Proxecto epístola

Agrupación de coleccións epistolares para a páxina institucional do Consello da Cultura Galega.

Sargadelos, 28 de marzo de 1979

Sr. Don Luis Seoane
La Coruña

Querido Luis:

No tengo más remedio que escribirte una larga carta, no para polemizar sino porque yo no puedo quedarme con reservas mentales contigo sin que me arañe algo por dentro:
1º- Registrar lo que acabo de decirte por teléfono en cuanto al deseo de la familia de Lorenzo Varela de traer a Galicia sus restos y como yo no sé qué es lo que se debe de hacer en este caso pues con independencia de lo que yo pienso es más importante lo que penséis tú y Rafael. Yo me sumo a lo que penséis vosotros.
2º- Tu carta del 2 cte. a los Patronos del Museo, en relación con la que me escribiste en 19 de feb[rero] y enviaste copia a los mismos, hay en ella cosas con las que estoy conforme y otras que no lo estoy pero que respeto. La más importante, la que más me preocupa, es el objeto mismo de la carta, pues no creo que a ninguno de los Patronos, nuestros amigos, les interese volver a tomar alguna decisión si saben que tú estás ajeno, indiferente a ella, y no digamos si sospechan que puedas estar contrariado, porque por encima del mismo Museo y de todo lo demás está tu amistad. Yo quisiera sentirme entre esos amigos y dejo en el aire la significación que esto puede tener.
3º- Por algunos amigos supe de algunas reacciones tuyas al ver el Museo, pero, naturalmente, yo sé que ninguna de esas razones son las que te han disgustado. Pienso que más bien es una suma de razones, de malos entendidos y de cosas inevitables que nos hacen a veces ser como somos. Las razones las traías ya dentro de ti como una protesta, más bien por todo –razón no te falta– por todo esto en lo que desembocaron tanto empeño por conseguir lo imposible, porque la realidad única y posible es esta con todas sus miserias. Si en el Museo hay algo que se hizo como tú no quisieras que se hiciese, se rectifica y se sigue adelante, sin que esto constituya siquiera un incidente pues puedes estar seguro que la totalidad de los Patronos no te van a contrariar en nada y por el contrario estarán encantados en que esas cosas se hagan como tú quieres. Cada uno aportó su criterio con su leal saber y entender pero nada estaría más lejos que pensar que lo aportaban en oposición a ti.
4º- Un punto sólo. Esa carta del feb[rero] del 77 (en la que tú dices que yo digo algo así como que yo te he destituido –lo cual no puede ser más que por haber leído tú mal la carta) te daba cuenta de varias cosas, entre ellas de los materiales que adjuntaba que habían enviado Neira Vilas, Arturo Cuadrado, un viejo emigrante de Méjico y te daba cuenta también de que en el Castro había dejado en mi ausencia Eva Llorens un grupo de dibujos de su padre montados. Todas las cosas las supervisaste tú, algunas me las devolviste, pero no tengo idea que me hayas dicho nada contra esos dibujos de Llorens, más bien mi recuerdo es que los aceptaste bien por los personajes históricos que retrataban. Pero no te preocupes que acepto que la memoria pueda estarme fallando. Pero es que esto enlaza con otra cosa, porque al parecer Eva Llorens acaba de hacer unas manifestaciones en la televisión en las que al parecer –pues yo no la oí– dijo que pensaba reunir la obra de su padre al lado del Museo Carlos Maside y que tal idea había sido de Isaac Díaz Pardo director del Museo. Sin embargo la realidad es otra.
El último verano Eva Llorens estuvo exponiendo en Giannini y me pidieron que asistiese a una charla/coloquio sobre la acuarela y fui por esa estúpida condición mía de hacer cosas que creo debo hacer aunque no me gusten. Eva aprovechó y vino al día siguiente al Castro. Me contó que estaba cumpliendo año sabático, que se había divorciado de su marido tejano, al parecer borracho, que estaba estudiando los papeles de su padre (entre los que aparecían algunas cartas de Castelao) y que pensaba hacer una biografía, que en una casa –no sé si de un familiar– en Madrid tiene obra que le quedó de su padre y que le gustaría dejarla a una institución como el Museo Carlos Maside porque además de la admiración que sentía por su labor la obra de su padre había sido hecha prácticamente en los alrededores de Sada en donde vivían cuando venían a Galicia. Yo le hice ver que en el Museo no tenían cabida conceptual, no porque su padre fuese de derechas –cosa que ella fue la primera en confesarlo– sino porque el propósito con el que se había creado el Museo era el de reunir la obra y la documentación del movimiento renovador de la pintura hasta nuestros días, a partir de la concienciación que había imprimido Castelao, que acaso cuando el Museo ocupe su sede definitiva podría verse la forma de montar otras colecciones sin vinculación alguna con el Museo Carlos Maside con las obras hechas con conceptos anteriores, aunque fuesen sincrónicos, al que tiene el Maside, y que es así cuando podría recogerse la obra de su padre y de otras que entran dentro de un semejante concepto del arte. Le hice ver muy expresamente, repetidamente, (José Luis estaba presente) la organización del Museo con su Patronato y con su Junta de Gobierno ejecutiva y que mi pensamiento y disposición no pasaba de ser uno entre 18 y que yo no tenía cargo directivo alguno, y que la admisión de obra o cualquier actividad del Museo respondía a lo que acordasen las comisiones respectivas. Por mi parte yo no podría decir nada menos ni nada más porque la idea de Eva para su padre era legítima, incluido el entorno en que quiere reunir la obra, y el pensar en el Maside representa una prueba de respeto y admiración hacia éste y no sería yo –que vivo en estos pagos– quien me prestaría a rechazar lo que me estaba ofreciendo de otra forma más rotunda. Tampoco haría tal rechazo en nombre de ningún otro.
Si a pesar de mis advertencias me atribuye la Dirección del Museo a mí y dice que la obra de su padre se montará al lado del Museo –aunque no tenía por qué unir el nombre de su padre al de Maside... ¿qué le vas a hacer?
5º- Que tú no quieres estar en la cosa ejecutiva, burocrática del Museo... Bueno pero nadie te va a sacar a ti la realidad de ser su fundador aunque tú te empeñes en desentenderte de él. A mí me parece que tú no debías desentenderte de esto aconsejando en líneas generales lo que se debe hacer para que lo que se haga esté lo más cercano a tu idea. Todo es corregible. Si la intención tuya es que el Museo prevalezca y se desenvuelva hasta los niveles que tienes pensado, debes de ayudarlo aunque no sea más que haciendo críticas, que de alguna manera representarán tu orientación. Es indudable que el Museo tiene ya un prestigio y que merecería la pena salvar cualquier desentendimiento por consolidar y desenvolver lo que deseaste hacer de él. Creo que más bien te interesa luchar porque no se pierda tu criterio, aunque tengas que aguantar cosas que no son exactamente lo que tú quisieras que se hiciese, ya que si el Museo, por cualquier razón, se viniese abajo, tú serías el primero en desesperarte por ello.
6º- Una última cosa de tipo económico: Sé que estas cosas no te han preocupado demasiado por encima del nivel de tus necesidades. Creo que desde el punto de defender mis intereses particulares no he sido más interesado que tú. Pero al frente de defender unos establecimientos de los que viven 250 familias no tenga más remedio de ser guardador celoso de que las cosas funcionen bien económicamente. Entonces, independientemente de los intereses que fue produciendo el capital de Sargadelos a ti se te tenía destinada una pequeña asignación que iba creciendo con la evolución del dinero. No era pagarte nada sino para ayudarte a pagar unos gastos materiales de tu atención por estas cosas. No te obligaban a nada. Y lo único injusto es que fuese una asignación pequeña. Pídenos que se te aumente, declárate en huelga, llámanos miserables... pero no nos la rechaces.
No se trata de polemizar. Pero no me prohibas que te diga estas cosas que mantenidas como reserva me hacen mucho daño. Y un abrazo muy tenso

Isaac

Ficha documental [Imprimir]
  • Forma parte do conxunto:
  • Fondo: Luís Seoane depositado na Fundación Luís Seoane.
  • Colección: Isaac Díaz Pardo e Luís Seoane
  • Data:
    28/03/1979
  • De:
    Isaac Díaz Pardo
  • Para:
    Luís Seoane
  • Orixe:
    O Castro [parr. Osedo, conc. Sada]
  • Destino:
    A Coruña
  • Ficha descriptiva:
    [Carta mecanografada con firma autógrafa]
  • Notas:
  • Termos clave: