en un paisaje verde y negro con un cielo casi siempre gris, tienen la “gracia”, la ingenuidad de los ex-votos que compré en El Rastro y, al mismo tiempo, la de los dibujos de Bonnard o de algún artista sabio como éste. Aquí, en Gijón, queda mucha de esa edificación surgida de los constructores del pueblo y lo que desentona hasta ahora son esas nuevas construcciones al estilo de las revistas de arquitectura en uso la que le hace perder carácter, como ocurre con las nuevas construcciones en casi todas las ciudades europeas que vimos.
Pero esta rotura con un pasado que había alcanzado a distinguirse ya no se discute. Se desprecia ese pasado como los fanáticos de éste desprecian lo bueno, útil y bello de lo nuevo. Vivimos en una época en que parece no tratarse de congeniar en nada. A mi juicio podrían los arquitectos buscar de encontrar coincidencias entre ese acierto de la construcción popular y sus técnicas, pero no, se trata de cambiarlo todo en su totalidad, aunque este cambio borre las características de un pueblo antiguo.
En Gijón la guerra se llevó muchas cosas, entre ellas el espléndido museo de dibujos que había coleccionado Jovellanos y que alcanzaba desde los grandes artistas renacentistas a Goya, del que no quedó nada, y ahora tratan de borrar sus características más visibles.

Un gran abrazo de Maruja y mío para ustedes dos:

[Seoane]

1967-05-26 Mencionado/a
Carta de Seoane a Negri. 1967
Xixón
Bonn
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Negri. 1967 en 26/05/1967


Gijón, 26 de Mayo de 1967

Srta. Nélida Negri
Bonn

Querida amiga:

Recibimos su carta en Gijón, a donde llegamos el día 21 y donde estaremos hasta el día 8 ó 9 de Junio, con noticias de Payró, de la exposición de Petorutti y de las fotografías de Peter, ¿se escribe así?, etc., que agradecimos mucho y quisiéramos ahora saber algo de la exposición de la Galería Boisserée, que suponemos debe cerrarse mañana, si va a Hamburgo o no, que críticas hubo y cual es su destino. Perdóneme por mi impaciencia. Desde Madrid enviamos un paquete con 14 grabados para completar la exposición de Münster, creo que ninguno de los enviados ahora estaba en la exposición de Bonn, y, con los que quedaron de ésta, pueden constituir una buena muestra de ellos. La de Madrid fué un éxito en todos los sentidos: público, crítica y venta, como le escribí ya a Tomás y quedé muy contento de haberla hecho.
Estamos deseando llegar a Galicia donde comenzaré de nuevo a trabajar, aquí en Gijón, por muchas razones, es imposible, pasamos gran parte del día charlando en las reboticas de mi hermana y de mi cuñado, cada uno tiene una farmacia, y viendo cine, sobre todo películas del Oeste. Todo en un clima de frío, viento y lluvias, pero gozando de un paisaje montañoso extraordinario, con altos picos de nieve y con las laderas y las montañas y valles matizadas de los más bellos verdes. Gijón es un puerto minero, a muy poca distancia está la cuenca carbonífera de Asturias, y su color es blanco, gris y negro que contrasta con el azul agrisado del Cantábrico. La ciudad posée poco interés, apenas unas ruínas romanas y algunos edificios civiles medievales. La gran colección Jovellanos, de dibujos de pintores italianos, franceses y españoles del renacimiento a Goya, fué destruída durante la guerra civil y su pinacoteca municipal tiene solo obras de artistas asturianos, algunos muy interesantes como Valle y Piñole, de un expresionismo local al tratar temas de mineros, campesinos y de la costa.
Suponemos que Payró debe estar ya de vuelta de su recorrido alemán. Nos hubiese gustado mucho haber coincidido con él para gozar de su saber y de sus observaciones, pero debemos contentarnos con limitarnos a comentar nuestros recuerdos en Buenos Aires. Supongo que Tomás habrá recibido ya los dibujos de Lugones, a lápiz y a tinta, pues en la conversación telefónica que tuve con él me había dicho que no los había recibido y me cuesta pensar que se hayan perdido. Fueron enviados desde Madrid por correo aéreo certificado. Le ruego me dé noticias de si llegaron o no y de la exposición de Colonia.

Reciban su madre, Tomás y usted abrazos muy cordiales de Maruja y míos y saludos en nuestro nombre a Payró si está en Bonn:

[Seoane]

1967-06-01 Mencionado/a
Carta de Seoane a Scheimberg. 1967
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Scheimberg. 1967 en 01/06/1967


Gijón, 1º de junio de 1967

Dr. Simón Scheinberg
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estamos en Gijón en casa de mi hermana hasta el martes próximo, día 6, y estamos, como quien dice, lejos de todo lo que viene preocupándome en los últimos tiempos, museos, galerías, etc.; Gijón tuvo antes de la Guerra uno de los museos de dibujos más importantes de Europa, el Jovellanos, con el nombre de este ilustre político asturiano, de aquí, de esta ciudad, cuyas doctrinas se habían nutrido de los enciclopedistas franceses y de Feijóo, como muchos de los grandes americanos de la independencia. El museo fue destruido en la Guerra y poseía centenares de dibujos del Renacimiento italiano, Miguel Ángel, Leonardo, etc., y luego Velázquez, El Greco, Zurbarán, hasta Goya y pintores de su época de finales del XVIII hasta principios del XIX. Cuidador de este Museo en la década del 20 fue Moreno Villa, el notable poeta y pintor que falleció exiliado en México, quien confeccionó un catálogo que ya no se encuentra. Fue una gran pérdida la del Museo Jovellanos. Hoy sólo queda el Museo Municipal que posee algunas obras interesantes sobre todo de artistas de la ciudad, los naturalistas de los últimos años del siglo pasado, Álvarez Sala, Martínez Abades, que fueron muy reproducidos en las páginas artísticas del Blanco y Negro y de La Esfera, de un naturalismo regionalista como entonces se usaba, bastante sentimental muy de acuerdo con las poesías de otro asturiano, Campoamor, con sus Doloras. De esa época también, pero que falleció hace pocos años, fue un gran pintor de aquí, de Gijón, Evaristo Valle, triunfador como dibujante en París en revistas de moda, que repentinamente deja la capital del mundo para encerrarse en ésta, puerto industrial, y pintar escenas mineras, trabajos del puerto y escenas populares, con un humor y desgarro próximo por igual a Ensor y a Solana y a quien Lafuente Ferrari, el historiador de arte madrileño, dedicó un tomo impresionante hace dos o tres años. Otro pintor que aún vive, nonagenario, es Piñole, que pintó esos mismos temas y que aún siendo interesante no alcanza a mi juicio, el humor ni el dramatismo de Evaristo Valle. Esto es todo en cuanto a arte. En lo que se refiere a naturaleza, aquí está el Mar Cantábrico que se extiende hasta el Finisterre gallego, acerado, profundo, tormentoso, poblado de naufragios y leyendas, como todo el Atlántico Norte, donde intervienen por igual sirenas y embarcaciones errantes, apestadas, condenadas a errar para siempre, o marinos corsarios, iguales o muy parecidas leyendas que en la costa gallega. Junto a ese mar un país montañoso, abrupto, verde, cuando no negro de minerales, de carbón, que es uno de los más bellos de Europa. También estas montañas encierran leyendas, hadas, las xanas y brujas y sucesos históricos deformados por el pueblo referidos a los moros, muy presentes en Asturias, porque aquí comienza, en Covadonga, la Reconquista. En una ladera de la costa, casi junto al mar, en una casa solitaria, vivió hasta hace diez o quince años una anciana poeta gallega, Rosario Acuña, que tenía fama de bruja y de quien decían las gentes del pueblo que convocaba a los espíritus. Las gentes evitaban el contacto con ella y se apartaban de la casa y a mí me hubiese gustado conocer su misterio, pero parece imposible. Todos los que conozco dicen lo mismo, que tenía fama de bruja, de echar a las gentes el mar de ojo y de reunirse con los espíritus. Es posible que hubiese contemplado más de un naufragio desde alguna de las ventanas de esa casa blanca y solitaria en que vivía. Me hubiese gustado ser su amigo. Debía ser como una vieja sacerdotisa de tiempos remotos. Le escribo a usted sobre pintores y la naturaleza de Gijón y Asturias y, nada de Rosario Acuña, sobre las gentes, mejor lo hablaremos a nuestro regreso. Impunemente, podría hablarse de los indianos que aquí hay muchos en los cafés, hablan en voz alta y recuerdan todos los acentos de América, pero no vale la pena, el asturiano es, en general, bastante vanidoso. Escríbannos. Pueden hacerlo ya al Castro.

Un abrazo para todos los amigos, para sus hijos y un fuerte abrazo para Aída y usted de Maruja y de:

[Seoane]

Porcelanas del Castro. Osedo. Sada.
La Coruña. España.

1968-12-11 Mencionado/a
Carta de Seoane a Rafael e Emma Lifschitz. 1968
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Rafael e Emma Lifschitz. 1968 en 11/12/1968


Madrid, 11 de diciembre de 1968

Sres. Emma y Rafael Lifschitz
Buenos Aires

Queridos amigos:

Suponemos que acabáis de llegar a Buenos Aires procedentes de Nueva York. Nosotros hace veinte días aproximadamente que estamos en España y estamos ya deseando llegar al Castro para quedarnos quietos y poder trabajar. Desde luego, está probado, para mí, que no soy un viajero, que no somos viajeros, que más bien nos gusta quedarnos en un sitio y casi, eternizarnos en él. Creo que para nosotros solamente van quedando dos sitios para sentirnos cómodos, Argentina y España. En Barcelona nos encontramos con una maravillosa exposición de Miró, alrededor de 400 obras, pintura, grabado, escultura, que se exhiben en un antiguo y grandioso palacio que fue el Hospital de la Santa Cruz, cuya arquitectura inicial fue gótica. La pintura de Miró resiste, se armoniza, mejor dicho, con las inmensas paredes de piedra del antiguo edificio. Tiene la misma fuerza de la pintura románica. En el fondo, Miró está influenciado más que nadie por el arte románico y de esté sacó la belleza intensa de los tonos y ese grafismo que en el pintor actual se mueve libre, loco, lírico, valiendo por sí mismo y en el románico fija una figura, un objeto, lo subraya para siempre desconfiando de la permanencia del color. A mí me gusta Miró. Partimos, salvando las distancias entre él y yo, de un gusto igual, creo, por el arte de los miniados, el románico y la pintura o el arte popular. A él le seduce e inspira el arte de las cerámicas de Baleares y Cataluña, a mí el más rudo de las rocas grabadas de Galicia y los dibujos de los naipes y de los carteles de ciego, esos que se acompañaban de aleluyas antes que la televisión hubiese matado toda poesía. En Barcelona, vimos también, aparte, todos los otros museos, el de la pintura románica; el Marés, de escultura románica, gótica y de los imagineros castellanos, sin igual en ninguna parte del mundo; el Museo Picasso, extraordinario como museo y encerrando ahora, en los últimos tiempos, toda la serie de Las Meninas donadas por el mismo Picasso, unos setenta cuadros y, naturalmente, toda su obra grabada, otros óleos, cerámica, etc. A Madrid estamos recorriéndolo nuevamente. Hemos vuelto a ver la cantidad grande de dibujos de Goya del Museo del Prado, los cuadros de la época negra y sus retratos de reyes degenerados y Velázquez y el Ticiano, y el Greco, todo lo que solamente se puede ver en cantidad, con la consiguiente calidad, en España. El domingo próximo día 15, nos iremos a Asturias a pasar unos días con mi hermana y mi cuñado y de allí, el 26 o 27 a El Castro, a trabajar y discutir con Díaz Pardo. Tengo dos o tres exposiciones para hacer. Veremos si puedo pintar con calma y me sale algo. Para ayudarme les ruego a todos los amigos que me escriban y envíen noticias. Estamos deseando tener noticias de Buenos Aires y en cuanto a vosotros, de Buenos Aires y del viaje que hicisteis. En Roma, coincidimos con Raquel Edelman* y pasamos con ella unos días muy buenos.
Esto es todo por hoy. Muchos abrazos para los amigos comunes, para Carlos, Eduardo y vosotros de:

[Seoane]

1968-12-13 Mencionado/a
Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1968
Madrid
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1968 en 13/12/1968


Madrid, 13 de diciembre de 1968

Sres. Esther y Lipa Burd
Buenos Aires

Mis queridos amigos:

Hemos estado en diversos sitios y hasta estos días no hemos escrito a nadie. Nos acordamos de todos, pero al llegar al hotel no teníamos ganas de escribir, nos sentíamos muy cansados y nos parecía, además, que no teníamos nada que decir. Ahora tampoco tenemos demasiado que decir, quizás nada, pero tenemos muchas ganas de comunicarnos con todos los amigos. Hemos vuelto a ver los museos de Nueva York, los de Duseldorf, Colonia, Bonn y el de Arte Moderno de Roma. Ahora, en estos quince días, vimos los de Barcelona y Madrid. No quiero decir nada de los museos, solamente que envidiamos el talento fotográfico de Lipa para poder dejar testimonio en diapositivas de cuanto vió. Con nuestra pobre y pequeña máquina comprada en Panamá en un momento de parada del avión, no sacamos aún, en más de mes y medio, ni una sola fotografía. Somos gente absolutamente negada a las máquinas, al menos en el caso mío, y además olvidamos diariamente su existencia. En Nueva York nos pareció que estaban en franca retirada las últimas tendencias de arte llegadas a Buenos Aires y procedentes precisamente de Nueva York. Quedan los grandes nombres, dos o tres y nada más. En el mismo Museo Whitney –creo que se escribe así– de arte estadounidense, han retirado muchas de las obras que estaban expuestas el año pasado. Claro que esto no quiere decir nada pero es sistemático que las retiren para colgar en cambio algunos excelentes pintores que antes no estaban por considerarlos, seguramente, entonces, pasatistas. Hay una corriente de gente joven que comienza a hacer pintura lo más seriamente posible, dejando el ensayo en su lugar debido, el de ensayo, y creando obra determinada, nada desquiciada, ni loca, ni arbitraria, sino dibujando y pintando. Por mi parte creo que fué muy útil la vuelta al Art Nouveau, a la figuración que lo imita para establecer nuevamente el valor del hombre como tema eterno del arte o de aquello que lo rodea. Madrid está en estos días de fin de año llenándose de Le Parcs de todos los gustos, bueno y mal gusto, como motivo de ornamentación y aprovechando la ventaja de los motores y de los nuevos materiales. Es muy interesante todo este arte que se vuelve popular y termina siendo realizado por artesanos ingeniosos anónimos. Esto es precisamente lo que no puede ocurrirle a Picasso, a Max Ernst, a Miró, como no le ocurrió a Goya ni al Ticiano. Es posible que pase, con estas opiniones, por un conservador, pero no, no creo serlo, simplemente me ocurre que un motor eléctrico, por ejemplo, me parece en su forma más bello que los resultados estéticos que pretende un artista haciendo ensayo sobre él. Pienso que la mayor parte de las invenciones artísticas ya fueron hechas hace tiempo y una “montaña rusa” es un ejemplo estético cuyo autor no se conoce. Sin embargo, tiene belleza por sí misma y nadie la admira como obra de arte.
Bueno, nada más por hoy. Hablaremos de esto en Buenos Aires. Escribidnos de vosotros, de planes inmediatos, de los amigos, de Buenos Aires, de como llegaron las jarras. Mientras tanto recibid, con saludos a los amigos, el fuerte abrazo de:

[Seoane]

1968-12-17 Mencionado/a
Carta de Seoane a Varela. 1968
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1968 en 17/12/1968



Gijón, 17 de diciembre de 1968

Sr. D. Lorenzo Varela
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Te escribo sin demasiada confianza en tu respuesta. Simplemente, para que sepas de nosotros y de lo que vamos viendo de España. Estuvimos antes en Nueva York, tres ciudades alemanas, Dusseldorf, Colonia y Bonn y luego en Roma, donde visitamos, aparte algunos monumentos, a María Teresa y a Alberti. Muy bien. Alberti, trabajando mucho. Acaba de hacer un libro dedicado a Miró, con cinco o seis grabados y manuscrito, y destinado a enviarle el número 1 hace, creo, que veinte ejemplares, al mismo Miró, del que estaban exponiendo 400 obras en Barcelona –te envié el catálogo– con motivo de sus 75 años de edad. Y ganando dinero con un disco, el que hizo un joven cantante italiano con un poema suyo, La paloma, y música de Guastavino, adaptada ésta por el cantante a la actual música, si se puede decir así. Alberti está muy optimista con este disco. Piensa ganar con él mucho dinero. Acaba de salir cuando nosotros pasamos por Roma y se habían vendido alguna buena cantidad de ejemplares de La paloma. En Madrid, Aguilar acaba de publicar su libro a la pintura, con reproducciones en color, muy caro, 250 pesetas el ejemplar y del que fuimos excluidos todos los pintores vivos menos Picasso y Miró y algunos nuestros como Portinari. En el caso de lo vivos, quizás para no tener que explicar quiénes somos y por eso que se dice: “justicia distributiva”, y en el de Portinari, porque ya muerto, sin rendir a beneficio, y no habiendo sido ni Goya ni Cezanne, así parece, realmente no vale la pena. Pero dejemos a Alberti. Estamos en España hace casi un mes. Hemos estado en Barcelona y Madrid, espléndidas las dos en muchos aspectos, pero aguantando ambas, como toda España, una crisis económica sorda producida por el cierre de industrias y que afecta al comercio. La gente se queja este Fin de Año, pero continúan hablando del progreso español y enseguida por el éxito del turismo. El progreso consiste, en general, en la producción de electrodomésticos y el aumento de pequeños autos, de Citroën y de la Fiat, muy baratos, y que se compran, como las máquinas eléctricas, en muy cómodas cuotas. Un progreso similar al de los países africanos, o a los de cualquiera del tercer mundo. El progreso se nota en anuncios como éste de Gijón, una ciudad, como sabes, industrial, puerto de la cuenca minera de Asturias, pero sin apenas atractivo alguno, una estatua de Jovellanos, otra de Don Pelayo, una buena playa y unos cuantos cines donde se proyectan películas del oeste. Dice el aviso en La hoja del lunes: “Bonnie y Clyde –Club Boite Fundición, 10. El único ambiente pop de Gijón. Venta de pósters. Carnets especiales para chicos y chicas. Tarde y noche–”. Éste es el progreso. Ni minifaldas, ni cohetes a la luna. Por otra parte, en Madrid, hay 90.000 casas en ruinas y 70.000 departamentos vacíos. Existen jubilados con 500 pesetas mensuales, 2.500 pesos argentinos. Te escribiré con más detalle. Ahora sólo quiero saludaros a vosotros, a los amigos comunes, que paséis unas felices fiestas y fin de año con Fernando y esposa, Hugo, Ariel y novias. A todos, nuestro saludo. Recibid Marika y tú el fuerte abrazo de Maruja y mío:

[Seoane]

1968-12-20 Mencionado/a
Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1968
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Sofovich a Luís e Maruxa Seoane. 1968 en 20/12/1968


Buenos Aires, 20 de diciembre de 1968

Queridos Luis y Maruja:

Por fin, tenemos noticias de Uds.; como el campo de las conjeturas es infinito, hubo una noche porteña de principios de mes, con 35º a las 23 hs., en la que, convencidos como estábamos, comenzamos a difundir la noticia de que Uds. habían devenido hippies, perdidos en alguna parte.
Buenos Aires sigue viviendo con un diciembre infernal, calores de hasta 38º, lluvias interminables, inundaciones –sobre todo de las cabinas subterráneas de teléfonos–, nuevos impuestos para 1969, nuevo libro de Cortázar tremendamente castigado por toda la crítica, pero siempre al tope de las estadísticas de venta, atenuación de los asaltos a los bancos compensada con una novedad; secuestros de chicos rescatados con millones y luego descubiertos y, entre ellos, un nieto de Civita el de abril ($9.000.000 m/n) y un episodio que a no ser por los antecedentes del actor hubiera sido sensacional: en la Recoleta se hace un homenaje al Gral. Arturo Ossorio Arana (su tumba aún tiene tufos alcóholicos), están presentes Rojas, Aramburu (este en calidad de orador “ciceroniano”), el Comandante en Jefe Gral. Lanusse, toda la plana mayor de 1955, tropas de las 3 armas, etc., etc. y, de repente, comienza a sonar vigorosa y destempladamente allá en lo alto la campana mayor de la iglesia de la Recoleta, cuyo nombre olvidé; todos levantan la vista y entonces aparece un hombrecito en la ventanilla del campanario que con un altavoz grita: “traidores, fariseos, asesinos de la democracia y el pueblo, vende patrias, etc.”: era Patricio Kelly.
Estamos ya mudados a Conesa, pero vivimos en Ranelagh; el dto. es muy lindo, pero recién estará habitable dentro de un mes.
Enrique y Anita volvieron; el diagnóstico de los especialistas europeos confirma el de los nuestros, aunque sin darle la gravedad del de aquí o siendo menos pesimistas. Lo cierto es que él continúa con los mismo síntomas quizá más visibles ahora porque ya no intenta disimularlos.
Hubo un escándalo artístico criminal del que tendrán noticias por los recortes que agrego; extravié una nota muy extensa de La Razón sobre el mismo asunto y una solicitada muy discreta firmada por artistas y escritores, pocos, en la que sin considerar el asunto en sí mismo levantaban la imagen de Vogelius en tanto mecenas y amigo de las artes. Ya salió en libertad, lo vimos cenando en la Cantina dei Piacere; Francione, que debe estar bastante bien informado sobre el asunto, me dijo que arreglar la cuestión le costó al Mecenas: $100.000.000 m/n. Es probable, porque desde el punto de vista criminal, al tener el antecedente de la condena a año y 8 meses, condicional, por encubrimiento del robo de los Goyas de la colección Ugarte, en 1946, su situación procesal era muy brava.
Le agradezco los catálogos de la Sala Gaspar, que efectivamente no tenía, aún no han llegado. Como Ud. verá, mi querido Seoane, esta es la ventaja que tienen los que no ocultan su colección, al contrario, la exhiben, alardean de ella y consiguen así que los habituados a ver bibliotecas como Ud. tengan el recuerdo óptico de lo que falta. Si fuera a la inversa, en mi caso, todo sería mero azar.
Con esto y un bizcocho, hasta...
Jacobo Muchnik me envió desde Barcelona el tomo II de la Colección Juan de Juanes de Papeles de Son Armadans dedicado a P. resultó ser la primera edición, 1962, del libro de C. J. Cela, Gavilla de fábulas..., ej. N: 563, maravillosamente impresa con los tipos y adornitos que usa la revista, en un papel P., especialmente fabricado por Guarro y usado por primera vez en dicha edición, con la clásica firma de P., en letras de agua, y alternando, en una página un sol y en la otra una gavilla, especialmente dibujados por P., también en letras de agua. El todo encuadernado en una tela gruesa, tipo arpillera, rubia, totalmente limpia de letras o dibujos. La reproducción de los dibujos, y los colores, adquieren en este papel una calidad estupenda; se tiene miedo de dar vuelta a la página, por temor de que se corra el trazo o se perjudique el color.
Queridos Luis y Maruja, mil perdones, termino aquí, tengo mucho trabajo, en enero les escribiré más.

Bernardo

[Manuscrito:]Las jarras, aún en el puerto, se armó un lío kafkiano; Lipa no pudo resolverlo y ahora estoy trabajando de hacerlo yo; veremos que pasa. Calculan un derecho de importación de $150.000

[Manuscrito na marxe dereita:] Cariños de Claudia y Pablo que nada solo, sin salvavidas!

1969-02-09 Mencionado/a
Carta de Lublin a Luís e Maruxa Seoane. 1969
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Lublin a Luís e Maruxa Seoane. 1969 en 09/02/1969


Buenos Aires, 9-2-69

Mis queridos y añorados Luis y Maruja:

Esta es, creo, la primera carta que yo les escribo. Todavía no sé por qué me cuesta tanto hacerlo, no con Uds., sino en general. Pero es tanto la falta de Uds. que tengo que esta es una forma de compensar las charlas que solíamos tener.
Yo regresé de Europa el 30-12-68, justo para pasar Año Nuevo con los míos. El viaje fue en todo sentido estupendo y, como todo viaje, siempre deja un aprendizaje, o sea, a uno le permite revalorizar lo auténtico y lo otro desaparece solo. Esto es una manera más que pobre de manifestarte Luis, una vez más, la profunda admiración que siento por ti y por tu obra, la autenticidad de toda, tu vida como artista. Tal vez suena esto un poco a romántico. No es así. He visto tanta y tanta pintura, y tan poco lo que realmente uno, modestamente, cree que es rescatable que yo me he preguntado más de una vez porque un APPEL o uno de KOENING ocupan el lugar que tienen y un artista como tu no está aún en los grandes museos de Europa.
Es algo que me tengo cuestionado hace rato y no encuentro una respuesta que me conforme.
En fin, el problema es más serio de lo que uno tal vez piense, lo mismo que el mercado nuestro, galerías, coleccionistas; en fin, de todo esto creo que podemos hablar mucho a vuestro regreso.
De Bs. As. fuí a Bogotá, donde concreté para el mes de Octubre o Setiembre. Tú verás mejor que fechas te resulta mejor, una muestra en el museo de Arte Moderno, que dirige Marta Traba, la cual tiene un entusiasmo enorme; te admira enormemente y no son frases solas, pues te diré que es más que exigente en lo que ella presenta. Aparte es una mujer encantadora y de un talento poco común. Nuestra idea es que vayamos con Isidoro, Emma y Rafael y Uds. juntos a Bogotá. Sería lindo, no?
De ahí pasé a París, donde estuve 5 semanas de la cuales 4 días le dediqué a Amsterdam y 8 a Londres. Los museos de esos dos países son más excepcionales. Ver los Rembrandt y Piero della Francesca y Goya y Velázquez, etc., es de una emoción indescriptible. Vi en París una muestra de 340 grabados nuevos de Picasso, el cual todavía, a su edad, nos sigue deslumbrando. Pensé que te hubiera gustado verlos. Luego en Londres vi una retrospectiva completa, incluyendo 100 dibujos de Van Gogh, también sensacional. ¡Realmente fue un artista genial!
Me dio una pena enorme no verlos en Madrid, pero mi pasaje a esa lo tenía a mi regreso, por lo tanto ya no fui, pues no quería ir sola. Me vi con Raquel Edelman y me contó del encuentro de Uds. en Roma. Yo pasé unos días muy lindos con ellas en París.
Aquí, Bs. As., en esta época está un poco triste, sin grandes novedades. Cenamos unas cuantas veces con Emma y Rafael y mañana nos volvemos a ver. Nos van a leer la carta que recibieron de Uds. y como siempre la mayor parte del tiempo son el tema de nuestra conversación.
Pensamos irnos para Bariloche el 20 y estar de regreso para el 1º de mayo.
¡Ah! Me olvidaba agradecer el envío del libro. Es extraordinario, los grabados son una maravilla.

Reciban un abrazo bien fuerte

Julia

Queridos Luis y Maruja:

Sólo el paso del tiempo que me acerca a Ustedes es la parte gratificante por ahora, la futura será el raconto que Ustedes me harán del viaje. No sé porque o quizás si sé, pero es para decirlo y no escribirlo, quiero que nos inviten para ese raconto 3 veces, una para escuchar a la pareja, otra para beber del académico y otra para gozar sólo a Maruja.
La tranquilidad político-económica invade al país, pero es así porque también son invasiones las tiranías de las supuestas democracias-aristocracias de castas como las que tenemos, en las que asegurado el alimento y la diversión, la masa no siente ninguna otra necesidad social. Un muy hábil juego de impedir la formación de subcastas asegura aparentemente la continuidad del régimen que inclusive no busca crearse ninguna imagen popular, pero cuida si, sin que ni siquiera trascienda en las publicaciones semanales tan proclives a querer analizar la situación, que jamás las tensiones lleguen a ser individualizadas como tensiones y el margen entonces de inseguridad para el gobierno rota del campo laboral al universitario, luego pasa al otro, pero jamás se adiciona ni se producen 2 tensiones en 2 latitudes distintas al mismo tiempo. Sólo una muy velada lucha por el poder entre el ministro del interior y su colega en economía Borda versus Krieger Vasena se mantiene y en algunos niveles es tema de conversación.
Una fuerte campaña psicológica en el exterior exclusivamente de Krieger Vasena lo eleva quizás a un Borda que no sabe ni quiere? crearse imagen propia. En la caída del Franco Francés, el peso argentino como tal, es decir, como divisa fuerte ayudó a sostenerlo. Luego rechaza un ofrecimiento de continuar reservando el Banco Mundial 125 millones de dólares para sostener el peso argentino en el futuro por considerarlo innecesario y da su golpe maestro haciendo circular el rumor (que luego desmiente) que el peso será revaluado por vez primera desde que nació el país. Pero en cambio, comienza a emitir ya el “peso fuerte”.
Mientras tanto, la ciudadanía (me incluyo) idiotizada todavía lee que Ilia se reunió con colegas en un asado para estudiar la actualidad argentina. Brazil come manzanas francesas en vez de manzanas de Río Negro. Fiat compra Citroen en Francia y DKW en la Argentina.
Los pulpos siguen siendo terribles por su aspecto en el mar.

Abrazos de

Isidoro

1969-04-19 Mencionado/a
Carta de Seoane a Kornblith. 1969
Xixón
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Kornblith. 1969 en 19/04/1969


Gijón, 19 de abril de 1969

Sr. D. Isaac Kornblith
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estamos en Asturias y a muy pocos días, 10 o 15, de regresar a Buenos Aires, pasando unos días con mi hermana. Aquí, en Gijón, tengo una hermana y un cuñado, farmacéuticos ambos, con sendas farmacias, que aún tienen tarros antiguos con nombres medicinales en latín. Estamos a pocos kilómetros de la cuenca minera donde también tengo una prima hermana farmacéutica. En la ciudad, de muy vieja tradición y más que milenaria, todo está negro de carbón, las fachadas de los edificios, las calles y el puerto. Todo huele a carbón. Los antiguos escudos heráldicos, de rancios palacios de piedra carcomidos por la sal del mar, tienen carbón. Como si el carbón lo fuese aquí todo, y lo es, o, mejor dicho, lo fue hasta hace muy pocos años. Ahora se están cerrando minas en una y otra parte de Asturias y se crean fábricas de otros productos que dependen en parte de grandes empresas europeas o yankis y que no rinden lo que se espera. Gijón tiene una gran playa, unas estatuas de sus hombres más ilustres, el rey Pelayo, supuestamente asturiano, lo disputan los gallegos, el de la Reconquista contra los mahometanos, y la de Jovellanos, un gran prócer de la Ilustración Española de fines del XVIII y comienzos del XIX, en sus comienzos jacobino y afrancesado, amigo de Goya, preso y desterrado por la Inquisición y que escribió muy bien sobre casi todo: economía, sociología, política... y que, naturalmente, influyó en España y en los que libertaron América, lo mismo que Feijóo, tanto como los enciclopedistas franceses, y los libros prohibidos que, en el caso de la Argentina, iban de La Coruña a Buenos Aires en el “Correo del Río de la Plata”. Pero todo esto es historia. En la mentalidad de las gentes para la vida diaria esto no cambió demasiado desde los tiempos de Jovellanos. Solamente se incorporaron a los hábitos ciudadanos los nuevos productos industriales y el automóvil para pasear el ocio de los días de fiesta. Pero la mentalidad es casi la misma, treinta años de una política les hizo volver atrás un siglo o dos, en cuanto a determinadas cuestiones y la gente de aquí como la de toda España, marcha al norte de Europa. Es curioso este irse de la gente al norte en Europa. En cierto modo, pasadas muchas generaciones es una vuelta en parte a los lugares de orígen, pues en las múltiples mezclas de las sangres españolas están las de los pueblos que vinieron del norte, de las orillas del Báltico, o del que que se llamó Germania, de los godos, de los vándalos, los suevos, alanos... Ahora vuelven los nietos, los tartaranietos de una parte de esa sangre a servir de peones y el éxodo parece no tener fin. Pero de todo esto ya hablaremos a nuestro próximo regreso. Estos días, el lunes, saldremos para Madrid donde esperamos encontrarnos con Frontini.

Reciban Sima y usted, y todos los amigos comunes, un abrazo grande de Maruja y mío:

[Seoane]

1969-11-09 Mencionado/a
Carta de Falcini a Seoane. 1969
Milán
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Falcini a Seoane. 1969 en 09/11/1969


Milano, 9 de Noviembre de 1969

Querido amigo:

He tomado contacto con España a través de Dolores [Ibárruri], magnífica mujer, un gran espíritu de lucha, una gran nostalgia de su patria que alimenta su razonado optimismo fundado en actualizada información. Pasé una hora oyéndola vibrar.
Luego, Madrid, hermosa ciudad, recorrida con la cordialidad de Maiztegui. Los amigos suyos y de Frontini, Marcial Suárez, Manolo y Joaquin, amigos que me trataron muy generosamente, recordándolo a ud. mucho con mucho cariño. Además, el Prado -Goya en su época negra, que lo hace único con el plafón de San Antonio de la Florida.
Y las artesanías de América, en especial de México, arte popular de inagotable ingenio y belleza.
A continuación, Santiago con su Magnífico Pórtico de la Gloria que he visto largo de tiempo, con la colaboración de su amigo el profesor Piñeiro y de nuestro amigo Díaz Pardo y su mujer Carmen, mostrándome los encantos de su taller de Osedo, prolongados en el taller de construcción circular, en compañía del arquitecto constructor. Allí vi trabajar simultáneamente a las artesanas del lugar en la ejecución de hermosas piezas y me enteré de muchas cosas agradables en las que Ud. tiene intervención. Y todo esto, con un hermoso paseo costeando las rías y el amplio paisaje de Coruña, tan hermoso como inesperado. [Del] bello espectáculo de las arquitecturas románicas, pasé a otras igualmente medioevales e históricas, las de Barcelona, vistas de noche con su amigo Losada, profesor que me habló con gran inteligencia de la situación. Y más tarde, con Audivert y su exposición en el Instituto Francés. Ahora hago una pausa con Badi para salir muy en breve para Roma. Allí espero ver a Alberti y volar para Buenos Aires enseguida.

Hasta muy pronto, reciban un gran abrazo Ud. y Maruja de su amigo de siempre.

L. Falcini

1970-02-03 Mencionado/a
Carta de Seoane a Sofovich. 1970
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Sofovich. 1970 en 03/02/1970



La Coruña, 3 de febrero de 1970

Sr. D. Bernardo Sofovich
Buenos Aires

Mis queridos amigos Bernardo y Elsa o Elsa y Bernardo:

Estamos en La Coruña desde el día 15 de enero gozando de la buena y tenaz lluvia de Galicia a veces, hoy mismo, con grandes vientos del Atlántico. Éste era un fin del mundo antiguo y algo recuerda ese fin en las inmensas olas que azotan las rocas del mar de los Ártabros, que así se llamó este mar, o mar del Orzán, como ahora se le dice. Trabajo. Hice tres nuevas cabezas de las grandes para porcelana, el marqués de Sargadelos que fundó la primitiva fábrica a fines del siglo xviii; Pérez Galdós, cuyo centenario se cumple este año; y Pablo Picasso. Tengo en proyecto hacer estos días la de León Felipe. Puede resultar con todas estas jarras una iconografía curiosa bastante extraña. Junto con ellas, haré una pieza de aproximadamente un metro de alto, Tres soles en Galicia que recuerda, únicamente en el título, los tres soles que en la Edad Media divisaron en el cielo gallego los campesinos con natural sorpresa y espanto. Pensaron en un anuncio del Fin del Mundo. Creo que en el Mediterráneo nunca vieron tres soles, solamente uno quemante y permanente. En este país de lluvias y nieblas, en cambio, como compensación, se vieron en un solo día tres soles. Pues bien, ésa es una pieza de porcelana que haré, los tres soles, otra, también de aproximadamente un metro de alto, con tres gaviotas, o cuervos marinos, ya veremos, como las que abundan en estas costas. Desde que salimos de ahí, apenas vimos sol. La lluvia nos sigue, primero en Londres, luego en Barcelona y Madrid y ahora aquí, pero la de aquí la esperábamos, no la de Barcelona y Madrid. En Barcelona, vimos nuevamente el Museo Picasso, con unos grabados nuevos y próximo a ampliarse. No vi publicaciones nuevas sobre Picasso o no vistas en Buenos Aires, tampoco en Londres, donde vimos en la Tate Gallery algunos Picassos que hace años no estaban allí, seguramente de reciente adquisición aunque sean anteriores, en la obra picassiana, al año 50. Poseen una excelente colección de Picassos no muy nueva, pero muy bien seleccionada. Pero cada vez que se vuelve a ver el museo de Barcelona, la serie de las Meninas, esa serie realmente espléndida y no demasiado comprendida, se da uno cuenta del valor de esta colección. Los grabados vistos allí en cantidad, tal como son, en su tamaño verdadero, a veces primeras pruebas luego corregidas, dan perfecta idea de la grandeza de Picasso. Ningún pintor llegó a la libertad suya ni imprimió a su obra tanto talento, todos resultan limitados a su lado, solamente Goya y el Ticiano si hubiesen vivido en nuestra época o hubiesen comenzado a pintar como al final de su vida cuando sólo tenían 35 o 30 años, cuando ya sabían que la pintura era un lenguaje, menos oficio que lenguaje, y que el pintor se expresa escribiendo con signos y colores como Zorba el griego se expresaba danzando. Todo cuanto Picasso tuvo que decir acerca del mundo cabe en muy pocos temas, pero, ¡cuánto dijo a través de ellos! Pero no quiero continuar sobre esto. No quería nada más que saludarlos, sospecho que estarán en Punta del Este, pedirle a Bernardo que me escriba, precisamos noticias de ahí, y decirles que una parte del día lo pasamos viendo romper las olas contra las rocas, pasmado de que la libertad del mar tenga también contención.

Un gran abrazo para todos y para los dos de:

[Seoane]

1970-02-04 Mencionado/a
Carta de Seoane a Falcini. 1970
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Falcini. 1970 en 04/02/1970


La Coruña, 4 de febrero de 1970

Sr. D. Luis Falcini
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Estamos nuevamente en Galicia luego de un mes aproximadamente entre Londres, Barcelona y Madrid. Por mi parte comencé a trabajar realizando algunas piezas para porcelana y pintando. Para el mes de Abril expondré en Madrid, en una galería nueva y debo ilustrar para una editorial de Madrid el Martín Fierro. Es posible que salga un Martín Fierro bastante galleguizado pero me agrada la posibilidad de hacerlo. Tengo que hacerlo antes del 15 de marzo.
En Londres vi nuevamente el Museo Británico, la Tate Gallery y algún otro Museo. Ví nuevamente todo lo que guardan de la escultura asiria, egipcia y oriental en el Museo Británico. Las maravillas egipcias y esos fantásticos leones alados asirios que convierten en ridículos los leones británicos y españoles de los escudos y de las entradas de los paseos. No sé como pudo ser la pintura, o, si lo sospecho, por los ejemplos que quedan, cae uno en la cuenta que la monumentalidad estuvo en aquella época solamente a cargo de la escultura.
Claro que esto ocurrió siempre que se hizo escultura monumental y pintura mural. La pintura no pudo, nunca, pienso, competir en grandeza con la escultura. Fué siempre más ilustración, procedimiento dedicado a la enseñanza más que dedicado a imponerse al espectador como en esas esculturas asirias, o esas otras gigantescas figuras egipcias. No se trata de cual arte sea superior, como se discutía hace tres siglos o algo más. Son artes distintas con fundamentos comunes.
En Méjico los relieves que se conservan de las viejas civilizaciones indígenas poséen una fuerza no alcanzada, a mi juicio, por ninguno de los muralistas de este siglo. Esas cabezas de guerreros o esas serpientes aladas, o algunos de los dioses que representaban se convierten en alegato ilustrativo a través de Ribera o de Siqueiros en un arte menos impresionante, sereno y eterno. No es igual una armadura de metal que su dibujo. Las simulaciones de la pintura no recrean la naturaleza. La escultura la eterniza. A medida que pasan los años me atrae más la escultura cuando es tarde para intentar hacerla.
En Barcelona volví a ver el Museo Picasso y el de arte románico e incluso fuí al Museo del Traje recién inaugurado, espléndido, abarca desde el siglo XVI hasta comienzos del XX y en él se representa la necesidad del ornamento que sintió siempre el hombre. A través del traje va uno identificando a las gentes de distintas épocas de acuerdo con la historia del arte. Encuentra las correspondencias a los gustos de época. Se encuentra el traje que corresponde a Velázquez o los hermanos Le Nain, o el que corresponde a Fragonard o a Goya, y no porque estos pintores los hubiesen copiado, sino porque corresponden a sus estilos, como los de comienzos del siglo XX son modernistas o Art Noveau, o como quiera decírsele.
Bueno, todo esto es una disquisición que tiene por objeto decirle algo de nuestra vida a usted y a los amigos y pedirles que nos escriban.

Un gran abrazo con saludos para todos de Maruja y mío:

[Seoane]

1970-02-11 Mencionado/a
Carta de Seoane a Blum. 1970
A Coruña
Nova York
Olivos
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Blum. 1970 en 11/02/1970


La Coruña, 11 de Febrero de 1970

Sr. Sigwart Blum
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Hace más de mes y medio que salimos de Buenos Aires y apenas he escrito a nadie. Estuvimos en Londres, Barcelona, Madrid, antes de llegar a La Coruña donde comencé a trabajar los primeros días de enero. Hice cuatro cabezas grandes para jarras de porcelana, de intelectuales españoles heterodoxos, uno del siglo XVIII que retrató Goya, Antonio R. Ibáñez, de la Ilustración Española, progresista en su época, y tres contemporáneos, el novelista Pérez Galdós, diputado republicano con la monarquía, odiado por los beatos y en general por la iglesia de principios de siglo; Pablo Picasso y el poeta León Felipe, fallecido éste en México hace año y medio aproximadamente, que fué un gran poeta del destierro. Me gusta hacerlas y sospecho que resultará de todo ello una extraña iconografía, siguiendo además, me gusta pensarlo, una línea popular y tradicional de los “múltiples”, tan en boga en nuestros días, los míos hechos en porcelana. Para el mes de abril tengo una exposición en Madrid y antes del 15 de marzo debo entregar a una editorial madrileña una buena cantidad de ilustraciones al Martin Fierro. No deja de ser curioso que me encarguen a mí estos dibujos, pero creo que los haré con gusto, pues aún no empecé con ellos. En Barcelona volví a ver el Museo de arte románico y el Museo Picasso que lo van ampliando, pues aumentó en óleos y grabados últimos. En Londres la maravilla del Museo Británico, sobre todo las salas de primitivas civilizaciones.
De Buenos Aires no tenemos apenas noticias, nos gustaría tener más pero sospechamos que son meses malos para tener cualquier género de noticias de los amigos por estar de vacaciones, muchos estarán en las playas o viajando. En nuestro caso hemos padecido frío bastante intenso en Londres, Barcelona y Madrid, en La Coruña menos y lluvia en las cuatro ciudades, con solo tres o cuatro días de sol desde que salimos de Buenos Aires. En Galicia es natural la lluvia, es país de lluvias, pero en Barcelona y Madrid no, y sus habitantes están en general perplejos. Algunos piensan en la influencia en la atmósfera de los cohetes y otros objetos lanzados desde la tierra. Es posible que algunos crean en el fin del mundo o en la proximidad de otro nuevo diluvio universal. ¿Qué salvarían ahora los hombres para una nueva Arca de Noé?
Bueno, no quiero hacer más larga esta carta. Quisiera pedirle que me escriba, que me guarde la revista alemana sobre ilustración con su artículo. Reciban su señora, los suyos y usted un saludo muy cordial de Maruja y mío, con un abrazo para usted de:

[Seoane]

1970-04-20 Mencionado/a
Carta de Seoane a Pagano. 1970
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Pagano. 1970 en 20/04/1970


La Coruña, 20 de abril de 1970

Sra. Sarita B. de Pagano
Buenos Aires

Querida amiga:

Debo carta a muchos amigos entre ellos a usted. Esta vez escribí muy poco, o nada o casi nada, a todos ellos. Por trabajo, por pereza, por aquello que no vale la pena disculparse porque suena demasiado a eso, a disculpa, a pretexto de disculpa. Efectivamente trabajé hasta ahora mucho, se lo conté a todos los amigos y a Falcini, a Scheinberg y ahora acabo de hacer una exposición en Madrid con mucho éxito, se cerró el 15, muy buena crítica y mucho público; tambien algunas ventas. Madrid crece mucho por la emigración interior y porque se lo propuso así el actual gobierno que quiso aplastar a Barcelona y crear una capital sin igual en España, en tamaño y habitantes, al centralismo. Pero el centralismo se está derrumbando de podrido, de inepto, y Barcelona continúa siendo la ciudad más inquieta en bastantes órdenes, de España. En Madrid sin embargo se han abierto nuevas galerías de arte en los dos o tres últimos años y la preocupación, en lucha, por los asuntos culturales, vuelve a tener el vigor anterior a la guerra civil. En los días de comienzos de este mes estuvimos allí, vimos una extraordinaria exposición de pintura italiana del siglo XVII traída de todos los museos de España y que reúne centenares de obras maestras. Se hubiese podido hacer un gran museo con todo lo presentado. España es, ya se sabe, el país europeo que contiene más pintura italiana de esa época luego de Italia, muy bien seleccionada además. Casi siempre fueron pintores los que seleccionaron. Velázquez fué el que hizo traer a España al Ticiano, al Tintoretto, etc., y los reyes y la iglesia del pasado fueron siempre exigentes en cuanto a los encargos. Por otra parte la pintura italiana influyó mucho en determinadas épocas en la española y precisamente su influencia fué mucho más señalada, creo, en el siglo XVII con el Caravaggio y los tenebristas, los Carracci y los manieristas, etc. En esta época dominada parte de Italia y [sic] muchos pintores italianos acudían a Madrid donde trabajaban en la Corte o para la iglesia. Hay excelentes obras de arte italianas en paredes de España y multitud de cuadros excelentes que hasta ahora no se habían mostrado juntos. Es esa, continúa abierta, una gran exposición. Estuvimos nuevamente en El Prado, mejorado en muchas salas, mejorada la iluminación y ordenado de nuevo los dibujos de Goya, puestos antes en vitrinas muy feas.
Estas son unas pocas noticias que envío ahora. Ya hablaremos de todo esto a nuestro regreso. Desde una ventana estoy viendo un mar casi violeta en la línea del horizonte, y verde y plata junto a la costa. Llueve y hace sol, alternando sol y lluvia. Enfrente hay una escuela y los niños se recrean jugando a la pelota. Muchos de ellos, quizás la mayoría, sean, dentro de 8 o 10 años, emigrantes como muchos familiares suyos, cumpliendo el destino fatal de los gallegos.

Un gran abrazo de Maruja y mío para los suyos y para usted, para Nélida, Anita y todos los amigos comunes:

[Seoane]

1970-06-09 Mencionado/a
Carta de Seoane a Negri. 1970
Bos Aires
París
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Negri. 1970 en 09/06/1970


Buenos Aires, 9 de Junio de 1970

Srta. Nélida Negri
París

Mi querida amiga:

Recibimos su carta en La Coruña cuando estábamos dispuestos a salir para Asturias a visitar a mi hermana, y a Madrid para embarcar de regreso a esta ciudad. Llegamos a Buenos Aires el sábado dia 6, aún no hablé con Tomás, tan preocupado estoy de no haber contestado a su carta en tiempo debido que me apresuro a hacerlo. Los últimos días de España fueron dedicados a despedirnos de familiares y amigos y con toda nuestra buena voluntad no pudimos hacerlo con alguna gente a la que ahora debemos escribirles. Sentimos mucho no haber coincidido en Galicia.
Se inauguró la fábrica de porcelana, para la que había hecho en otros viajes algunas piezas. Está enclavada entre montañas, en la loma de una de ellas, y se construyó siguiendo las viejas formas circulares célticas que aún se conservan en esa parte del país gallego. Tambien se inauguró un pequeño museo de pintura gallega que creamos un amigo mío, Díaz Pardo, y yo, está a 14 ó 15 kilómetros de La Coruña y reúne aproximadamente 120 piezas. Quiero decir que, aparte de pintar, hice una exposición en Madrid con mucho éxito, y de hacer nuevas piezas de porcelanas, hice jarras-bustos, de un personaje gallego de fin de siglo XVIII, J. M. Ibáñez, que había retratado Goya, de Picasso, Antonio Machado, León Felipe y Pérez Galdós, y de ilustrar el Martín Fierro para una editorial madrileña con más de cincuenta aguadas, estuve trabajando en otras cuestiones.
Nos hubiese gustado a Maruja y a mí haber coincidido en Galicia. Esta vez no pudo ser, pero esperamos que el próximo año pueda realizar este viaje desde París o desde Buenos Aires.
En Madrid se celebra estos días una gran exposición de Alberto Sánchez, un gran escultor abstracto español de los años 30, que murió exilado. Aquí, en Buenos Aires, aún no hemos visto nada. Solamente una espléndida exposición de arte africano en el nuevo local de Bonino.
Ayer fué depuesto Onganía. Creo que casi nadie los sintió. A pesar de todos estos golpes de Estado por mi parte continúo creyendo que este es un gran país, desorganizado, disparatado, pero con gente, tambien disparatada, desorganizada, criticista, con muchos defectos si uno quiere, capaz, inteligente. Se improvisan en cualquier cosa y son capaces de intentar lo imposible con mucha naturalidad.
Bueno Nélida, perdónenos a Maruja y a mí por no contestar cuando debíamos. La falta de contestación nada tiene que ver con el afecto que le guardamos y las ganas que tenemos de estar con ustedes. Un saludo muy cordial de Maruja y mío:

[Seoane]

1970-08-13 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1970
Bos Aires
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1970 en 13/08/1970

Buenos Aires, 13 de agosto de 1970

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro

Querido Isaac:

Recibí la tuya del día 30 del pasado mes. Al fin recibo una carta tuya que resulta carta, con noticias y todo. La de Marcial, por ejemplo, interesado por el hijo de Joaquín León y sobre el cual me comprometí a hablarte y creo que no lo hice el último día que hablé por teléfono contigo desde Madrid. De cualquier manera me alegro que hubieses atendido la recomendación de Marcial. Es posible que el chico pueda encontrar un camino en Sargadelos. Recibí los libros, el de Eloísa Villar y el Casado Nieto. Con respecto a Sargadelos, lo recuerdo con referencia al último libro, el dibujante gallego-argentino José María Cao, publicó en El Eco de Galicia de Buenos Aires, a fines del siglo pasado, un trabajo monográfico. Lo acabo de leer en un artículo que se publicó aquí sobre él. Recuerda que su padre trabajó allí y él mismo de niño. Estoy casi seguro que el Cao a que se refiere la firma que se recoge en el libro es del padre. Ya sé que esa zona existen muchos de apellido Cao, pero, en aquella época, existían como es natural muchos menos y que se dedicasen a estas cuestiones solamente uno o dos. El hijo no concedería tanta importancia a Sargadelos si el padre y él mismo no hubiesen trabajado en esa fábrica o lo hubiesen hecho en condiciones muy inferiores. El Eco de Galicia debe encontrarse en la biblioteca de la Academia. De todas maneras toma nota de esta cuestión para la bibliografía sobre Sargadelos.
Estuve en Montevideo. Vendieron toda la porcelana. Para normalizar la entrada al Uruguay de ella tienen que enviar El Castro y Sargadelos, por separado, sendas cartas haciendo donación (aparente) de ellas a una sociedad gallega con personería jurídica, creo que piensan en la de Santiago de Compostela. Te escribirán. Participé en un acto extraordinario de homenaje a Castelao. La exposición de dibujos y grabados buena en general. Beatriz y Rosendo de los mejores, más claros que casi todos en casi todos los caminos de expresión que escogen. Si hubiesen enviado precios habrían vendido también gran parte de la exposición. Estos días estuvimos en La Plata en la inauguración de una exposición mía. Mucha gente. La Plata cambió bastante con el complejo petroquímico que se instaló allí y la siderurgia. Se afirma que en tres años más habrá duplicado su población. El camino entre Buenos Aires y La Plata, con el nuevo y espléndido puente de Barracas y el ancheamiento de la carretera poblada a los lados de churrasquerías (huele todo a asado) también está desconocido. Hacía años que no la transitábamos. Estuvimos con Camilo que estaba muy bien y contento de sus estudios.
Estuvimos en el estreno de Romance de Lobos representado por primera vez en lengua castellana por una compañía argentina. Extraordinaria la puesta en escena. Parecía surgir monumental el mundo de Goya de la Quinta del Sordo. Estos días está actuando aquí el “Teatro en Negro” de Praga. Parece ser un espectáculo inusitado, una nueva experiencia teatral. Está de paso para Expo 70, en Tokio. En cuanto a la exposición del Bauhaus de que te escribía en una de mis cartas, solamente se expuso en Alemania, París, Chicago y ahora se expone aquí y termina en Tokio. Es la más importante que se hizo hasta ahora pues recoge todo lo adquirido a los colaboradores o a sus familiares y ocupará todo el Museo de Bellas Artes de aquí, incluyendo la parte nueva. La que tú has visto es la misma que yo vi aquí en Buenos Aires y luego en Roma y de la que tengo catálogos de Roma y de aquí. Esta se hizo en Chicago y no en Nueva York porque allí continuó su actividad durante un par de años con algunos profesores, Moholy-Nagy entre ellos, como también Gropius. El catálogo en castellano se anuncia como un verdadero documento de la influencia que alcanzó el Bauhaus en el mundo. Vienen con la exposición los profesores Bayer y Hans Wingler, Schmalenbach y la viuda de Gropius. Luego de Tokio regresa a Alemania donde se convierte en museo permanente. Veniros en septiembre a Buenos Aires. Codex quebró en España. La petición de quiebra parece ser que la hizo Códex de Buenos Aires. Todo esto es un negociador que no tiene nada que ver, o poco, con la industria editorial.
A la exposición de la Sala de Arte de Madrid te ruego no envíes nada mío. Desde que comencé a exponer jamás quise participar de exposiciones colectivas. Solamente lo hice cuando, de alguna manera, tenía que ver mi pintura con la de los otros pintores que exponían, como tiene que ser, o cuando las finalidades eran de orden político. Con María Antonia Dans y con algunos que seguramente expondrán ahí no me une nada. Por aquí anduvo representando a Cultura Hispánica. No debería repetirse lo de la muestra de Don Quixote que supongo querrán hacer. No creo que tenga finalidad alguna como no sea probar una vez más a los madrileños que “los pobrecitos” gallegos también pintan y tienen asentados en Madrid dos o tres genios a los que se perdonan por gallegos un poco caciques.
De los invitados del Centro Gallego quedó muy bien intelectualmente, sereno y justo en sus informaciones, Basilio Losada. Muy mal Naya, que trató de no opinar escudándose en su posición de funcionario, pero ganó fama de gracioso contando anécdotas y chistes entre los directivos del C. Gallego Te digo lo que me dijeron pues yo no estuve en ningún acto. Losada creo que va a ir pronto por Sargadelos. Para el Museo está organizándose una exposición de grabado argentino que creo va a ser interesante, pero no podrá ser hasta fin de año. Por mi parte te enviaré todo lo prometido. Aquí me encontré con algunos encargos que debo cumplir urgentemente aparte de mi exposición en el mes de septiembre. Me alegro que reconozcas que son “viejos”, los Fole, etc., los que dan importancia verdadera al esfuerzo cultural que se realiza y que se lleva a cabo. Ellos lucharon por estas cuestiones y sufrieron por ellas aunque ahora algunos se sienten vencidos. Pero fue la mejor generación que tuvo Galicia, aparte individualidades como generación, y la más informada sobre Galicia y el mundo. No olvides a Colombo viniendo de Valencia a la inauguración del Museo

Un abrazo fuerte para Mimina, para ti y para todos y otro más de:

Seoane

Nota: Dime algo del Museo. ¿Se proyectan películas? ¿Estáis en contacto con las embajadas? ¿Se consigue la exposición Picasso? ¿Hubo nuevos donativos?

S.

1971-08-31 Mencionado/a
Carta de Seoane a Girri. 1971
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Girri. 1971 en 31/08/1971

La Coruña, 31 de agosto de 1971

Sr. Alberto Girri
Buenos Aires

Mi querido amigo:

Recibí tu carta, una espléndida carta, de hace dos meses y que te agradecí mucho. Desde entonces ya “salió” la jarra-busto de Rosalía, terminé la de Pablo Casals e hice algunos nuevos objetos, con figuraciones, claro está, también para porcelana. Inauguramos una nueva sala del Museo que fundamos Díaz Pardo y yo, que no sé si tú sabes de él, e inauguramos una galería de arte con grabados de Picasso y Miró. Todo esto llevó tiempo. El museo está en una aldea a diez kilómetros de La Coruña y dedicado a pintura gallega a partir de la generación gallega del 30 hasta los más jóvenes. Es en realidad, un museo de arte moderno gallego, pero prescindimos de la palabra moderno, que en realidad no explica nada. Con algún amigo turista, recorremos toda esta zona de la costa gallega, con alguna salida a la montaña, nada conocida del turismo, más bien conocida por muy pocos y mucho menos, naturalmente, que por los invasores vikingos y los piratas ingleses. Galicia es una enorme sorpresa. Tan pequeña superficie y tan cargada de arte, historia y leyendas y tan desconocida hasta del resto de los peninsulares.
Me gustó mucho tu poema Lección de lo inmóvil y la frase de un verso, lo duradero es estático es de una exactitud extraordinaria. Duraderas con las esculturas asirias y egipcias, desde ellas la escultura decae, y las pinturas románicas y las de Piero della Francesca y las de Velázquez. Lo que se llama movimiento en pintura no existe más que como tema, Goya convirtió en estáticas a las brujas para siempre, y los persas y los turcos a esas figuras que conducían camellos y que andan sobre arena, pero que se detuvieron para la eternidad porque la mano de un artista así lo quiso, deteniéndolos en esa actitud determinada. Cuando regrese a Buenos Aires, te daré a leer un ensayo de un pintor gallego fallecido hace años, Carlos Maside, sobre el estatismo en arte. Un ensayo curioso donde compara retratos populares de campesinos con obras de arte de hoy y del pasado y a propósito del estatismo. Estáticas son las representaciones de (¿Burr?) y las de esa Virgen con Cristo en el regazo. Estática es la doctrina que propugna La lámpara maravillosa de Valle Inclán y la del Padre Molimos, en Castilla. Discutiré contigo tu programa exaltando el anacronismo. Todos somos anacrónicos de nacimiento. Esa es nuestra diferencia y nuestra libertad. Ocurre que nos pasamos la vida anulando nuestra individualidad, nuestro anacronismo. Algunos ancianos en eso que llaman la segunda infancia vuelven a ser anacrónicos, libres, pero ya es tarde.

Un abrazo de Maruja y mío para Aurora y para ti:

[Seoane]

1971-09-02 Mencionado/a
Carta de Seoane a Pagano. 1971
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Pagano. 1971 en 02/09/1971


La Coruña, 2 de setiembre de 1971

Sra. Sara B. de Pagano
Buenos Aires

Querida amiga:

Llevamos bastante tiempo en Galicia y no hemos escrito muchas cartas por razones que solo se explican por el trabajo desordenado que hube de hacer y con el que tuvo que ver la necesidad de ilustrar algún libro de amigo, de hacer jarras de porcelana, el aumentar con una sala el Museo que hemos fundado Díaz Pardo y yo, crear una Galería de arte para dicho museo, etc. Además de esto los compromisos de índole diversa y algún que otro viaje breve por el país. Todo esto, sin embargo, no nos hace olvidar a Maruja y a mí a los amigos de Buenos Aires y la nostalgia que sentimos de ellos y de la ciudad. Vamos sabiendo de casi todos por algún viajero que llega o por alguna carta, pero no sabemos nada de usted ni de Nélida, ni en general de todo el grupo excluyendo a Aída y Scheinberg. ¿Por qué no nos escriben algunas líneas? Ya sabemos que nosotros debimos haber escrito antes pero, bueno, lo hacemos ahora y quiero que me valga el no ser capaz de enviar tarjetas postales, que siempre compro y luego no remito porque no puedo hacer frases como “¡qué bonito es esto! Un saludo de...”. “Aquí, junto a los cuadros de Goya me acuerdo mucho de Vdes”, o “Cómo me gustaría que ustedes estuviesen junto a nosotros al pié del Partenón” etc., etc. Para redactar tarjetas postales hay que tener un talento especial que yo no tengo.
De la Argentina tenemos abundantes noticias políticas en los diarios de aquí, que además comentan abundantemente las declaraciones peronistas de los sindicalistas de la C.G.T., o las del Paladino o algún otro miembro del partido justicialista. Declaraciones, atentados y atracos son las noticias que llegan con más profusión, y, a distancia, produce una idea muy particular sobre la Argentina que a mi me parece más bien deprimente. En cambio por algún número aéreo de La Nación sabemos de las excelentes películas, exposiciones, etc. de este invierno cultural porteño y que nos produce envidia.
Por favor, envíen noticias de ahí, de los amigos, de todo. Un abrazo de Maruja y mío para usted, sus hijos y los amigos:

[Seoane]

1972-03-10 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 10/03/1972

Buenos Aires, 10 de marzo de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro

Querido Isaac:

Contesto a tus dos últimas cartas. La primera, 23/II/72, en la que me envías fotocopia de una de Blanco Amor en la que quiere que le ilustre las farsas y le haga la tapa de la edición. De acuerdo, pero no tengo las farsas, y tampoco, aquí, Cartas a Lelo para sujetarme al formato y poder hacer la tapa. Tendrías que enviarme dicho formato y copia de las farsas o de las partes de ellas que consideres ilustrables descritas muy escuetamente de cada una de ella. A Blanco Amor le escribí hace días felicitándole por la designación de numerario en la A[cademia] Gallega.
La segunda carta del 1/III/72. Te agradezco la noticia del descubrimiento de los dibujos inéditos de Castelao en La Habana y, en cuanto al parentesco de esos originales con dibujos de Souto y Laxeiro no me sorprende. En los dibujos hechos en los álbumes de guerra, partir de éstos, se nota la inquietud de Castelao por cambiar su línea tradicional, la continuada y producto de estilizaciones que procedía de su lejano modernismo y usar el claroscuro y la línea quebrada. Souto, con sus centenares de dibujos hechos para las publicaciones más dispares en el 36 y 37, debió impresionar a Castelao, con Laxeiro coincide en esa admiración a Souto. Está muy bien visto de parte tuya. Goya fue la gran admiración de Castelao en ese periodo pero sobre todo el Goya ácido de las leyendas a sus caprichos. Me gustaría que le dijeses a Neira Vilas que hay en La Habana y hecho para la casa particular de Álvarez Gallego debe haber un mural mío ejecutado por Arranz que creo que es una de mis mejores obras de éste carácter. Quizá se conserve por el material. Había sido ya ordenado colocar por Álvarez Gallego no sé en qué parte de sus casa. Me gustaría saber qué fue de él. Álvarez Gallego estaba muy contento de esa obra, lo mismo que Arranz de su ejecución Está comenzando ¡al fin!, el otoño en Buenos Aires. Dos veranos seguidos es mucho. Trabajo bastante y no salimos de casa más que para ir al cine, reunirnos alguna noche con algunos amigos, o ir a casa de mi madre. Esto es todo. Me debes carta.

Un gran abrazo de los dos para ti:

Seoane

1972-06-02 Mencionado/a
Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972
Bos Aires
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1972 en 02/06/1972

Buenos Aires, 2 de junio de 1972

Sr. D. Isaac Díaz Pardo
Sargadelos

Querido Isaac:

Te escribí el día 22 de mayo, ahora lo hago muy brevemente enviándote el boceto para la pared de la pileta que tú me señalaste. El dibujo hay que acondicionarlo al alto de esa pared que no es mucho y, como indico en el boceto, debe repetirse. Se trata de un tipo de estrella de mar con tentáculos, muy estilizada. Queda de acuerdo con el modernismo del cantábrico gallego. Nada más. Escríbeme y envíame algún afiche de la exposición del libro y fotos de tu escenografía y figurines para Salvat. Aquí acabo de ver una de las más grandes películas de todos los tiempos, el Satiricón dirigida por Fellini, una película sobre todo para pintores, de una enorme belleza. Sus personajes, la fotografía, todo, habrían gustado enormemente a Goya, a Solana y a Ensor.

Un gran abrazo de los dos para ti:

Seoane

1972-11-28 Mencionado/a
Carta de Heredia a Seoane. 1972
Madrid
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Heredia a Seoane. 1972 en 28/11/1972


28 de Noviembre de 1972- MADRID

Con un pequeño susto en el bolsillo y gran entusiasmo circulatorio

Querido Seoane:

Le digo hola, en el mejor de mis días, producto de tantas privaciones y alienaciones argentinas –al fin y-al principio– con toda preocupación como es norma en la vida del pobre y la gran alegría que es norma en la vida de esfuerzos –de vaivenes– barcos-aviones y trenes.
No sé que es valedero si lo analizamos cósmicamente, pero lo que busco está allá siempre y quiero llegar a la punta del hilo, antes que el carretel se acabe.
Llegué a Madrid a las 11 de la mañana y son las 10 de noche. 8 días después de Barcelona y quien sabe cuántos antes de Madrid. Con muchos Picassos en la retina y halgunos apretones en mi centro neuropsi-cardico generosamente obsequiados por halgunas sensibilidades españolas que en halgo me recuerdan a mi bien amada “Latinoamérica surrealista y loca” (permitiéndome parafrasear a algún poeta amigo).
Aquí estoy, preparando mi pobre humanidad para recibir mi primer contacto con Goya, esperado, hoy lo creo, desde toda la vida.
Escucho las hojas del diario que Nati pasa en busca de un agujero que nos permite dormir por las pocas pesetas que nos quedan, porque ya gastamos más de la mitad en esos pequeños lujos que significan comer y dormir a través de una moneda devaluada.
Estamos vivos.
Con un “capotito” entre los dientes y una lapicera en la mano buscando la forma de decirle que todavía no hice nada, pero lo voy a hacer.
Vimos en la Gal. Sargadelos (Barcelona) un hermosísimo tapiz suyo junto a unas cerámicas igualmente hermosas que enseguida reconocimos y nos apresuramos a escudriñar.
Hoy es mi día feliz y quiero aprovecharlo hasta el caracú. Son tan pocas las ocasiones de anudarse con este cotizado sentimiento que mi capacidad receptiva a veces olvidada se derrama como un chorro cuando me invita.
No tengo un amor, tengo muchos, muchos amores repartidos por las tierras calientes, por las tierras frías, tengo amor por la muerte, y por la vida y por todo aquello que naturalmente me sorprenda la sensibilidad dormida –a estas cosas le estoy agradecido.
Hoy –me agradezco haber conseguido esto que me propuse conseguir porque me acerca a conseguir las otras cosas que me propuse– no me propongo pisar la tierra toda, pero sí toda la que pueda.

Besos de Nati para los dos.
De mí, todo.

Raúl Heredia

A carta contén debuxos de estrelas entre renglóns do segundo párrafo e ao final debuxa cara e coloca os 4 puntos cardinais.

1973-08-30 Mencionado/a
Carta de Palmás a Seoane. 1973
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Palmás a Seoane. 1973 en 30/08/1973

Buenos Aires, 30 de agosto de 1973

Querido Seoane:

Sin ánimo de despertar en su envidia le diré que la cartelera de cines está llena de buenas películas: He visto ya alguna de ellas. Estado de Sitio de Costa-Gravas con un planteamiento muy claro sobre la guerrilla urbana y un alegato contra la represión policial y la penetración de los servicios norteamericanos. Supongo que cuando vuelva aún estará en cartel, pues el éxito es rotundo. También vi Hermano sol, hermana luna de Zefirelli. Creo que no logró la gracia y la frescura de su Romeo y Julieta, pues confundió simpleza de espíritu –en este caso el de Francisco de Asís– con cursilería y, sin duda son dos cosas muy diferentes. Volví a ver Decamerón de Passolini esta vuelta hablada en italiano y napolitano con lo cual gana enormemente sobre la versión en inglés. Es un estupendo fresco popular y de época. Ayer estrenaron En el nombre del padre... una película de Bellocchio –el que hizo Cina é vicina– me gustó mucho, hay en ella un complejo planteo sobre la realidad social italiana enfocada en el pequeño mundo de un colegio católico. Naturalmente que con la excepción de Zefirelli ninguna de las otras películas podrá pasar la censura española. Por cierto hasta el momento la censura en materia de cine y publicaciones no funciona lo que ha dado como resultado el poder haber visto excelentes películas sin cortes y que los quioscos de diarios estén tapados de revistas más o menos eróticas que parece que nadie o muy pocos compran –según me dijo el diariero que viene a casa–. Asimismo hay algunas revistas con travestis y todas esas cosas. Que se le va a hacer vaya lo uno por lo otro.
Del mundo plástico poco o nada le puedo contar, pues con todas las cosas atrasadas que tenía y aún tengo no me quedó tiempo más que para ir al cine. Este sábado aprovecharé para ir a ver dos exposiciones que hay en Bellas Artes y en Artes decorativas. Una es con grabados de Goya (la serie de toros) y la otra es de grabados de Picasso sobre toros también. No sé si tendrá interés en los catálogos. De todos modos se los compraré. Todavía no me llegaron las cosas de Londres, supongo que no tardarán en hacerlo.
Hoy estuve con Alberto Vilanova, que se marcha a Galicia a fin de año pues quiere arreglar los papeles de su jubilación. El pobre estuvo muy mal con una afección renal que lo retuvo en cama un par de meses. Le encargué un trabajo sobre los exilados gallegos de América para publicar en un volumen colectivo sobre la emigración en el cual tendrá que colaborar Ud. y otros amigos. La cosa surgió así: casi al final de mi estadía en Galicia me entero que SEPT va a publicar un volumen colectivo sobre la emigración gallega actual, pensé que sería bueno hacer una parte dedicada a América. Hice una lista de autores y temas posibles y la idea fue aprobada. Martínez Romero hará los aspectos psicológicos, Pilar un trabajo sobre folklore gallego y argentino, Varela los artistas gallegos en América (no sé aún si aceptará), Zubillaga los gallegos en Uruguay, Pérez Prado se referirá al nombre gallego en América y yo cubriré los aspectos sociológicos. Como me acordé que Ud. tenía bastante material sobre los gallegos en México y prácticamente nada sabemos sobre ellos pensé que podría Ud. desarrollar dicho tema. El trabajo no deberá exceder las 15 o 20 hojas oficio a doble espacio y en gallego. Como a los editores les urge sacar el libro habría que tener listos los artículos a finales de noviembre. Espero que pueda colaborar en este primer libro sobre nuestra emigración a América que sale en Galicia, cuando ya el fenómeno es casi un hecho histórico.
Como broche final le diré que cuando llegué me enteré que las vestales de la Irmandade habían echado a rodar la especie que mi viaje se había hecho por invitación del gobierno español. Primero reaccioné violentamente pues la mentira es algo que me molesta mucho pero luego lo pensé bien y decidí reforzar mi total alejamiento de toda esta “xentiña” que alguna vez coincidió más o menos con nuestras vidas. Seguiré trabajando como siempre por Galicia y por su pueblo, que es el de mi sangre, desde lejos y como mejor pueda, tratando de salvar el recuerdo de su paso por estas tierras y ayudando, poco o mucho, a que el futuro no nos sea tan terrible como el pasado y el presente.
Si se solucionan unas cuestiones de tipo burocrático participaré en una experiencia muy interesante que se desarrollará en la frontera misionera con el Brasil. Como allí ha penetrado –según parece– el portugués, se entrenarán los maestros en dicha lengua para impartir la enseñanza en sus primeros momentos. Hace unos días salió la resolución del ministro de educación designándome junto con otros tres profesores para recorrer la zona, dictar un cursillo a los maestros y arbitrar las medidas necesarias a implantarse en el futuro. Parece ser que lo mismo se hará con las lenguas indígenas. Ojalá pueda arreglar mis cosas y poder participar en la experiencia que como Ud. sabe me interesa sobremanera.
Perdón por la larga carta. Un abrazo muy fuerte para Maruja y Ud. esperando tenerlos entre nosotros muy pronto

Ricardo Palmás

1977-02-09 Mencionado/a
Carta de Seoane a Baudizzone. 1977
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Baudizzone. 1977 en 09/02/1977

La Coruña, 9 de Febrero de 1977

Dr. Luis M. Baudizzone

Queridos Baudi y Elena:

Hace un mes que salimos de Buenos Aires y pasamos todo este tiempo en Madrid, Barcelona y en adaptarnos al ritmo de vida coruñés. Madrid está como siempre, ruidoso y creo que sus habitantes están, en general, esperanzados a pesar de algunos desastres económicos. En el orden cultural no ha variado en general nada desde los últimos meses del 75. Quizás mejor teatro, algunos espectáculos nuevos que antes no existían o eran menos notorios, películas que antes no dejaban proyectar la censura y las del “destape ” con una abundancia que hace suponer que durante todos estos años no se veía en España más desnudo que La Maja de Goya y alguna otra en las muchas exposiciones de pintura que se celebran. En Barcelona se destaca como una novedad la Fundación Miró en un edificio que hizo el arquitecto Sert , el mismo de la Fundación Maeght en el sur de Francia y de la casa-estudio Miró en Mallorca, siguiendo, como en éstas, su línea de arquitectura mediterránea. Muy bello y racional, pensado para Museo Miró y para ser útil a todas las actividades culturales de la Fundación. En esos días estaba expuesta la obra que había participado en la Bienal de Venecia con el título de “Vanguardia artística y realidad social del Estado Español, 1936-1976 ” que parece despertó mucha curiosidad en Venecia y aquí por su organización y por la falta de algunos participantes exiliados sobre todo en Méjico, Estados Unidos y Buenos Aires. La discusión es natural cuando se fundamenta en la calidad de las obras expuestas. Lo que no es natural es el olvido de quienes tuvieron que acogerse a una realidad distinta. Pero en polémicas de toda índole está sumida España entera. Es natural después de tanto silencio.
Me gustaría saber que pasó con mi exposición de Mar del Plata, es posible que hubiese pasado nada, pues en vísperas de venirme alguien me dijo que este año no se presentaba bien la venta de cuadros en galerías pues estaban anunciados no sé si siete u ocho remates en esa ciudad. Por otra parte los dueños de la galería para acumularse exposiciones en la temporada de verano le dedicaban pocos días, lo que a mi me parece un error. Bueno, ya me diréis que pasó. Te recuerdo que me ofreciste Romance y algunos dibujos de Pontones , creo. Pero este es un recuerdo interesado. Os recordamos desinteresadamente a vosotros con mucho cariño y deseando veros. ¿Es posible que sea en marzo?. Os esperamos.
Nada más por hoy. Esta carta es simplemente una prueba de nuestra existencia. Recibis (sic) tu y Elena un gran abrazo de Maruja y mío, con saludos para vuestros hijos

1977-06-27 Mencionado/a
Carta de Baudizzone a Seoane. 1977
Madrid
A Coruña
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Baudizzone a Seoane. 1977 en 27/06/1977

Madrid, 27 de Junio de 1977

Queridos Maruja y Luis:
Estamos aún en Madrid, esta ciudad de los bocinazos, las motocicletas y los papeles por el suelo. El tiempo es dulce, más bien cálido con cielo azul. Vemos cosas hermosas –ayer, Goya en el Prado ; hoy, las tallas de [Juan de] Juni y las “damas” en el arqueológico– cada vez más bellas. Hemos visto a [Lorenzo] Varela –esta noche comemos con él– y le encontramos muy bien. También tenemos noticias del chico Díaz Pardo [Rosendo ], no sólo ya parece estar fuera de peligro, sino que ya piensan que volverá a su casa la semana que viene. Qué alegría para todos! En Madrid nos encontramos carta de Freddy Guthman. Dice que se enviaron a tu casa los cuadros que figuran en la lista que hizo Cassara, y que [yo] te envio con esta carta y que tu portero los recibió y ya están allí. Bueno, queridos, ha sido espléndido estos tres días con Uds., verlos en su salsa coruñesa. Hasta pronto, muchas gracias por cuanto hicieron por nosotros y un gran abrazo para los dos.

Baudi.


Queridos Maruja y Luis:
Añorando los ratos pasados juntos, estamos dando los últimos pasos en este viaje; pero otra vez tendrá que ser antes porque ya ahora hace bastante calor y da pereza salir. ¡Si no irse directamente a la playa¡. Nos veremos con Mimina [Arias] mañana y festejaremos el restablecimiento del hijo. ¡Qué alegría enorme! Los abrazo y muy fuerte
Elena

1977-08-29 Mencionado/a
Carta de Seoane a Baudizzone. 1977
A Coruña
Bos Aires
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Baudizzone. 1977 en 29/08/1977

La Coruña, 29 de Agosto de 1977

Dr. Luis M. Baudizzone
Buenos Aires

Queridos Baudi y Elena:

No sé, ahora, si os debemos carta o nos la debeis. Pero es lo mismo, porque sentimos ganas de escribiros y la[s] satisfacemos escribiendo que parece ser lo debido. Os recordamos con cariño y agradecemos, ya os lo hemos dicho, vuestros días coruñeses. Trabajé bastante. Con la mujer de un amigo nuestro comenzamos a hacer tapices siguiendo los medievales y en cierto modo los de Aubusson , que también se inspiraron en aquellos. Están hechos seis, dos de prueba y cuatro que pueden exponerse, pues nuestro plan primero es hacer una muestra de ellos tan pronto tengamos doce, las medidas son 1,50 x 0,78 y 2 mts x 1,20. Aspiramos a que los temas sean populares; trabajos, costumbres e históricos. Tambien en esto queremos seguir la tradición europea medieval, fundamentalmente en cuanto a usar colores planos, y la que en nuestros días instituyeron en cuanto a la actualidad de los temas, Lurçat, Gromaire, Saint Saens, etc, y una tapicera noruega cuyo nombre no recuerdo ahora, es noruego, que durante la última guerra los hizo con escenas de la invasión y dominación de su país, enterrándolos después en tubos de latón o no sé que metal y exponiéndolos luego de hecha la paz. Técnicamente son tan buenos como los de la Galería El Sol , así nos parece. Llevaré diapositivas a nuestro regreso. En setiembre expongo pintura, grabados y libros ilustrados en Santiago, donde empecé a exponer en 1929 siendo estudiante de Derecho, y, en ese mes tambien, empieza a circular por distintas ciudades españolas una muestra itinerante de grabados mios patrocinada por la Dirección General de Bellas Artes . Al mismo tiempo he escrito algunas pequeñas monografías que sirven a la historia del arte gallego. Todo esto interrumpido por pequeños viajes a determinados sitios de la costa circulando por carreteras, por las que nunca antes pasamos, y que atraviesen paisajes extraordinarios de grandes valles y frondosos bosques. Galicia envuelta en niebla es el otro espectáculo que admiramos a menudo. Esa niebla gris que se extiende hasta nosotros mismos envolviéndonos en ella y que puebla de misterio todo cuanto nos circunda y que, sin embargo, está tan desacreditada por los adoradores del sol. Este verano fué particularmente rico en nieblas y lluvias. Leo, por otra parte, bastantes ensayos sobre cuestiones de arte y el resultado de estas lecturas es que el artista debe seguir en cada época, siempre, naturalmente conociendo las inquietudes de la que vive, su camino personal. Ya no existe vanguardia, no existen nuevas escuelas que modifiquen fundamentalmente las reglas del pasado lejano, ni del inmediato, como ocurrió con el expresionismo o el cubismo y no quedan más que las personalidades. Todo lo otro es cuestión de críticos venales, en su mayoría snobs o pasmados, y comercio de arte. Todo cuanto leo confirma mi posición seguida hasta ahora surgida en mi, más que de fundamentos estéticos, de mi individualismo. De ahí mi simpatía por el pasado más lejano, prehistoria, Edad Media y por los Dadá , sobre todo los Dadá alemanes, ferozmente individualistas, y entre los que cabe el Goya de los grabados como precursor y el de la pintura negra. También releo a Hesse , para mí uno de los mayores escritores del siglo, otro tremendo individualista. El artista es como una araña que va creando hilos y más hilos para aprisionar, en lugar de una mosca, una nueva forma, una idea, lo que sea, algo que le exprese, algo así, creo yo que pensaba Hesse del artista. Ninguna obra lo define del todo. La obra es la que deja hecha a su muerte. Ni Miguel Ángel es la Capilla Sixtina y el Moisés , ni la Pietá Rondanini , ni Leonardo es La Cena, ni La Gioconda , sino todo cuanto hicieron que es lo que generalmente constituye la obra. Lo otro, el aislamiento de una pieza, que generalmente se utiliza como ejemplo, es una parte ínfima de ella, falta el resto que es mucho más, y la vida de ellos.
Así fue saliendo esta carta con noticias de lo que más me preocupa, de lo que uno vive, que es impresionante. Escribidnos. Un gran abrazo para Elena y para tí de Maruja y mío.

1978-07-04 Mencionado/a
Carta de Seoane a Palmás. 1978
Bos Aires
Londres
Transcrición

Transcripción da epistola Carta de Seoane a Palmás. 1978 en 04/07/1978


Buenos Aires, 4 de Xulio de 1978

Sr. Ricardo Palmás
Londres

Querido Palmás:

Recibín o artigo de Manuel Maria encol do meu libro de poemas. Non o coñecía e agradecino moito. Ediciós do Castro, que eu axudéi a fundar, e, cuias primeiras edicións foron El Toro Júbilo e O Meco, é hoxe algo privado de Isaac Díaz Pardo e Xosé Díaz Arias, e, non somente non envían os libros, ou parece non enviar, aos críticos literarios nin á prensa de fora de Galicia. De xeito que un non chega a saber que pasa co seu libro. O que pasa en xeral é, que calquer tídoo en Ed. do Castro agarda o esquecemento total, ou semella agardalo. Políticamente estou tan desconcertado como a maioría da xente que mantivo fidelmente unha liña de conducta, e como vostede, perplexo pola presidencia de Rosón, e tamén das ideas políticas de Piñeiro, a sua actitude de mediador en moitas cuestións que interesan a unha limpeza da vida política galega, a unha actitude verdadeiramente galeguista. Eu non sei que decir. Voltando a Galicia illareime de todo e adicareime soio a traballar nas miñas cousas. Hoxe debe haber xa uns quince tapices, feitos por Maria Elena, a muller de Xosé Luis, con dibuxos meus. Tres ou catro de algo mais de dous metros por un metro vinte. En xeral de gran formato. Creo que me adicarei soio a esto, a traballar. En Buenos Aires espoño en Setembro, na Galería Bonino, e fixen unha pequena mostra en Rosario a fins de maio. Non teño propósito algún de facer moito mais. Pra unha publicación de Santiago que ahora resulta sairá a fins de ano, fixen, a pedido urxente de Xulio Maside, un pequeno ensaio sobre o pintor. Non me acusou recibo, de xeito que lle pedín por favor a Piñeiro que lle preguntase si o tiña recibido, contestándome éste que sí. O meu traballo está adicado a establecer as xentes do arte contemporáneo que verdadeiramente o influenciaron, pois en Galicia os familiares, Xulio e a sua dona, e outros semiinventaron un Maside provincián que nada ten que ver coa súa verdadeira persoalidade, e co que deixou en pintura. Para fin de ano espero ter unha monografía mais estensa, onde publicarei as cartas que conservo suas. E teño o propósito de publicar, correxidos e ampliados, algúns traballos feitos fai moitos anos en Buenos Aires, por exemplo, encol da escultura galega e o periodismo e, entre outros, un que matino interesante, sobre a simboloxía dos animaes no románico, no arte, e popularmente. Sería moi interesante saber si o donante con apelido galego, do Goya do Ashmolean Museum de Oxford, non foi algún dos galegos liberales que fuxiron de Galicia, e algús dos cales non voltaron endexamais, participando na redacción das Cartillas adicadas á enseñanza que eloxióu Domingo F. Sarmiento.

Moitos saúdos de Maruja e unha forte aperta de:

[Seoane]