Carta de Whitelow a Seoane. 1963
19/06/1963
Buenos Aires, 19-VI-63
Querido Luis:
Hace tiempo te debo una carta, aunque en rigor, ¿qué se debe a los amigos? Te darás cuenta de que el trabajo en la Galería –ese trabajo que es un poco el movimiento de la calesita– a veces me quita inspiración y, por desgracia, sólo puedo escribir en estado “fluyente”. La vida en B. A. sigue agitada y confusa como siempre. Cerca ya de las elecciones, nos preguntamos aún si se producirán o no. Existen muchas razones para impedirlas, o mejor, sinrazones. Estos días estuve con gripe y me dediqué a repasar la historia argentina. El vaivén político ha sido el mismo a partir de la discrepancia de Saavedra y Moreno. El divisionismo y el disconformismo han sido dos rasgos muy nuestros, así como ese repentino sentimiento de unión nacional frente al enemigo donde se dieron muestras de coraje inesperado. Para contrarrestar los malestares de esta época de anarquía, he vuelto a mi vieja idea de editar una revista de poesía, amplia, extendida en el tiempo y en la distancia, ecléctica, como soy yo, y tolerante. Estoy en la fase preliminar, o sea, pidiendo presupuestos. Recordé que tú me hablaste de una imprenta chica, que podía hacer lindas cosas bien guiada. ¿Tendrías la dirección contigo? ¿Me la puedes enviar? Por supuesto, cuento con tu ayuda para cuando aparezca la publicación, a la cual llamaré –por ahora– Vertiente. Dime si conoces alguna que lleve el mismo hombre para no incurrir en coincidencias incómodas.
Adriana y yo los extrañamos mucho, pero al mismo tiempo nos alegra que todo les vaya bien. Un fuerte abrazo para ti y Maruja de
Billy