Carta de Carlos Tobío Fernández ao seu irmán Lois Tobío Fernández, 1967.
29/05/1967Carlos Tobío
México, D. F. 29 de mayo de 1967
Sr. Luis Tobío.
Querido Luis:
Recibí tu última carta dándonos tu nuevo domicilio, del cual tomamos nota. Celebramos que hayas comprado un piso, lo cual te evitará tener que tratar con caseros voraces y te permitirá capitalizar lo que hubieras pagado de renta. Nos ha sacudido tu pintura amarga y desesperanzada sobre el presente estado de cosas en España. Tu descripción de la podredumbre y corrupción de la estructura política y social de ahí es deprimente y rotunda. Creo que nunca te habías expresado en forma tan cruda y pesimista. Me recuerda los cuadros de ciertos pintores españoles de aquí, que siguen la línea neo expresionista, que componen sus obras con técnica de collages, con un cacho de encaje descolorido, un trozo de terciopelo raído, una vieja zapatilla con bordados de oro, y otra quincallería ruinosa para adornar a una momia espectral y apolillada por los siglos, de algun personaje de la historia de España de los tiempos de su "grandeza". Así retratan la España de hoy, una España pestilente de cadáver, de podredumbre, de ruina, de polvo. Desde luego ya sabía yo que la España franquista es todo eso, que vive abrazada a su propio cadáver putrefacto, pero creía que era algo mas que eso y tu me dices que no. Los periódicos hablan mucho en estos días de la rebeldía de la nueva generación, estudiantes, clero joven, obreros con conciencia de clase. De intelectuales de la clase media que disienten y protestan. Y nuestra esperanza de un cambio que transforme, no solo las formas políticas sino sobre todo las bases mismas de la sociedad, sus conceptos morales, su sensibilidad, su comprensión del mundo, estriban precisamente en esas gentes nuevas que, segun leemos a diario, muestran su inconformidad por todos los medios. Pero segun tu me dices, nada o casi nada se puede esperar. Ni un resquicio al optimismo queda si, en efecto, el pueblo es inerte, cobarde, está envilecido, y la clase media, de la que menos cabe esperar aun, está conforme y contenta con su mendrugo. Que espanto! Por supuesto que el fascismo no puede parir antifascismo, aunque haya ilusos que lo crean así, como los lobos no pueden parir corderos. Pero tenía yo la creencia de que una firme transformación se estaba produciendo ahí al margen y aun contra el deseo de los grupos gobernantes, por la fuerza de hechos tales como la corriente turística y los obreros emigrados que regresan. Cierto que una forzada y tímida liberalización fué frenada en seco por el gobierno que, alarmado por los resultados del experimento, convirtió la política de inmovilismo en otra de retroceso, como tu dices. En realidad, después de leer tu carta estoy mas confundido aun. Es endiabladamente difícil formarse un juicio claro de cualquier cuestión que concierne a España, siempre compleja y contradictoria. Y desde luego es imposible profetizar. Pero yo todavía conservo algo de fé y creo que la presente descomposición y caos, por la lógica de los acontecimientos mundiales y la evolución de las sociedades, tiene que desembocar, años mas o menos, en una sociedad decente dentro de la cual valga la pena vivir. Y en cuanto a la apatía e inercia del pueblo, tal vez algún día se despierte sorprendiendo al mundo como en 1936. Pero no estoy muy seguro de esto, y ni aun sé si es deseable. Las páginas mas bellas y heroicas de la historia de los pueblos, suelen ser las mas catastróficas y ruinosas. Muchos años de opresión fascista degradan a los pueblos y les hacen perder el sentido de su dignidad, como tantas veces se ha visto. Si así fuera, si el español degenerara en un conformista, hipócrita, inmoral y pillo, España no valdría la pena.
Respecto a mi viaje, un día cualquiera de julio o agosto próximo espero llegar a Madrid. No sé cuando, así que no os preocupéis por mi llegada. Que, además, supongo tendrá lugar cuando estéis de veraneo fuera de la capital. Pienso estar solo unos cuantos días, a la llegada, y salir de inmediato para Galicia, porque recuerdo que el calor de Madrid, en esos meses es insoportable. Visitaré a la familia y, si el tiempo lo permite, me tomaré unos baños en Coruña y Vivero. Tambien daré una vuelta por Santiago. Tu sabes, ir al encuentro de los tiempos idos, esa sensación que tanto fascina y atrae. Luego pasadas 3 semanas máximo, me daré una vuelta por Andalucia a concluir el veraneo. Todo ello rigurosamente solo, pues la familia se queda toda aquí. Y a principios de septiembre volveré a Madrid, donde con seguridad ya os encontraré (suponiendo que no esteis a mi llegada). No pienso avisar a nadie de ahí el día de mi llegada, ni a los familiares de Carmen, pues quiero llegar a Madrid como un visitante cualquiera que va por vez primera, y los recibimientos y atenciones familiares en el momento de la llegada, por muy estimables que son, distraen la atención e impiden a uno concentrarse en la apreciación de cosas y personas y disfrutar objetivamente el momento de la llegada. Bueno, eso si el tal disfrute no me lo frustra alguna intervención policíaca, lo cual descarto.
De las demás cosas os hablaré a mi llegada ahí.
Abrazos,
Carlos [sinatura autógrafa]
P.D. En cuanto a Evtuchenko, prima donna de la literatura soviética, snob y poeta quimicamente puro, casi el Cordobés de la poesía, genio publicitario a lo Dalí, sus payasadas hacen pensar que a lo mejor Mao Tse Tung no anda tan equivocado, y desde luego Rusia está en la etapa de la Revolución hecha burocracia.