1963-09-05 |
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O Castro [parr. Osedo, conc. Sada] |
Bos Aires |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Seoane a Varela. 1963 en 05/09/1963
El Castro, 5 de septiembre de 1963
Sr. Lorenzo Varela
Buenos Aires
Querido Lorenzo:
Hoy inauguro una exposición de grabados en La Coruña, en la Asociación de Artistas, una institución antigua de esta ciudad. La hago con la ayuda de Díaz Pardo, luchando con muchas dificultades procedentes, ya puedes imaginarte de qué fuentes. Ya hablaremos con calma a mi regreso de todo esto. Estoy contento de hacerla. En Madrid, la exposición se presenta de manera bastante distinta. Ayer también empezaron a imprimir O meco, una serie de doce grabados con el relato de esta leyenda gallega. Te tendré al tanto de todo. Estamos encantados, te lo repito, con el paisaje y el pueblo. Encontré a muchos viejos compañeros y amigos, cansados y envejecidos, pero siempre cordiales.
Ahí van noticias:
En París, ha comenzado una extensa campaña con argumentos serios y breves sobre los formatos desmesurados en pintura. Uno de los últimos artículos publicados es el de Claude Roger-Marx en Le Figaro Litteraire titulado El gigantismo no hace la gran mentira. Se refiere a los cuadros presentados en general por pintores jóvenes en el Salón de mayo y en concursos y galerías de arte, con obras que parecen ser ampliaciones del tamaño natural y que no exige el tema, o el problema, planteado por el artista. Recuerda una anécdota de Degas con motivo de una tela inmensa del español Sert en la que pregunta: “Comment est-ce que ça se degónfle?” Se refiere también al grabado que comienza a sufrir de esta afán megalomaniaco de gigantismo, olvidando sus autores que uno de los problemas más importantes de los antiguos grabadores fue el de tratar de contener el infinito en un pequeño rectángulo gracias al solo poder de monocromía y de la impresión de cuya belleza especial se cuidaba el grabador. Los grabados de la muerte, de Holbein, una de las mayores obras de arte europeas de todos los tiempos tienen cada uno apenas cuarenta centímetros cuadrados del tamaño, así como algunos de los cuadros más importantes de la historia del arte, La parábola de los ciegos de Brueghel, o los más importantes de Vermeer que son de tamaño muy reducido.
En Música en Compostela, cursos de música y conciertos que se realizan en Santiago de Compostela entre agosto y septiembre y que se consideran actualmente como de los más importantes de Europa, acaba de obtener un valioso triunfo el compositor argentino José Ramos con una obra titulada Gato número 1. Ramos, en entrevistas de prensa, afirma su aspiración de realizar una música argentina donde se afirmen la diferencias nacionales de la Argentina. Un crítico músical de hace un gran elogio de la obra de este compositor cree encontrar en ella resonancias de la suite Iberia y asombrándose de la novedad nacionalista del propósito de Ramos cuando el cosmopolitismo parece dominar la música como las otras artes.
Circulan clandestinamente en Madrid dos cartas con destinatarios distintos. Una de ellas del catedrático de la Universidad central de Santiago Montero Díaz contestando a los exiliados cubanos que se metieron con su conferencia, pronunciada en esa Universidad, favorable al actual gobierno de Cuba y, otra, de José Bergamín, en la que responde a los ataques que desde el ABC le hizo el director de este diario Luca de Tena. Este mismo señor, que abusa como es notorio de su situación privilegiada, también atacó últimamente al notable escritor Antonio Espina a propósito de un artículo publicado o por éste en un diario mexicano sobre la hispanidad y Ramiro de Maeztu.
En Oporto, para una editorial gallega, está en su fase de impresión las cantigas de escarnio y maldecir de los poetas medievales de los cancioneros galaico-portugueses. Se publican por primera vez después de seis siglos en la Península y fuera de ella. Durante estos últimos años, sus editores vienen luchando, aparte de con dificultades técnicas, con la censura, pues en estos poemas las palabras soeces e injuriantes alternan en los temas con la libertad de descripción de costumbres.
Alfred Hitchcock, el famoso director cinematográfico, vendedor de suspensos, declaró últimamente que las mujeres le dan miedo, afirmando: “como mi mujer era rubia, he creído durante mucho tiempo que todas las mujeres eran rubias”. A una periodista italiana que le entrevistaba le preguntó: “¿Qué significa exactamente la palabra sexy que se oye por todas partes?” Como es puede notar, Hitchcock sabe hacerse el distraído en la vida real con afán de propaganda, lo mismo que que cuando actúa de personaje secundario en sus películas.
Esto es todo por hoy. Te tendré al tanto de mis cosas. Un abrazo a Marika, a todos los amigos comunes y a ti de Maruja y míos. Otro para ti fuerte de:
[Seoane]
Escríbeme. Te lo ruego. Dos minutos de carta.
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1963-09-14 |
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A Coruña |
Bos Aires |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Seoane a Esther e Lipa Burd. 1963 en 14/09/1963
La Coruña, 14 de setiembre de 1963
Queridos Esther y Lipa:
Hace tres meses o algo así que no sabemos nada de vosotros, en parte, creo, que por culpa mía. Desde hace casi dos meses estamos en La Coruña y no queremos deciros nada de lo contentos que estamos de estar aquí este verano de lluvia, casi invierno, a orillas de su espléndido mar. Trabajé mucho. Hice dos álbumes de grabados en madera y por estos días está abierta una exposición en una vieja entidad coruñesa, la Asociación de Artistas, con un éxito completo. Mucha gente me recuerda y me hacen llegar su adhesión y el día que se inauguró vinieron gentes de toda Galicia convirtiéndose en un gran acto que no puedo definir pero del que hablaremos personalmente. La prensa se comportó valientemente y se nutrió de artículos cargados de intención sobre la muestra y sobre mí. Esto es algo de lo que por ahora puedo contaros. Díaz Pardo me prestó un espléndido estudio que tiene en su fábrica de porcelanas y en él trabajo todo lo que puedo. Pinté algo, no mucho, pues en noviembre realizo otra exposición en Madrid. Me gustaría que coincidiese con algún viaje vuestro. Encontramos a Galicia maravillosa, teníamos hambre de ella, de la venerable tradición de su existencia, de los dos mil años de su historia conocida. Nos gusta pasear por sus ciudades que no tienen fecha de nacimiento, pues son casi todas anteriores a nuestra era, que fueron destruídas muchas veces y otras tantas renacieron, y por las que fueron vencedores y vencidos tantos pueblos de occidente desde los vikingos, o de oriente, desde los fenicios y romanos. En ellas vive un pueblo viejo, mezcla de muchas sangres también antiguas, sabio como lo son todos los pueblos viejos, sufrido y paciente como lo es la vejez, pero en el que nuevamente renace la esperanza. Hace pocos días fuimos a una ermita cercana a El Ferrol, Santa María de Chamorro, la ermita se fundó sobre un supuesto milagro de la Virgen –la Virgen quedó dormida sobre una roca y quedó la huella de su cuerpo estampada en ella, eso nos dijo el sacristán– pero la roca debió haber sido antes objeto de veneración pagana, como otras rocas de Galicia, como los árboles y las fuentes, y la iglesia aprovechó esa veneración para fundamentar el milagro. Pero desde esa ermita situada en lo alto de una montaña, lo que vimos fué un milagro de paisaje, las cuatro rías que componen el mar de los Artabros, las tres ciudades extendiéndose en ellas; La Coruña, El Ferrol, Betanzos y muchas aldeas y villas, y el mar y las montañas. Un paisaje como creo deben encontrarse muy pocos en el mundo, pues desde allí veíamos esas tres ciudades y las aldeas y los bosques y las tierras labradas, y los montes con sus malezas y el mar y el cielo, con la más considerable variedad de verdes y amarillos, de grises y azules. No puedo describirlo. Es imposible. Con todo, sin embargo, tenemos nostalgias de vosotros y de todos los amigos. Algo quiero deciros, aquella conversación absurda con el escultor de Madrid en casa de Azcoaga, no responde a ninguna realidad. Al contrario, existe una comprensión extraordinaria, sobre todo entre lo más jóvenes, para quienes están fuera, aunque no sepan, como no saben, nada o casi nada de ellos.
Os ruego nos escribáis alguna carta. Necesitamos noticias de los amigos. Hace un mes o más que no recibimos carta de nadie. Marcharemos a Madrid a finales de este mes. Un abrazo para todos los amigos comunes y uno muy fuerte de Maruja y mío para los dos:
[Seoane]
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1963-09-14 |
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A Coruña |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Seoane a Alvajar. 1963 en 14/09/1963
La Coruña, 14 de setiembre de 1963
[Manuscrito:] Amparo Alvajar
Estimada amiga:
Te debemos una larga carta hablándote de España, de Galicia, de nosotros. Llevamos aquí en La Coruña, mejor dicho en El Castro de Sada, dos meses, yendo y viniendo, eso sí, a La Coruña, en donde estoy actualmente exponiendo con mucho éxito grabados en su vieja Asociación de Artistas. España está desde nuestro punto de vista, el que tu conoces y compartes, mejor de lo que sospechábamos en nuestros diálogos de Ginebra. Se encuentra mucha gente optimista, yo pienso que con fundamento aunque no tenga razones de orden práctico, pero lo noto en las gentes, en las conversaciones que escucho, en el aire, y Galicia está maravillosa como siempre, indiferente, pobre, abandonada, pero maravillosa y en la gente joven vuelve a nacer la esperanza en un futuro próximo. Creo que deberías viajar a España. Ninguna carta ni experiencia ajenas puede ofrecerte una impresión de lo que aquí está renaciendo. En La Coruña cambiaron muchos barrios y la ciudad creció. Da la sensación de ser más grande que Ginebra, desde luego más bella pero sus gentes parecen las mismas en su aparente despreocupación, en su elegancia natural y en su humor. La Coruña es la ciudad liberal de siempre, a pesar de todo lo que se le impone. Nosotros nos sentimos muy a gusto en ella y lamentamos tener que marcharnos a Madrid. Conocimos a mucha gente nueva, a un pariente tuyo, Molina, que es canciller del consulado uruguayo y hombre preocupado por cuestiones de cultura, que siente una gran adhesión hacia tí y ex-compañeros tuyos de bachillerato que te recuerdan con aprecio, Fernando Mon, ahora crítico de arte, y González Garcés, poeta y crítico literario. Por nuestra parte les hablamos de tu labor de directora en el Teatro Hispanoamericano de Ginebra, de tus obras de teatro en Buenos Aires. Yo he publicado aquí, en este tiempo de estancia en El Castro dos álbumes de grabados: El toro Júbilo y O Meco, que tienen como tema una fiesta castellana y una leyenda gallega. Están impresos en Moret, imprenta que tu recordarás. Creo que si volviésemos todos podríamos hacer muchas cosas, la lástima es que algunos como yo mismo tienen una vida realizada fuera de aquí que debemos decidirnos a abandonar. Ahora tenemos que regresar a Buenos Aires, una ciudad que en estos meses sólo recordamos por los amigos que allí viven.
Nos gustaría que nos escribieses. Te estamos muy agradecidos por todo lo que hiciste y haces por nosotros. Debemos regresar a Ginebra, pero no tengo ganas de salir de España por ahora. Tengo en noviembre una exposición [en Madrid.
Recibe un gran abrazo de Maruja y mío:]
[Seoane]
Falta a despedida da carta orixinal (só se dispuxo da cara dianteira do orixinal fotografada). O texto restante pódese enxergar nesta cara ás avesas e reproducímolo entre corchetes, aínda que sería necesario confirmalo.
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1963-11-04 |
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Bos Aires |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Scheimberg a Seoane. 1963 en 04/11/1963
Buenos Aires, 4 de noviembre de 1963
Querido Seoane:
Recibí el catálogo de la Exposición de grabados que Vd. realizó en la Asociación de Artistas de La Coruña, así como parte de las hermosas –y por momentos atrevidas palabras pronunciadas por el veinteañero Alberto Míguez en el banquete que le ofrecieron los amigos de La Coruña; y también la hoja de La Voz de Galicia a Vd. dedicada. Bien, muy bien. Me alegro –y conmigo Aída y todos los amigos– del éxito alcanzado y que Vd. se merece, por lo demás. Creo que tienen razón sus amigos de allá cuando lo llaman pintor gallego. Y de qué modo lo es Vd.!; y con qué profundidad y autenticidad! Con todo –y nada más que por vanidad patriótica– lamento que no se haya recordado bastante su condición de argentino... Pero, qué importa? A Vd. lo tenemos en nuestros museos y en nuestras casas y, sobre todo, en nuestros corazones. Esperamos que su exposición de pinturas y grabados en Madrid resulte un triunfo... Me olvidaba decirle que de la hoja La Voz de Galicia me agradó sobremanera lo que Vd. dice en la interviú que le hacen. Se lo leí a Falcini y participa de mi entusiasmo. Recibí también su carta de Madrid, del 15 de octubre. Gracias por sus recuerdos y por las palabras amables que tiene para los amigos. Vd. sabe bien que también nosotros –Aída y yo, los amigos, los recordamos y extrañamos a Vd. y a Maruja (Aída le agradece de alma las tan cordiales cartas y que se decidirá a contestar así que mejore de ánimo). Piensa volver a Suiza? Cuándo? Mis Cartas europeas parecen que han gustado bastante a los amigos. Me dice Vd. que a los amigos de Madrid se las mande... No será una imprudencia y talvez ponerlos en un compromiso? A pesar de esta preocupación, estoy impaciente porque Vd. las conozca –mejor dicho, las vea ya impresas–. Su tapa ha quedado muy bien. Muy interesante todo lo que Vd. me dice de las cosas de España. Es como un nuevo renacimiento. En la comida que le dieron a Ana en Cochabamba 955 y a la que asistimos Aída y yo, se repartió el petitorio de los 1021. Vale por su valentía y, sobre todo, por quienes lo firman. Cómo no estar orgulloso de un pueblo que cuenta con un tal planten de escritores, poetas, artistas y profesores universitarios?
Por aquí, a la espera de que las promesas se vayan convirtiendo en actos. Por de pronto, y salvo en algunos aspectos, creo que las cosas andarán un poco mejor. Es cierto que subsisten las leyes represivas –que se comprometieron a anular al día siguiente de la asunción del mando y que ahora dejan para que decida el Parlamento–, pero no es menos cierto que hay como una sensación de libertad en las calles y en todas partes. Y en cuanto a nuestro petróleo, no sería difícil que de un momento a otro se anulen los contratos (la venta de Petroquímica ya se anuló y no pasó nada; al contrario, Compancs2 ha tenido un gesto muy elegante acatando la decisión del Gobierno). Por de pronto, la gente que integra Energía y Combustibles e YPF es de lo mejorcito de este Gobierno y todo hace presumir que no se van a achicar ante las amenazas y chantages que nos vienen de Estados Unidos. Las Empresas Petroleras y sus defensores dicen y repiten que hacen un mal negocio; pero nunca se ha visto defender tan zañudamente un mal negocio como este de las concesiones petroleras. Y cómo se movilizan sus testaferros criollos!
No quiero anticipar vaticinios para no tener de que lamentarme luego; pero no puedo ni quiero ocultarle que espero –esperamos– que el país se va a enderezar; no sé si mucho, pero algo sí... Y ya sería un buen principio.
Y aquí termino. Me he quedado sin luz en mi escritorio y aprovecho la última que me llega de la calle. Escriba, escríbannos Vd. y Maruja aunque los de aquí seamos un poco remolones en contestar. Básteles saber a Vd. y Maruja –lo ignoran acaso?– que todos los amigos de aquí los extrañamos y los esperamos. Pero para quedarse entre nosotros...
Bueno, Seoane, Maruja, reciban los saludos de los amigos y de Aída y mío un grande abrazo. Hasta siempre, hasta pronto.
Scheimberg
P.S. Mis cosas personales no mejoran hasta ahora –aunque no han muerto aún las esperanzas de salvar al Banco–.
1 Refírese ao manifestó asinado por 102 intelectuais (entre outros José Bergamín que tivo que exiliarse de novo en 1963) dirixido a Manuel Fraga, no que se denunciaban torturas y represión contra os mineiros asturianos.
2 Refírese á empresa petrolífera argentina.
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1965-06-21 |
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Bos Aires |
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada] |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1965 en 21/06/1965
Buenos Aires, 21 de junio de 1965
Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro. La Coruña
Querido Isaac:
Recibí tus cartas, te escribí antes de que llegases tú a El Castro y tengo muy poco que contestarte. Hablé con tus amigos de la Asociación de Artistas sobre lo que me pedías, reunir cuadros para enviar y les parece muy poco probable conseguir hacerlo sino en una muy poca cantidad. Por mi parte no tengo nada que decirte. No estoy de acuerdo contigo en esto. El catálogo cuesta demasiado caro y por menos cantidades se hubiera hecho en Buenos Aires. Un catálogo aislado no tiene más interés que otros que se han hecho; incluido en el catálogo general hubiese sido más eficaz aunque tuviese menos reproducciones. Si ha de venderse aquí, lo adquieren, sobre todo al precio que saldrá, dos o tres docenas de personas. Paso el día trabajando, se me acumuló bastante tarea y trato de sacármela de encima. Cada vez veo mi porvenir más confuso en el sentido de no percibir claramente un destino para el futuro. Estoy muy arrepentido de aceptar la dirección de la revista del Centro. Me lleva tiempo y tengo que volver a aguantar pérdida de tiempo y sugerencias de una serie de gentes que no estimo y de las que me había aislado en los últimos años. El suplemento a la revista, que como tal sale el trabajo sobre arte gallego, tardará en salir unos quince días. Los de la Asociación piensan que es muy poco y hasta ahora no han hecho más que enviar su opinión negativa, publicada en su boletín y también por radio, pidiendo que se abra discusión sobre él. Yo estoy aburrido y lamento haberme metido en esto. Quiero trabajar únicamente en mis cosas, hace tiempo que lo decidí así y no deseo cambiar. No quiero tratar de hacerlo todo sino únicamente aquello que creo mejor poder hacer y el pintar y grabar, si uno se dedica a ello, lleva la vida y sobre todo si para uno es el oficio de que vive. Tú lo sabes esto tan bien o mejor que yo.
Supongo que todo estará ahí igual, Maruja y yo os envidiamos, lo decimos siempre pero es verdad. Nos hubiese gustado estar ahí con vosotros. Lo de Picasso lo sabíamos, se dijo en España cuando estábamos allí, fue consultado por teléfono por la Galería, se frotó las manos cuando se enteró de la venta y comentó, “los pagaron caros”. Lo único excepcional que hizo fueron las donaciones al Museo Picasso de Barcelona. Vi, hace algunos años, dos tapices de Adam, naturalmente también los de Cluny, y algunas fotografías de alguno de Bissiére, todos ellos, en general y otros más, dinamarqueses y suecos, de Lurçat, de Miró y de Picasso, etc., fueron los que encendieron en mí el deseo de hacer cartones para tapices y me hicieron pensar en la posibilidad de revivir la artesanía gallega de la tecelanas, pero todo esto quedará en puro sueño como tantos proyectos que fueron madurando en uno y no tuvimos oportunidad de realizar por falta de dinero y propia capacidad organizadora Ya no creo en el Laboratorio de Formas. No creo que se pueda hacer nada ahí para eso harían falta gentes con una visión que fuese más allá de unos mezquinos dividendos anuales que los tendrán, estoy seguro, y tuviesen un patriotismo superior al de los manifiestos. En Galicia se pueden hacer muchas cosas. Está virgen en estas cuestiones. Cuando se intentó hacer algo fue desdeñado al arte popular, remedado el arte del pasado e ignorado lo que se hacía en el mundo por sus contemporáneos. Dan penas las platerías compostelanas, los esmaltes de los Hernández y hasta las puntillas de Camariñas, con formas copiadas de revistas y muertas. Produce dolor ver como se deja marchar a trabajar en el exterior de peón o de criada a un ebanista o a una tejedora aldeana. Pero la gente se muere por levantar castillos en el aire, hacer estadísticas, molestar a los que hacen algo, en lugar de querer hacer de cada aldea, a partir de su realidad y de sus posibilidades, un centro industrial y de arte. Existen formas gallegas inéditas, están en el paisaje, en los instrumentos de los oficios y en los objetos heredados. Ahí están para quién sepa recogerlos. Pero todos hemos sido educados en una escuela diferente, incapaz de despertar nuestros sentidos y sacar provecho de nuestras posibilidades; dedicados exclusivamente a memorizar y hacer cuentas. Nada de estimular y despertar en el alumno el deseo de creación. Perdóname esto, es un desahogo. Por mi parte siento que he perdido mi vida y me siento cada vez más solo. Paso días enteros sin salir de casa. Dentro de algunos años más seré un viejo huraño y maniático viendo como los demás quieren ir a la luna sin haber podido alcanzar yo el único pedazo de tierra que me interesa y que para mí encierra tantas cosas por descubrir como Marte o ese satélite. Y sin embargo no hacía falta para realizar muchos de los sueños que tuve –ya los rechazo– el dinero de un maldito cohete. En este mundo tecnológico a medida que progresa –no estoy en contra de su progreso– resulta cada vez más maravilloso el cacharro o trozo de madera labrada que hace solamente un hombre. Esto es lo que más admiro yo, el objeto que hace el hombre como hace miles de años, en soledad, y al hombre. Viendo la luna, sin poder alcanzarla, soñándola desde una ventana o desde la cima de un monte y riéndose de la I.B.M. y del automatismo por lo que todo esto tiene de risible.
En estos momentos está abierta en Buenos Aires una de las mejores exposiciones que vi en mi vida, la de esculturas de Henry Moore. Bueno, esto resulta demasiado largo. Escríbeme. Escríbeme de lo que quieras, pero sobre todo del mar de Galicia.
Un abrazo de Maruja y mío para Mimina, Camilo, Rosendo, Xosé y tú:
Seoane
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1965-06-27 |
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O Castro [parr. Osedo, conc. Sada] |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1965 en 27/06/1965
Castro, 27.6.65
Querido Luis:
Hoy, domingo, recibo la tuya del 21, que merece una contestación inmediata para acudir como un San Jordi a matar ese dragón de tu pesimismo. Yo te confirmo las mías del 12, 15 y 22, además de otras cosas, recortes de prensa etc., que te he enviado y que te seguiré enviando.
¿Cómo podría empezar con eficiencia para acabar con ese dragón? Como ese aparato mitológico está dentro de ti no hay más remedio que atacarte a ti. “Por mi parte siento que he perdido la vida y me siento cada vez más solo”. ¿Se puede decir una equivocación mayor? Tú, una persona con tanto talento está visto que no podría decir semejante cosa. Es un dragón que habla por tu boca o que te has tragado un fantasma y lo tienes metido dentro de una glándula. Contra ese fantasma o ese dragón hay que ir y dejarte a ti libre de él para que quedes como eres tú, como es el Luis Seoane que todos queremos y admiramos como artista y sobre todo como ejemplo de conducta humana fuera de la cual no hay ni hombre ni hay arte. Ya sabemos que no es cómodo vivir sobre esas piedras y sobre estos días, pero porque la suerte nos sea negativa no es posible desentenderse de esa realidad sobre la que estamos viviendo y desertar de luchar contra ella. Aquí queda Galicia, así como es, casi todo analfabeto, incapaz de leer un libro y menos de entender un cuadro, con una burguesía corrupta, con mentalidad de sargento de plaza de soberanía africana, más analfabeta de espíritu que el analfabetismo gramatical de su pueblo; pero queda por algunas partes una minoría pequeñísima, casi sobran dedos de las manos para contarlos, que saben en la hora que viven y sobre las piedras en que se ven obligados a vivir. No está todo perdido. Y aunque estuviera perdido todo en Roma San Juan iría hacia ella, a morir en la ciudad de donde Pedro está de vuelta. Es la contradicción interna, y eterna, a través de la que el hombre viene avanzando. Es incómodo vivir en Roma donde parecería que no hay nada que hacer porque todo es vacío y corrupto pero fuera de ella ni San Juan, ni San Pedro, tendrían tranquilidad, porque estaban fuera de la línea de su destino. Tú tienes que pelearte, defenderte, luchar y soportar incomprensiones y estupideces, estés aquí o estés ahí, pero estés donde estés –porque ahí estás, ahí fuiste, para dejar testimonio de algo, para protestar por algo injusto, para dejar una inconformidad airada con algo que no es ético ni estético– donde estés, a regañadientes, protestando, incómodo, no podrás desentender[te] de tu destino ligado con la suerte, no del paisaje sino de los hombres y de las mujeres de Galicia, porque el día que vieses que tus manos estaban fuera de esa obra –aunque la obra parezca tan poco “exitosa”– ese día es cuando te sentirías morir de pena por equivocación. Hazte esta reflexión para que estés contento aún soportando las inconveniencias, idas y venidas, discrepancias y chabacanerías de las gentes que nos rodean. Imagínate a Luis Seoane, desentendido, incomprometido, haciendo arte abstracto en Suiza, “trabajando únicamente en sus cosas” que adquirirían los potentados internacionales. El espectro de esa imagen bastará para que te encuentres feliz entre las inconveniencias de las gentes de la Galicia metropolitana o de la Galicia emigrante, aún con todas esas “manías” que ves en la economía, en la estadística y en la mecánica –que dices ver pero que en realidad es un simple decir tuyo–. La pintura o la música, la industria o la artesanía son manías del mismo tenor. Los pintores pueden creer que los economistas son unos maníacos y viceversa los economistas pueden pensar lo mismo de los pintores. Hay una cosa que no son manías: el espíritu de solidaridad con nuestros semejantes, sobre todo con nuestros semejantes desvalidos que tenemos cerca, desvalidos de alguna forma. Ello entraña en sí una instancia ética y estética. A ella remito todo y no estaríamos dispuestos a desentendernos de ella cualquiera sea la suerte que tengamos que soportar, aunque impliquen burla y silencio. Lo contrario no nos llevaría más que a un malabarismo, un virtuosismo y una torre de marfil. Tú con tu vida nos has dado un ejemplo de esto y por ello nos hemos acercado a ti. El pesimismo de tu carta vertido en tu propio destino no puede considerarse más que como una segregación equivocada de una glándula que estamos seguros que curará y por lo que hacemos votos. Nadie tiene por qué admirar la tarea que satisface hacer a quien la hace, sino aquella tarea que comprende, que al menos sospecha que la comprende, y con su identificación o su posible identificación goza. Hemos de hacer lo que es posible hacer aunque no sea el cielo que todos deseamos, ni siquiera el purgatorio. Si es imposible lo que queremos hacer, si no hay gentes donde aplicarlo, por muy bueno que sea cae en el campo de la utopía. Y no hay más remedio que aceptar la crítica y todo tipo de inconformidad de nuestros semejantes, y hasta sus inconveniencias. La molestia, el escozor, que causa la crítica a nosotros mismos, individualmente, debemos justificarla como una inadaptación que padecemos nosotros. No me refiero, por supuesto, a la crítica artística en la que no hay otro contenido que el de una diversión intranscendente. Como ves escribo como hablaba Platón subido a un pedestal “profundando”. Perdona mi cátedra y mi parvada, pero ¿cómo he de hacer para matar ese tu dragón interno que te tiene desesperado y aislado? ¿O que te quiere aislar? Va una anécdota para descansar: los alumnos de último año de Medicina de Santiago pidieron obras a los artistas para, rifándolas, engrosar fondos para su viaje de fin de carrera. Otero Besteiro les contestó que le gustaba mucho esa idea de ayudar a los estudiantes, etc., y que de muy buena gana entregaría no una sino media docena de obras para el fin que piden, pero... pensando en que mientras los estudiantes de todas las facultades de España se habían solidarizado con la de Madrid a excepción de la de Santiago váyanse Vdes. a tomar por el culo. Esta misma frase voy a emplearla yo si no me autorizan a publicar unos dibujos que ya están en la Delegación de Turismo a censura y que, finísimo y amicalísimo, Serrano Castilla, giró a Madrid so pretexto de que caían fuera de su atribución. La mitad de la frase ya se la dejé caer por carta. Sin miedo y sin resentimiento para con nadie el camino está abierto para muchas cosas. Por naturaleza por intuición la juventud practica esto dentro de lo que nosotros nos debemos mantener por hipótesis.
A otra cosa. Si esa gente de la Asociación quiere ayudar aunque sea poco o procurar la ayuda de otros, no importa el aspecto cuantitativo, se agradece la intención referida de alguna forma. Lo único que es seguro es que las cosas no han de dejar de hacerse. Esa crítica de la Asociación a los del Centro no puedo tomar alcance de ella por las cuatro palabras con que me la expresas, pero no creo que ello suponga ningún inconveniente sino un acicate para afianzar las mentes indecisas, y para dejar constancia de cualquier incontaminación a ultrance. Todo eso tiene como base la tontería mimeográfica de Silva. Sobre el Galicia está visto, a tenor de lo que dices, que aparecen las mismas contradicciones internas. Su precio de costo puede no tener nada que ver con el de venta que puede ser el que se quiera o interese. Su antecedente se está vendiendo muy bien aquí sin punto de comparación con lo que se vende ahí. Está visto que es de este lado del Atlántico donde interesa hacer esto y como se va a hacer. Cabe la ayuda y la crítica para mejorar su contenido, y se ruega y agradece. En cuanto a su realización no cabe más que ayudar en lo que buenamente se pueda. Estoy preparándole una exposición a Laxeiro. Por la índole de lo que le digo en la carta que te adjunto mucho agradecería se la entregases tú sin que, a lo mejor, se entere Lala. Muchas gracias. Colmeiro también quiere hacer otra exposición en La Coruña. Vamos a ver. Sigo sin poder mirar el paisaje; dicen que está precioso. El mar ¡Ay el Mar! azul, se ve desde tu estudio al pie del Breamo como algo que entró en estos valles y se quedó dormido en una tarde de primavera. Cuando lo miro desde tu ventana se agradece que no se haya ido aún.
[Manuscrito na marxe esquerda da primeira folla:] Apertas a Maruxa e a ti de tódolos desta casa. Voso
Isaac
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1965-06-28 |
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Bos Aires |
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada] |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1965 en 28/06/1965
Buenos aires, 28 de junio de 1965
Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro
Mí querido amigo:
Recibí tu última carta con la copia de la tuya a Villamarín. Este debe estar a punto de verte, en España, o de hablarte, salió de aquí con el hermano hace cuatro días. Yo no pude hablar con él y no tengo manera de referirme al asunto a que te refieres sin discutir con alguien de la Junta Directiva. De modo que desistí de hacerlo. La carta que propones se envíe con los ejemplares yo no puedo proponerla, ni nadie que respete los veinticinco años pasados del Centro Gallego. Puede hacerlo un particular, allá él quién lo haga, pero no una institución que mantuvo durante todos estos años una línea de conducta con respectos a estas cuestiones. Habla con Villamarín. Como ves pensamos de modo distinto en estos asuntos. El trabajo sobre arte creo que ya te dije en otra carta, sale incluido en la revista y sólo mil separatas aparte. Esto es todo lo que se consiguió, y, para esta decisión, se prescindió de cualquier opinión mía. Bueno, creo que saldrá en la primera quincena de julio. Y yo no pienso más sobre éste. La Sociedad de Artistas no se adhirió. Todas las otras sí. Me alegro de tus éxitos con Valentín y Celso espero que éste no olvide que los primeros poemas del carácter que buscáis nacieron en América, en gallego, y luego que esos en castellano de Pimentel, y antes que los de él mismo; es posible que no los conozca.
Buenos Aires está insoportable con un clima que resulta una mezcla de los de Londres y Río de Janeiro. Humedad, niebla, calor y es invierno, la gente ya se decidió a vestirse con ropa de verano. La exposición de Henry Moore es una revelación para todos, aún para los que conocíamos la obra suya. Junta es una exposición, con tan gran cantidad de piezas grandes y pequeñas, y dibujos y bocetos, etc., es algo maravilloso y prueba la existencia de un escultor realmente extraordinario. Ojalá pudieran verla algunos escultores gallegos capaces solo de herir el granito dejándolo lastimado por sus cinceles sin conservar su valor de bloques de piedra, convirtiéndolos, a un tiempo, en grandes obras de arte. La máxima libertad unida al más grande rigor. Me hubiese gustado que la pudieses ver. Laxeiro trabaja bastante. Expone a partir de mañana en la Galería Lascaux, creo que va a ser una exposición muy importante.
Bueno, cuéntame algo de por ahí que se refiera a la naturaleza, a las gentes, a algo de lo que pudo impresionarte en París. Un abrazo nuestro para todos vosotros. Escríbeme aunque no estemos de acuerdo en algunas cosas. Otro abrazo de:
Seoane
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1965-07-10 |
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Bos Aires |
Vigo |
Orixinal
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Seoane a Fernández del Riego. 1965 en 10/07/1965
Buenos Aires, 10 de Julio de 1965
Sr. D. Francisco F. Del Riego
Vigo
Mi querido amigo:
Recibí por correo aéreo el primer ejemplar de la monografía que quedó muy bien y por la cual os quedo muy agradecido a García Sabell, Xohan Ledo y a ti. Me gustó mucho la tapa de Xohan Ledo, la distribución y el color de ella y el texto de García Sabell, algunas de cuyas afirmaciones recordaba de su conferencia de la Asociación de Artistas de La Coruña, que me parecen exactas e increíbles, en cuanto me favorecen, que se refieran a mí. Exacta asimismo su ficha antropológica, en lo que conozco, que, como le pasa a cada persona, no es demasiado y muy acertados sus juicios sobre mi arte. Espero que me envíes los ejemplares convenidos lo más pronto posible, si no los has enviado aún, para poder colocarlos en las librerías de ésta y me digas el precio del ejemplar para, de acuerdo con Cabrera, poner su precio a moneda argentina. Estoy seguro que va a ser muy bien recibido por la minoría que aquí se ocupa de estas cuestiones. Aparte de esto no he recibido carta alguna tuya en respuesta de la última mía de hace algo más de un mes en la que creo te decía, entre otras cosas, que volví a la dirección de la revista del Centro Gallego. Tambien te hablaba de la monografía de Laxeiro que van a preparar Lorenzo Varela y él. Laxeiro inauguró estos días una nueva exposición en ésta con mucho éxito. Se trata de una espléndida muestra para mí la mejor, más unida, de cuanto hizo hasta ahora. A Laxeiro le hizo muy bien su estancia en Buenos Aires, el establecer contacto con otra pintura y otros artistas para situarse de manera más definida en nuestra época, proyectarse en nuevas búsquedas sin que le apremiasen para vivir los posibles clientes que solo gustan del tema pintoresco. Por otra parte Buenos Aires, con sus dos mil exposiciones anuales y sus grandes exposiciones internacionales, se está convirtiendo en una de las tres o cuatro capitales del arte del mundo.
De los amigos de ahí no sé nada. A tí te envié por Díaz Pardo, que supongo te habrá entregado, la última carpeta de grabados mía, un bestiario, que está ya agotada, y, por este año, es posible que no publique nada nuevo, limitándome a pintar y grabar. Esto es todo, escríbeme, envíame alguna noticia. No recibí el cancionero que me enviaste. Se lo compré a Follas Novas. Es espléndido y muy notable la labor de Rodrigues Lapa.
Un abrazo de Maruja y mío para Evelina y para ti;
Seoane
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1965-11-05 |
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Bos Aires |
O Castro [parr. Osedo, conc. Sada] |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Seoane a Díaz Pardo. 1965 en 05/11/1965
Buenos Aires, 5 de Noviembre de 1965
Sr. D. Isaac Díaz Pardo
El Castro
Querido Isaac:
Recibí dos o tres sobres tuyos conteniendo recortes de diarios que te agradezco y no sé si te debo carta o eres tú quien me la debe a mí. Es lo mismo. Anteayer se cerró una nueva exposición mía de témperas y estarcidos que tuvo mucho éxito, vendiendo algunas de ellas, y en los primeros días de diciembre sale un nuevo álbum de grabados, 32 refranes criollos que edita EUDEBA, once mil ejemplares la primera edición y cinco mil más reproducidos en edición de bolsillo. Una aventura para la editorial universitaria y para mí que de salir bien puede abrir nuevas posibilidades de trabajo a grabadores argentinos. Se trata de grabados muy populares que ilustran refranes muy conocidos en el país. También a principios de este mes sale una carpeta de gran formato que reúne a diez grabadores de aquí, en ella se incluyen seis grandes grabados míos, nuevos, que hube de hacer conjuntamente con los otros. También para fines de ese mes, diciembre, me encargaron de la municipalidad, sección cultura, los decorados para El Trébol Florido de Alberti a estrenarse en un parque de Buenos Aires en uno de los teatros de verano. Al mismo tiempo que todo dibujé algunas joyas conjuntamente con otros pintores para una joyería de Buenos Aires y destinadas a ser expuestas en el exterior. Te hago un resumen de mi trabajo actual. Estuve con Laxeiro al día siguiente de su regreso, me habló de todos vosotros de quienes viene encantado, de Mimina, de ti, de Camilo, Rosendo y José. También me habló y me lo describió el estudio que me habéis destinado y que os agradezco profundamente, mucho más de lo que pudiera expresaros por carta. Estamos deseando estrenarlo y quizás sea en enero, si consigo hacer todo lo que debo para esa fecha. En todo caso será cuestión de días de diferencia. Laxeiro me habló de la gente que vio ahí y en Madrid y me dio una opinión bastante exacta, creo, sobre la actualidad hispánica. De aquí no tengo nada que decirte en cuanto a la colectividad. Apenas sé nada de ella. A Ramón también lo vi una o dos veces. Como es característico en él no se enteró de nada, o únicamente de lugares comunes y si algo va caracterizando estos últimos años es el repudio a los lugares comunes, de las frases hechas y de las ideas fijas. Cada vez se cree menos en la salvación por las frases. En cuanto a la Argentina estamos como si quisiéramos llegar a alguna costa lo mismo que náufragos sobre una tabla, siempre a punto de que una nueva tormenta o algún tiburón trate de impedirlo. Te supongo enterado de todo esto. Espero el Castelao. El distribuidor tú lo conoces de sobra. Aquí las gentes del ambiente artístico y otras se preparan a hacer un homenaje a Arranz con motivo del 25 aniversario de la fundación por él de la Escuela de Cerámica. El seis de diciembre se proyecta ofrecerle un banquete. Me gustaría que hicieses un artículo sobre él para La Voz de Galicia y mandases tu adhesión. Puedes decir en el artículo que fue muy amigo de A. Machado, Valle Inclán y Azorín en su época de Segovia, de todos los Zuluega y cuñado de Emiliano Barral además de gran amigo. Otras noticias no tengo, únicamente que Antonio Muiño se marcha el día 4 de Diciembre a vivir a Nueva York con un nuevo puesto de periodista. Las que te envío hoy quizás no sean demasiado importantes. Saludos a todos los amigos comunes, a Mincho, Pillado, Bocelo, Barros, Fuentes, etc., a los de la Asociación de artistas y especialmente a los Dieste. De Rafael acabo de recibir su libro, muy bueno, del que tengo que acusarle recibo. Escribe. Dime como está el otoño en Galicia y si las rías guardan recuerdo de nosotros, de todos los que un día las abandonamos. Aquí los fuertes vientos del norte o del sur acaban por llevarse todos los recuerdos. De nada queda memoria.
Un gran abrazo a Mimina, A Camilo, Rosendo y Xosé y a ti, de Maruja y mío. Hasta pronto:
Seoane
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1966-08-20 |
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Bos Aires |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1966 en 20/08/1966
20.8.66
Sr. Luis Seoane
BUENOS AIRES
Querido Luis:
Llegué mal peor que salí. Cama, etc. Y aún no he eliminado de todo los efectos de los antibióticos. Mucha gente como consecuencia de la época y el encuentro con los problemas esenciales me dejaron sin tiempo y más desorientado que de costumbre. Hoy al fin te pongo estas líneas.
Aquí, cuando llegué, tenían organizada una exposición de Maside. Te envié un catálogo. Se celebró una velada literaria en la que intervino Mon, Martínez Barbeito y yo. Yo me limité a hacer una crónica de la velada que se le había hecho en Bs. As. hace ocho años a raíz de su muerte y en la que había pronunciado una conferencia Dieste y en la que habías intervenido tú y Laxeiro. Leí, pues, parte de lo que aquella noche habíamos dicho. La muestra, que con buena intención provocó Antonio Baltar y ayudó Dieste, Mincho y Mon, no ha sido un ejemplo de organización. El ayuntamiento, por gestión del padre de Míguez les dio diez mil pesetas, y se realizó en una sala decorada con estilo mostrenco-románico-feudal que ha montado un tío pesado que se llama Lombera donde antes estuvo Boedo al final de la calle de San Andrés. Ahora está exponiendo Tomás Barros en la Asociación de Artistas cosas muy buenas y cosas muy malas. Este muchacho no anda bien. Su vieja manía persecutoria que una sociedad secreta histórica vendría dirigiendo contra los intelectuales a través de objetos-símbolo e individuos utilizados como agentes inconscientes empiezan a transcender a la vía pública en manifestaciones de matiz paranoico. En la exposición hay también signos de su estado psíquico, entre otros que ha puesto precios a los cuadros desde 500 pesetas que no le cubren el valor de los materiales empleados en ellos.
Los Dieste estuvieron dos días por aquí. Muy bien. Recuerdan a la Argentina con sus amigos con visible nostalgia. De Laxeiro, que está en Vigo, nada sé, ni alcancé a ver a Mariví. Al director de Vieiros, que yo tenía ganas de conocer personalmente parece ser que el mes pasado por las fiestas del Apóstol la policía lo agarró y lo devolvió a Méjico ¡un hombre que tanto ama a Galicia que le puedan hacer esta cosa tan desconsiderada en su propia tierra! Desde luego se nota que hay reacción contra Galicia pues hasta aquellos fragmentos del Evangelio en gallego que se venían publicando han dejado de salir en La Noche. Esto entre otras muchas cosas. A Alberto le iniciaron un proceso por lo del libro de Castelao. ¡Es el colmo! Claro que esto no creo que pueda prosperar. El éxodo del campo sigue y este está en un abandono sin precedentes. Se leen cosas en la prensa reaccionando contra esto. En el campo donde Galicia tenía guardado su historia podría estarse ubicando una punta de la confabulación para aventar los restos de lo genuinamente gallego, porque si sumas que la presión turística impersonal con su avalancha de plástico y cocacola lo va vulgarizando todo y pensando que en algún momento tendrá que acometerse lo del campo, no sería extraño que se trajesen técnicos agrícolas y braceros extranjeros para solucionar el problema. Como tú no vas a tardar en venir tendrás ocasión de ver las cosas con tus propios ojos. Celso Emilio al emigrar para Venezuela dijo unas palabras ejemplares: “Tenemos que aspirar a que Galicia además de ser una tierra para nacer y para morir sea también una tierra para vivir”.
Sargadelos: ando a vueltas con el anteproyecto con Albalat. La idea creo que va por buen camino y que te gustará. Estamos coordinando la idea de la planta según el arquitecto con la nuestra, es decir: con la función que ha de cumplir. Casi estamos de acuerdo. Una vez que tenga las líneas visuales del alzado las conocerás tú para que digas tu opinión. Estoy viendo que se va a ir mucho tiempo en todas estas cosas, pero ya a estas alturas interesa hacer una cosa muy bien hecha y que resulte verdaderamente ejemplar.
Por todas estas cosas es conveniente que tú me tengas al tanto de vuestras fechas de viaje y que desde Alemania o desde donde te encuentres nos enviéis vuestra dirección para comunicarnos.
Tu estudio sigue esperando por ti. Es una pena que tengamos un pueblo tan poco preparado para entender de arte o de otra cosa. Indudablemente la culpa no es de él, sino, como diría Dieste, de su clase dirigente rufianizada, adinerada y condecorada, que, naturalmente, tampoco puede valorar el arte. Pero tal circunstancia no debe de cambiar nuestro rumbo, especialmente el tuyo, de perfeccionar una determinada faceta del espíritu. Y yo por ahora junto con mi irrenunciable orgullo de emigrante puedo jactarme de admirar tu obra. Emigrante o presidiario son destinos buenos por vía de ser leal antes de renunciar a querer mirar para las cosas.
Mientras tanto miro con inquietud lo que sucede por la Argentina. Eso de la Universidad me da ganas de llorar.
Si se te ocurre no dejes de poner unas líneas diciendo lo que te parezca.
Un abrazo a Maruja y otro a ti de
[Díaz Pardo]
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1976-03-17 |
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Sargadelos |
Bos Aires |
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Transcrición
Transcripción da epistola Carta de Díaz Pardo a Seoane. 1976 en 17/03/1976
17 de marzo de 1976
Sr. Don Luis Seoane
Buenos Aires
Querido Luis:
Llegué ayer del Castro y aquí me encuentro tu carta del 9 cte. que se cruza con la mía del 11 idem, pero luego de contestarte esta esperaré a que me la contestes para volverlo a hacer yo y evitar tanto cruzamiento que te obliga a trabaja doble. Por el Castro las cosas siguen. Las obras continúan. Nuestros enemigos no han respondido a nuestros planteamientos. Vamos a ver por donde salen. Pues este silencio creo que debemos interpretarlo como una pausa para replantear un gran ataque, que puede venir por donde menos esperemos. Estuve con los abogados. Dónega de lo del Museo no hizo nada, ni siquiera el acta.
Empezando por el final de tu carta en relación con eso de que Varela viene para Madrid en esta semana, y como no dices otra cosa alerté a Inés y a Marcial para ver si lo localizan, pues naturalmente quisiera atenderlo. También del final de tu carta es eso de que no te ha llegado el L[aboratorio de] F[ormas]. Anteayer mismo estuve insistiendo en el Castro para que sea a ti al primero que se envíen los primeros ejemplares, por correo aéreo. José Luis es él el que se siente quedar mal si las cosas no te llegan porque al parecer fue él el que se comprometió contigo a enviártelas y al parecer te las están enviando por correo aéreo certificado y tienen los resguardos. Pero te lo volverá a enviar inmediatamente.
En cuanto a ese párrafo de mi carta del 22.2 que no entiendes, sin embargo creo que está claro: primero y hasta hace poco no hicieron otra cosa que atacarme a mí; luego en las primeras negociaciones trataron de echar toda la tierra sobre estos tres muchachos (los Vázquez y Marentes) y tampoco tuvieron éxito y ahora te involucran a ti en el asunto. Hasta ahora te habían tenido al margen y en un principio Mora no sólo te respetaba sino que te elogiaba en aquellas célebres actas. Ahora arremeten también contra ti como contra cualquier hijo de vecino; que entre tú y los Vázquez y Marentes los habríais engañado a ellos para desplazarme a mí. Todo esto es infantil como solución y como división creo que es no conocerme a mí. Si el que tomó ahora directamente las riendas del pleito es Iglesias Corral no cabe duda que de él será esta nueva estrategia. Estas cosas que cuentas en tu carta de tus últimos es con Iglesias a partir del año 73, ya el pleito llevaba dos años, entrarían perfectamente dentro dencuentro la estrategia que ellos habían montado entonces para cercarme y atacarme. (Ellos no te conocen bien a ti, ellos son especuladores, y no saben que tu inconformidad constante con el mundo que te rodea pertenece a tu idiosincrasia, no es negociable; los especuladores no pueden entender que alguien proteste si no es para hacer negocio; este es el fracaso de los hombres que se creen prácticos). Así que como su estrategia les fracasó ahora (o mejor que ahora en la entrevista esa con Nogueira) utilizan el mismo procedimiento pero contra ti. En cuanto a que tú no has tenido nada con Iglesias te remito a tu propia carta del 23 de feb[rero]. Tu opinión de Iglesias la vienes sosteniendo sin reservas desde que te conocí o reconocí en América. Desde que se había fundado el Castro hasta que yo me fui a América Iglesias Corral visitaba mucho el Castro a donde iba con Matías Gonzalez, Castro Rial, Tarracido. Yo fui quien se lo presenté a Rey y él supo pegarse muy bien a los Rey y a los Nogueira y pronto pasó a ser más amigo de ellos que mío: Con bastante frecuencia tenemos comido juntos y en una ocasión hicimos un viaje por la costa desde La Coruña a Villagarcía en la que visitamos la factoría ballenera de Caneliñas, que acababan de adquirir Iglesias y C. Rial (creo que alguna fotografía que hice aquel día la publicaste en Galicia Emigrante). Pude conocer de él bastantes cosas, algunas anécdotas, sus relaciones con Franco de cuando él era alcalde, saber de su superstición, de su aparente afición al juego y a hacer solitarios para disimular y adormecerse en el terrible entorno... Aunque yo le he defendido siempre por cortesía sistemática y por esa mi manía de querer unir las pocas cosas que tienen algún cabo para atar algo (comprenderás que en aquellos momentos en que lo mejor era Rey y Nogueira, Iglesias y Tarracido eran personajes de excepción). Sin embargo no dudé en retratarlo en el personaje nº 12 de mi Presa de dib[uxos] de xente do meu rueiro. A la vuelta de uno de mis primeros viajes a la Argentina yo le hablé de ti y pude ver que él tenía conocimiento de lo que tú pensabas de él y de Felipe F[ernández] Armesto (no sé por qué me parece recordar que tú habrías publicado algo de ellos, lo cual aunque no fuese cierto, entraría dentro de un cálculo razonable de probabilidades en un esfuerzo memorístico, pues con menos razón me habías metido a mí en el tercio...). Lo que sí recuerdo bien es que Iglesias contrapuso a tu figura la “gran capacidad” y la “visión” de su amigo Arturo Cuadrado, al que estaba deseando abrazar. También recuerdo bien que yo le hice ver el equívoco que tenía respecto a ti y le dije de ti todas esas cosas que yo tengo dicho de ti públicamente en letras de molde. Cuando en el año 63 (creo que fue en el 63) te monté en la Asociación de Artistas aquella de grabados la compra que te hizo él suponía una superación ante mí de todos los equívocos aceptando el pacto para el futuro, aún no entendiendo tu obra y que él jamás compró en su puñetera vida un cuadro (está la formidable anécdota en aquel momento de Rey Barral). Todas estas cosas y recuerdos vienen ahora a cuento de la aclaración que me pides. Pero si busco aún hay más.
Pero sin que me lo pidas en tu carta debo aclararte más cosas de la mía para que no quede incompleta algo de su sentido general. Se trata del siguiente párrafo de mi carta del 22.2 que empieza “Ahora bien lo que conviene es que hagamos todos causa común...” porque naturalmente estos señores para apoyarse en sus malévolas pretensiones señalan tus desahogos impacientes contra mi labor, que dicho sea de paso tú no tratas de disimular, que a mí no me ofenden porque forman parte de tus desahogos contra muchos más, como una especial idiosincrasia que siempre se produjo en todo creador de arte como una especie de incomprensión de la obra ajena inseparable de la protección, de la justificación de la razón de la propia y que le da sentido; “me gusta lo que me gusta y me gusta que me guste...” Pero ellos estas cosas no las entienden más que por el lado del partido que puedan sacar de ellas, y en algunos casos las oyen amigos que lo son también de ellos y a veces socios. Por esto pido que hacia dentro podemos hacer cuantas críticas queramos, pero las empresas con sus 200 personas que vivimos de ellas, todos, con todo lo que significan, no pueden permitirnos el lujo de llevar las discrepancias a la calle, y sobre todo mientras dura esta difícil situación frente a la cual, a las dificultades de todo orden que hay que superar, constantemente asediado, en medio de un clima muy difícil, económico y social, todas las demás cosas han de tener mucha menos importancia y las inconformidades se han de quedar dentro de casa. Simplemente en lo que llevamos de mes hemos tenido que superar dos denuncias policiales: una en el Castro atribuyéndome que yo enviaba a un hijo a Vigo a organizar en cabeza una manifestación de la Junta democrática (ni ninguno de mis hijos habían ido ni yo estaba enterado de nada); otra contra la Galería de Madrid que se trataba de un centro clandestino y la dieron un sustazo a Inés que por un poco la matan. Etc., etc. Está claro que si queremos salvar las cosas hemos de tener los nervios bien templados y presentar ese carácter monolítico frente al exterior.
Separo de tu carta la nota sobre tu Grosz. Es una pena no saber alemán. Te va esa nota de Arteguia sobre el Museo. Supongo que los datos estarán dados por Tucho pues la nota está enterada de muchas cosas y mía desde luego no es.
Garcés me dio un original bilingüe, muy amplio, sobre la poesía gallega desde la guerra civil. Puede ser un buen texto de consulta. Se lo publicaremos.
Tus Figuraciones en La Voz a mí me tienen mucho interés. Es la razón por la que estamos archivando el suplemento de La Voz. Creo que es lo más importante que se publica en la prensa gallega, que no tiene importancia que los personajes sean o no gallegos, que tienen el valor de ser unos personajes importantes vistos por ti, descritos en gallego con unas circunstancias en las que tú lo ves y que tienen un interés particular. Creo que por todas las cosas tú deberías seguir haciendo esta sección en la medida que te sea posible. Y aún cuando La Voz de Galicia puedan ponerla contra nosotros, cosa que es muy probable y hasta razonable pensando en los intereses familiares que la respaldan sumados ahora a los de Iglesias secretario del Consejo de Administración. Yo creo que siempre que puedas esa sección no dejaría de hacer[la]. Esa sección debe estar por encima de cualquier otra contingencia pues todos nos beneficiamos de ella, y a ti el único daño que te hace es que no te la paguen, pero las cosas han de mejorar.
Vemos con pena la situación de la Argentina. La de aquí va hacia algo parecido, desgraciadamente. La demagogia prende en todos los estratos políticos. El único que es consciente en esto es el gran capitalismo que es su última forma de supervivencia, alargando unos días más los que le quedan. La tasa inflacionaria aquí ya se da oficialmente en lo que va de año en un 20%. Las devaluaciones se sucederán, mientra la economía se empieza a hacer desesperante. No se sabe lo que va a pasar. El problema está por encima ya de las naciones. Creo que lo único que se puede hacer es tratar de resistir y defender lo que tenemos. Vosotros si veis que eso está muy mal veníos. Aquí nos defenderemos como podamos. Pero no hay que perder el ánimo. Hay que seguir en la tarea con esperanza.
Nada más por hoy. Abrazos muy tensos para ti y para Maruja
Isaac
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